Tomorrow - Regulus Black

XXXVI

Remus dejaba a su hija en su habitación, había hecho que se durmiera, o eso creía. Una vez que Lupin cerró la puerta, ___________ abrió los ojos, quedándose acurrucada en su cama.

Aún estaba procesando el hecho de que su madre estuviera muerta, que vio con sus propios ojos como Bellatrix Lestrange lo había hecho.

Esa imagen aún le hervía la sangre, no pudo hacer nada para ayudarla. Limpio las lágrimas que le resbalan en su rostro, mientras pensaba que ahora todo cambiaría, que la guerra iba a empezar y se tendría que empezar a tomar decisiones importantes. Que tenía que cuidar más que nunca a las personas que ama.

Giro su cabeza, mirando la fotografía que había en su repisa de noche, era la fotografía con sus padres, la última que se habían tomado el año pasado. Aquello la hizo sentir destrozada, quería destrozar todo.

Los gemelos Weasley estaban apunto de abrir su tienda, habían estado felices de lo bien que les iban, pero aquella mañana toda felicidad se había esfumado de sus rostro, habían sido notificados que Charlotte había muerto.

Aquel día no abrieron en absoluto, simplemente se había quedado ahí sentados, solos en medio de su tienda.

—Fred —hablo por fin George después de estar callados por dos horas mirando a la nada—, perdimos a mamá —murmuró.

En los ojos de ambos se acumularon las lágrimas, soltándola por fin soltarlas, dejarlas ir, mientras sentía su corazón romperse en pesados por la madre que más amaron.

Ambos estuvieron llorando en silencio, sin poder creer la noticia, tal vez solo era un sueño, solo querían creer eso.

—Debemos de ir a ver a ___________ —murmuró Fred cuando se empezaron a calmar.

—¿Crees que nos reciba? —respondió en voz baja a su hermano, mientras limpia sus lágrimas.

—Ella nunca nos ha dejado solos, no podemos hacer eso ahora —le aseguro.

Ambos se levantaron del suelo, limpiaron sus lagrimas y fueron a la chimenea, para ir a la casa de Remus Lupin; el primero en salir de la chimenea fue Fred, para segundos después George. Ambos escucharon ruidos en el segundo piso, cosas cayendo, la voz de Remus diciéndole a ___________ que abriera la puerta mientras ella soltaba gritos de frustración.

—Son ustedes —dijo Sirius apareciendo en la sala al verlos.

—¿Qué ocurre? —pregunto George.

—Procesa el hecho de que Charlotte... —empezó a decir Sirius con un nudo en la garganta—. Remus esta intentado calmarla, pero es claro que no hay algún éxito.

Los gemelos se miraron unos segundos y subieron rápido las escaleras, llegando donde estaba la habitación de su amiga, donde se oían los ruidos.

—Vamos, cariño —le decía Remus desde el pasillo—. Déjame entrar.

—¿Por qué no entras? —pregunto Fred llegando a su lado.

—Charlotte y yo... —sintió un dolor enorme al mencionar el nombre de su ex esposa—, acordamos que cuando algo así pasara con ____________, dejaríamos que se desahogara —miró triste la puerta—. No íbamos a invadir su espacio hasta que ella se encontrara bien.

La chica siguió lazando varias cosas por su habitación. Era una porquería lo que había pasado, su madre se había ido, la dejo, era injusto aquello. Le había prometido que estaría con ella en todas las etapas de su vida, cuando saliera de Hogwarts, cuando empezara a trabajar, incluso cuando se casara y tuviera hijos. «Mentira, todo fue mentira», decía en su mente.