El Reino De Kadvav: Mi Secreto (#1) [En Curso]

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*Amaris*

Después del desayuno, decidí volver a mi cuarto un rato. Tenía que darle de comer a Lovel y necesitaba terminar ese libro, sin contar el hecho de que quería alejarme un rato de las personas.

— Te traje algo de desayunar. —dije sacando de mi bolsillo una empanada de huevo. Se la lancé y este se la comió casi sin masticar. Una vez terminé de darle, me contempló esperando más. Hice una mueca de fastidio. — Te traigo más en la comida, las cosas se pusieron tensas en el comedor y no pude pedir nada para ti. — Me senté en el suelo cansada. Había sido un día largo y ni siquiera eran las tres de la tarde. Volteé a ver el libro de la familia Blackwood y lo tomé. Sería mejor terminar de leerlo ya.

Cuando terminé, traté de organizar todo en mi cabeza. Era demasiada información. Lo más importante, era que la madre de Damon, había muerto hace años. No mencionaron las causas. Luego, dos meses después, el hermano de la reina había fallecido en un accidente en el lago, junto con su esposa e hijo. Viajaban juntos cuando el carruaje se fue de lado y cayeron al agua, todos se dieron por muertos despues de que encontraran los cuerpos después. No se habian podido idenificar, el agua habia dañado demasiado la piel. El niño era unos años menor que Damon. El consejero del rey había muerto hace dos años, ampoco mencioaban las causas y el padre de Torue sufrio un paro cardiáco mientras dormía. Esta familia estaba llena de sangre, muerte y violencia. Un escalofrío me recorrio odo el cuerpo. Yo esaba destrozada por la muerte de mi hermana, no me imagino el haber perdido a mi madre, a mi abuelo, a mis tios y a mi primo con tan poca diferencia de tiempo. Estaría destruída por completo. Lo que no entendía era, si Damon había perdido a tantas personas tan cercanas a él. ¿Por qué la había matado? ¿Por qué matar a alguien sabiendo que es hija de alguien, hermana de alguien, amiga de alguien más? Si ya había experimentado el dolor de que le arrebataran a sus seres queridos, ¿Por qué hizo lo mismo? ¿O era justo esa la razón por la que lo hizo?

Dejé el libro en la cama. Mi mente seguía procesando esas cien páginas. Contemplé el lugar un segundo, tratando de despejarme. Lovel estaba pegado a la puerta queriendo salir, pero no lo dejaría. Miré a la ventana y observé el paisaje. Era el área de entrenamiento. Habían dos guardias peleando entre sí, sin armas. Y una chica al fondo viéndolos detenidamente. Ella levantó la mano y ellos se alejaron mutuamente. Estaban entrenando.

Ladeé la cabeza intrigada. Uno de los chicos, era Damon, o eso creí hasta que lo miré mejor. Tenía el rostro muy parecido. Los ojos azules, el cabello, la nariz, todo. Excepto que no era tan fornido y parecía varios años menor. Incluso se veía mas chico que yo. Tal vez uno o dos años menos. En eso, ví a Damon llegar al lugar. Le hizo una seña a la chica y ella se retiró sin decir una palabra junto con el otro guardia. Se acercó al joven y le susurró algo al oído. En definitiva tenían un parecido. Este apretó los labios y asintió con la cabeza. ¿Qué le habrá dicho? Caminaron a una reja y desaparecieron de mi vista.

— ¿Qué mierda..? — susurré. Salí del cuarto y me dirigí a la puerta del castillo para seguirlos, pero choqué con un guardia. Me puse roja. —Perdón...

— Está bien, ¿A dónde vas? — preguntó intrigado y desvié mi mirada tratando de pensar en una buena excusa.

— Yo... Quiero ir al pueblo, ver el lugar. Ambientarme... — me excusé.

— Lo lamento, pero tengo órdenes de no dejarte salir del palacio. — dijo firme. Arqueé la ceja intrigada. ¿Qué acaso era prisionera?

— ¿De quién? — interrogué, con esperanza de sacar respuestas.

— Del príncipe. — me respondió serio.

¿Damon me quería en el castillo? ¿Qué mierda ocultaba?

—¿No hay forma de que me dejes salir?— le pregunté y el chico negó con la cabeza. Solté un suspiro hondo y comencé a caminar hacia mi cuarto pero me detuve en corto. —¿Puedo ir por algo de comer al menos?

— Está bien...— masculló de mala gana. Me dirigí a la cocina y tomé dos panes y serví en un plato hondo un poco de agua. Volví a mi recámara y le di la comida a Lovel.