CAPÍTULOS DEL 284 AL 289

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CAPÍTULO 284. EL PROBLEMA
QUE XIA SHAN ESTÁ
ENFRENTANDO (1)

Después de obtener la porción de la herencia, Chu Ye y Lin Chuwen no se apresuraron a volver a la Ciudad de los Dos Reinos. Aunque la ciudad no estaba mal, muchas cosas no estaban fácilmente disponibles, y era difícil encontrar ciertos suministros especiales.

Los dos viajaron a varios pueblos de Yunzhou, vendiendo un lote de pociones y comprando suministros. Vagaron sin rumbo fijo, sin ningún destino concreto, y llegaron sin saberlo a la Ciudad de Sanyang.

La ciudad de Sanyang era tan bulliciosa como siempre, con gente yendo y viniendo sin cesar.

"Xia Shan", Chu Ye estaba en lo alto del restaurante, mirando el paisaje lejano. Inesperadamente, vio a un conocido, lo que le sorprendió un poco.

Lin Chuwen estaba alimentando a Milú con comida. Al oír las palabras de Chu Ye, le miró con suspicacia y dijo: "¿Xia Shan? ¿Estás equivocado?"

Las caravanas pertenecientes a Xia Shan parecían operar en un área diferente.

Chu Ye sacudió la cabeza y dijo: "No, realmente es Xia Shan."

Lin Chuwen se acercó a la ventana, miró hacia abajo y dijo sorprendido: "¡En efecto! Qué coincidencia verle aquí."

Xia Shan era un viejo amigo tanto de Chu Ye como de Lin Chuwen de la Aldea Longya. Ambos tenían una buena impresión de él.

"Ha alcanzado el séptimo rango del nivel de soldado. El Caballo Nube de Fuego de Xia Shan ha crecido mucho." Comentó Chu Ye.

Séptimo rango de nivel soldado no era impresionante para Chu Ye, pero para muchos entrenadores de mascotas alma ordinarios sin antecedentes, ya era un progreso rápido.

Lin Chuwen miró al Caballo Nube de Fuego de Xia Shan. El patrón de llamas ardientes en sus extremidades inferiores resaltaba su poderosa apariencia.

"Parece que la línea de sangre del Caballo Nube de Fuego de Xia Shan también ha mejorado", dijo Lin Chuwen.

Chu Ye estimó que Xia Shan debía haber tenido algunos encuentros fortuitos durante este periodo; de otro modo, su fuerza no habría mejorado tan rápidamente.

"Yo sólo soy responsable del transporte de mercancías. Esta caja siempre ha estado cerrada. Si los artículos faltan cuando llegue, ¿cómo puedes culparme?" Xia Shan dijo con enojo.

"¡Tonterías! Debes de haber abierto la caja a medias, por eso faltan los artículos", dijo arrogantemente un bien alimentado gerente de mediana edad.

Xia Shan se frustró y dijo: "Estás diciendo tonterías. Yo no he cogido nada. Siempre he sido digno de confianza en el transporte de mercancías."

"¡Ridículo! Que digas que eres digno de confianza no significa que lo seas. Me faltaron tres botellas de Poción de Cultivo Base de esta caja, y sin duda es por tu culpa", dijo el gerente con aire de superioridad.

Las cejas de Xia Shan se crisparon y su cara se puso roja cuando oyó hablar de la Poción de Cultivo Base. Exclamó emocionado: "¡Es imposible! Esta caja siempre ha estado cerrada, y tampoco me diste la llave."

El supervisor de mediana edad resopló y dijo: "Quién sabe si encontraste a alguien que abriera la caja en secreto."

Xia Shan se enfureció y dijo: "Yo nunca haría algo así."

Los repartidores que rodeaban a Xia Shan se miraron entre sí, sin decir palabra.

El supervisor de mediana edad miró a Xia Shan con expresión petulante y dijo: "¡No creas que no conozco tus antecedentes penales!"

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