celoso

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El entrenamiento del viernes todavía no daba inicio.

Solo esperaban sentados en el césped la llegada de los compañeros que presenciaron el partido en contra de Surinam.

Diego y Kevin solo habían entrelazado sus miradas un par de veces, no querían levantar sospechas de algo.

Afortunadamente para el día de hoy, los golpes en el rostro de Kevin ya no eran tan visibles. Algunos le preguntaron qué sucedió. Kevin invento una historia, diciendo que había tenido una pelea con su vecino, llegando hasta los golpes.

Kevin relato las cosas con un tono que parecía que estaba siendo totalmente honesto.

Sus compañeros aceptaron la historia de Kevin, finalizando la sesión de preguntas.

—Henry, ¿a qué hora van a llegar? —pregunto Hirving al jugador del club América.

—Se supone que a la una. ¿Ahorita que hora es?

—Doce cuarenta y cinco. —respondió Kevin, después de sacar su teléfono y encenderlo.

—No deben de tardar mucho, entonces. —dijo Diego, la mirada de Kevin se puso en él.

—Yo creo que no. —Chávez hablo. Sus compañeros le dirigieron la mirada.

—Luisito. ¿Julián y tú que son? —preguntó Raúl Jiménez, tomando del hombro a Luis, tratando de convérsele para que le diera una buena respuesta.

—¡Dejen al pobre Luis! —soltó Diego. Kevin sonrió al castaño.

—No seas metiche, wey. —Hirving quito la mano de Raúl del hombro de Luis.

—Ya, está bien.

—Hoy ni siquiera vamos a entrenar de seguro. —Cesar Montes agitaba sus pies al aire de manera tranquila.

—Nadie nos asegura eso, Cesar. —dijo Gallardo.

—¿Creen que mañana nos vayan a dar el día libre? —Luis Romo pregunto.

—No sé. —Héctor Moreno respondió.

—Estaría con madre, se antoja salir un rato. —los compañeros rieron en sintonía al escuchar el comentario de Jorge Sánchez.

—No mames wey, no vas a jugar crudo al siguiente día. —dijo Orbelín Pineda.

—Pues en mis planes no estaba el tomar. —contraataco Sánchez.

—¡Ay! Cállate Jorge. —jocoso se burló Hirving.

Las risas aumentaron su volumen. Hasta que el sonido de un bus frenando se hizo presente.

—¡Ya están aquí! —Luis corrió hacia la entrada del lugar. Estaba muy ansioso, necesitaba ver ya a su amado Julián.

Los demás le siguieron, pero con paso tranquilo, de manera simultánea Kevin y Diego caminaban juntos, una sonrisa ladina se formó en sus rostros. Al ya estar fuera; las puertas del bus ya se habían abierto.

Comenzó bajando el director técnico Diego Cocca, quienes le esperaban le recibieron bastante felices.

—¡Hola! —saludo el director.

Luego de él, le siguieron: Gerardo Arteaga, Erick Sánchez, Uriel Antuna, Néstor Araujo, Johan Vásquez, Roberto Alvarado, Carlos Rodríguez.

Ni Edson ni Julián bajaban todavía, Luis movía sus manos expectantes.

Hasta que un chico teñido de rosa salió del bus, Luis en ese mismo momento reconoció a Julián y le abrazo, tomando a Julián por sorpresa.

—¡Luis! —soltó Araujo con felicidad, colocando sus manos en los hombros del centrocampista.

rendido ➸ kevin x diegoWhere stories live. Discover now