rendido ➸ kevin x diego

regreso

Todo salió bien para ambos.

Diego oficialmente estaba de regreso con el equipo de sus amores.

Todo fue gracias a Kevin y Luis, quienes lo apoyaron de manera incondicional, firmó su contrato el día miércoles, justo el día en el que Kevin y Luis tenían que regresar al Pachuca.

Aunque los amigos viajaron hasta en la noche, tuvieron la oportunidad de pasar el día entero al lado de Diego.

Lainez fue recibido de manera cálida por sus compañeros y la afición, quienes estaban felices de que Diego regresara y no eligiera al club de Tigres.

Las cosas estaban avanzando de mejor manera.

No sabía siquiera como agradecer a Kevin ni a Luis, luego tendría una buena idea. Aquellos favores merecían ser recompensados de la mejor manera.

Cuando cayó la noche, Diego se encontraba en el departamento de Kevin; pues el pelinegro tenía que alistar sus maletas para su estancia en Pachuca.

Estarían separados por más de dos semanas.

—Creo que ya tengo todo listo. —murmuró Kevin, cerrando la maleta que se encontraba encima de su cama.

—¿Estás seguro de que tienes todo listo? —Diego le miraba de arriba para abajo.

—Sí.

—Creo que se te olvida el hecho de que no tengo tu número de teléfono. —Kevin nunca tomo aquella cosa en cuenta, porque estando en su departamento tenia a Diego sumamente cerca, pero ahora estarían bastante lejos.

—Dame tu teléfono. —Kevin saco el aparato de sus bolsillos, lo desbloqueo, para luego entregárselo a Diego.

Pulso un par de veces la pantalla. Cuando finalizo la acción le regreso el teléfono a Kevin.

—Gracias. —murmuró el pelinegro mirando la pantalla, sonrió una pequeña risa, Diego guardo su contacto como "Dieguito <3".

—¿Por qué Dieguito?

—Porque estoy chiquito. —respondió el castaño, su estatura para el no resultaba un problema sin embargo varios jugadores en la cancha se creían que por eso Diego era muy indefenso.

—Aw si, eres un bebé. —se burló Kevin. Una llamada interrumpió. —Es Luis. —dijo Kevin antes de responder.

—¿Ya estas afuera? —Bien, si ya bajo. —Kevin miro a Diego.

—Luis ya está esperándome. —Kevin tomo su mochila y su maleta. Diego se levantó de la cama.

—Te veré en abril. —dijo el castaño, posicionándose en frente de Kevin.

—Claro.

Diego no espero más y abrazo a Kevin. —Espero que te comuniques conmigo y no me dejes en el olvido. —decía en el abrazo.

—Prometo que te escribiré.

—Muy bien. Cuídate.

—Tú también, disfruta tu regreso en el América.

—Lo haré, gracias por ayudarme a hacerlo posible.

—No tienes nada que agradecer, estoy dispuesto a hacer cualquier cosa por ti. —dijo Kevin sin pensarlo, las mejillas de Diego se sonrojaron.

Lentamente ambos se separaron. Comenzando a caminar hacia la salida del departamento.

Kevin le dejo fuera de su departamento, para luego irse corriendo al estacionamiento donde Luis ya llevaba buen tiempo esperándole.