Capítulo 15

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Mientras el cabeza calva había estado al mando, alimentaba al grupo 1 en abundancia y proporcionaba sólo la comida suficiente para evitar que el grupo 2 muera, eso estimulaba las ganas de otros de subirse al carro del Grupo 1. Sin embargo, cuando vieron a Tae Yoojung alimentando al Grupo 3 por completo, las personas del Grupo 2 se sintieron extrañas.

No había razón para soportar la tiranía del malhumorado calvo si se podía conseguir comida en otra parte. Casi todos los miembros del Grupo 2 pensaban lo mismo. Entonces Tae Yoojung se acercó a ellos.

"Te daré algo de comer también".

"Yo... ¿Hablas en serio?", preguntó un hombre de mediana edad, representante del grupo 2. Tae Yoojung respondió con calma con una cara tranquila.

"Por supuesto."

Tae Yoojung distribuyó entonces al Grupo 2 la misma cantidad de comida que había dado al Grupo 3. La gente estaba primero sorprendida, luego encantada, y el miedo de sus corazones pareció disiparse al pasar de ser los receptores de una pobre limosna a compartir la comida a partes iguales.

"Está delicioso".

"En realidad... es realmente delicioso".

Varias personas del grupo 2 derramaron lágrimas frente a Tae Yoojung, que no habló por mucho tiempo y se fue.

"Guardemos el resto de la comida aquí."

"De acuerdo."

Wonhyuk y Tae Yoojung pusieron las cajas de comida sobrantes en un pequeño almacén.

"¿Qué podemos hacer? Sería un gran problema si ese hombre con aspecto de matón apuntara a estas cajas de comida".

Tae Yoojung estaba muy preocupado porque había experimentado una pelea por comida en el dormitorio del monasterio. En este punto, de alguna manera, la escasez de alimentos era un monstruo más aterrador que los zombies.

"Incluso si hyung y yo nos turnamos para vigilar, no creo que vaya a importar mucho ya que nos superan en número... Ja. ¿Qué podemos hacer?, no hay forma de defender la comida si no hay algo como un candado".

"Porque no hay candado"

"¿Sí?"

Wonhyuk frunció el ceño y rebuscó en su mochila en el suelo. Sacó un candado de última generación. Era un candado sencillo y anodino que parecía algo que encontrarías en tu papelería local.

"Oye, calvo".

El cabeza calva, que estaba sentado con sus subordinados masticando calamares secos, miró a Wonhyuk en estado de shock.

"Aquí puse una cerradura de última generación en la puerta. Si alguien que no sea yo lo toca, recibiré una notificación, ¿Qué crees que haré entonces?"

"Eso... eso es".

El calvo tartamudeó, tal vez avergonzado por la pregunta inesperada. A primera vista, no parecía haber características peligrosas. Sin embargo, captó el espíritu de lucha en el rostro travieso de Wonhyuk.

"Te lo repetiré. Si te sorprendo manipulando este candado, ¿crees que te dejaré sacar y comerte lo que hay dentro, o crees que me enfadaré contigo?".

Wonhyuk pasó un brazo por los hombros de Tae Yoojung y le miró.

"¿Qué opinas, padre?"

"...Creo que la respuesta ya está decidida".

Me alegro de que estés de mi lado, de lo contrario me habría metido en un verdadero problema. Tae Yoojung dejó escapar un profundo suspiro y salió del almacén.

Los zombies caen del cielo como lluviaWhere stories live. Discover now