Me enamore de la hermana equivocada.

Capitulo 38: Las Cartas De Anna.

-como que Anna se ha ido? Y se llevó a mi hijo? - dice Andreas desesperado, donde diablos fue esa mujer, el niño aún necesita cuidados, no puede andar por la Calle como si nada.

-Andreas... Será mejor que leas su carta... Quizás allí explique las razones - Andreas abrió la carta que tenía escrito su nombre

Querido Andreas: antes que nada quiero pedirte perdón por todo el dolor que te hice pasar, por haber huido antes de nuestro matrimonio y por haber interferido en tu relación con Emma. Hay verdades que debo contarte, no soy tan valiente como mi hermana, por eso lo hago por medio de una carta. Primero quería decirte que el día que hui, hui con mi amante, él se llama mariano López, es el amor de mi vida... No sabía que hacer, no quería hacerte daño, habías sido una persona muy buena y dulce conmigo, pero lamentablemente hice más que eso... Sé que al principio casarte con Emma fue una obligación, un trámite qué te obligue a hacer para no manchar tu reputación, pero sé que pasado el tiempo ambos se enamoraron y estoy muy feliz por eso, tú no sabes lo que sufrió Emma por ese malnacido, y haberte encontrado a ti y haber aprendido a confiar en ti  es algo que nunca pensé ver en Emma, pensé que mi hermanita nunca podría superar su abuso y menos que fuera feliz con un hombre y gracias a Dios que me equivoque. Quiero que cuides de ella Andreas, por nada del mundo le hagas daño, Emma es un ser bondadoso qué jamás le haría daño a nadie, al contrario, daría su vida por todos nosotros. Otra cosa que tenía que contarte es que... No eres el papá de leo, juro que me siento muy mal por eso, nunca debí engañarte Andreas y lo lamento, estaba tan desesperada, mi embarazo no venía bien, y mi hijo tampoco, sabía que necesitaría cuidados al nacer y que con la pobreza en la que vivíamos mariano y yo jamás nos podríamos dar el lujo de esos cuidados... Quería que mi hijo fuera parte de una familia con dinero y no me importo hacerle daño a mi hermana, y a ti y te juro que estoy muy arrepentida por eso. No se preocupen por mí ni por leo, estaremos bien, iré a buscar a su padre y ser felices como una familia. Por favor cuida de mi hermana es lo único qué puedo pedirte, con amor Anna - Andreas no puede creer lo está leyendo y Emma mucho menos, su hermana se había vuelto loca... Pero eso es lo que hace el amor, piensa Emma.

-tú sabías Emma... Verdad? - Emma lo mira confundida, no sabe a que se refiere.

-a que te refieres Andreas...

-Emma, tú sabías que ella había huido con su amante - después de unos segundos de silencio, Emma contesto con la verdad.

-si Andreas yo sabía, pero te juro que lo hicimos para no hacerte daño, mi hermana se encontraba atrapada en un casamiento sin amor, solo por interés... Anna amaba a mariano.

-no puedo creerlo Emma... Y encima me mintió con lo del niño... Tú lo sabías también... - no servía de nada que Emma le mintiera.

-si lo sabía Andreas...

-aun así querías divorciarte de mí...

-no Andreas, yo lo supe cuando nació el niño, mi sacrificio fue genuino, no sabía que leo era de otro hombre.

-no puedo creer que me mintieron otra vez las dos - dice Andreas furioso.

-amor lo siento mucho, tienes todo el derecho de estar enojado conmigo, pero en ningún momento quisimos hacerte daño.

-lo sé Emma, lo sé, pero necesito estar solo, déjame solo - Emma sin pensarlo toma su carta y sale de la habitación, Andreas está enojado, está en todo su derecho, pero Emma espera que esto no interfiera en su relación.

Cuando llega a la cocina Emma abre la carta que llevaba su nombre

Querida hermanita: sé que ya lo he hecho, pero no me va a alcanzar la vida para pedirte perdón por el daño que te hice... Prometimos de niñas, qué jamás nos pelearíamos ni que haríamos algo que lastimara a la otra y yo lo hice, rompí nuestra promesa, y estoy muy arrepentida por eso. No sabes lo mal que me siento. Pero también estoy muy feliz por ti hermanita, fuiste valiente, le contaste al mundo tu historia, y ahora solo queda que sanes tus dolores y seas feliz... Que Andreas se haya cruzado en tu camino no fue casualidad, sin dudas estaba escrito, su amor tan bueno y puro estaba escrito en el destino. Te amo hermana y solo deseo felicidad para tu vida. Y yo ahora voy por la mía... Estoy yendo a buscar a mariano, a hablar con él, a pedirle disculpas a él también por lo inmadura y cobarde qué he sido, y para presentarle a su hermoso hijo. Hermanita me queda simplemente agradecerte infinitamente por todo lo que has hecho estos años. Pero ahora debo aprender a vivir sola, a ser madre, a depender por mi misma sin tu protección, por más que te extrañe con locura. Te amo hermana nunca lo olvides.-Emma deja la carta de Anna sobre la mesa y una lágrima cae por su mejilla, un poco triste porque otra vez su hermana desapareció, pero contenta de saber que se fue atrás de su felicidad con su hijo y el hombre que ama, ahora solo espera que Andreas la perdone.