CAPÍTULO 95

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Trasladé la próxima batalla a un almacén abandonado que acababa de comprar a la vuelta de la esquina cuando llegaron las fuerzas wakandianas. Como era de esperar, nos siguieron como hormigas a un picnic y ahora sólo quedaba esperar.

"No los maten", les dije a Thor y Bucky, quienes me miraron confundidos.

"¿Te están cazando y quieres dejarlos vivir?" Preguntó Bucky, mirando alrededor del edificio abandonado, "¿Es eso prudente?"

"No, no es prudente, pero no quiero que Wakanda me persiga, por toda la eternidad", respondí, observando cómo los puntos rojos se acercaban más y más mientras nuestra conversación continuaba, "Si los mato, eventualmente me llevara a tener que destruir su país, y eso es algo que no quiero hacer".

"Qué perspectiva tan misericordiosa, no la comparto, pero la respetaré", sonrió Thor, con los ojos brillando de pura emoción.

"Entonces no hay fuerza letal", suspiró Bucky, con los ojos cansados.

"Están aquí", anuncié, los puntos rojos finalmente nos rodearon.

"¡Estoy listo!" Exclamó Thor, sonriendo.

"Alex Walker", escuché a alguien decir en tono furioso. Ese, alguien, no era otro que el actual Rey de Wakanda, T'Chaka the Black Panther [T'Chaka the Black Panther LV 110].

"Hola", saludé, volteándome para mirar al hombre. El Rey vestía su traje de pantera, que lo cubría de pies a cabeza. "No es así como quería reunirme contigo."

"Robaste lo que era nuestro", ladró T'Chaka, mostrándome sus garras. "Tú elegiste este camino".

Miré a la Pantera, y luego a mis compañeros que esperaban mi orden, un espectáculo sorprendente considerando que Thor estaba aquí, "Le robé a Ulises". Lo admití, no tenía sentido negarlo.

"Entonces terminemos con esto, paguemos por tus crímenes a Wakanda, y esto terminará." Quería que aceptara su castigo, quería que aceptara la muerte, que tonto de su parte.

"No", negué con la cabeza, dándoles la señal a Thor y Bucky para que se ocuparan de los demás alrededor del edificio, ya que el Rey era mío y debía derrotarlo.

"Te di una salida fácil, ahora enfrentarás la muerte como un guerrero", gruñó el Rey.

"No diré que lo que hice no fue moralmente incorrecto". Respondí: "Pero tengo cosas que hacer, enemigos que enfrentar e hijas que criar. Si la muerte es la única forma en que puedo pagarle a Wakanda, entonces nunca pagaré por mis crímenes, dejándome sin otra opción que cometer aún más crímenes contra tu nación."

"Alex Walker, padre de dos hijos, como padre puedo simpatizar contigo, pero como rey, he matado por menos". La Pantera respondió: "Hoy uno de nosotros muere".

Me reí entre dientes, mirando a la Pantera mientras se acercaba a mí, "Nadie morirá hoy, de eso me aseguraré".

"Ya veremos", rugió la Pantera, saltando hacia mí.

"Gané", declaré, deteniendo al Rey en medio del vuelo con mi telequinesis. Telequinesis, la habilidad que me permitía levitar sin resistencia muchas cosas, y enemigos si estaban al menos cuarenta niveles por debajo de mí, como era el caso de la pantera.

Con Seres como Bucky y Magneto, mi Telequinesis absorbe mi maná considerablemente rápido, con Magneto más que con Bucky, pero con T'Chaka, era como levitar a un bebé, podía hacerlo durante horas sin mucha tensión.

"Te atreves..." siseó la Pantera, destrozando su cuerpo en el campo de pseudo-gravedad cero que había creado a su alrededor con Telequinesis.

"No desperdicies tu energía", le aconsejé al Rey.

"Matarme no cambiará nada, nuestra gente no se detendrá hasta que pagues por tus crímenes", respondió La Pantera, en un tono que decía que estaba aceptando la derrota.

"No te mataré", suspiré, mirando al Rey con ojos cansados, "Sólo quiero hablar de hombre a hombre, ¿es mucho pedir?"

"No tengo muchas opciones, ¿verdad?" La Pantera suspiró.

"No, no lo haces", sonreí ante su respuesta.

"Entonces, adelante, habla", ordenó la Pantera.

"Sé que técnicamente les robé a ustedes, pero lo hice por una buena causa, aunque no les voy a mentir, también lo hice por mí, es una situación complicada", comencé cuando un soldado wakandiano me disparó, sorprendentemente la bala rebotó en mi espalda.

"¡Liberen al Rey!" Sin embargo, el soldado no se dio cuenta de lo que había sucedido.

"¡Bucky, te perdiste uno!" Le grité a Bucky que me escuchara, sin embargo, fue Thor quien respondió al llamado lanzando su martillo desde el primer piso y derribando al soldado wakandiano detrás de mí.

"¡Hurra! ¡Estoy ganando este juego!"

"¿Dónde estaba?" murmuré.

"Estabas diciendo que nos robaste por dos razones, querías nuestro metal y querías ayudarnos, lo cual me parece descabellado, pero continúa", respondió la Pantera, flotando.

"Hay amenazas fuera de este mundo, que ni siquiera todo el Vibranium de su país podría derrotar", suspiré, "ustedes se creen los más fuertes, y tendrían razón, porque no hay país más fuerte en el mundo que Wakanda, pero... ahí afuera", señalé al Cielo, "Tú y tu Vibranium no sois nada, ahí afuera no sois más que bichos con un ego serio".

"Aliens, ¿robasteis nuestro Vibranium por culpa de los extraterrestres?" La Pantera dijo en un tono que decía: No te creo.

"El tipo rubio que golpeó a tu soldado allí", señalé al soldado en el suelo, "es de Asgard, y adivina qué, es mayor que el maldito Estados Unidos".

"¿¡Esperas que crea esas cosas sin pruebas!?" La Pantera siseó y yo me reí.

"No, pero puedo mostrarte algunas pruebas si estás dispuesto a intentar abrir tu mente", ofrecí, extendiendo mi mano, "Después de todo, no puedes dejar pasar esta oportunidad, ¿no?" Le sonreí, "Como hombre, no quieres creerme, pero como Rey, no puedes dejar tales afirmaciones en el aire... porque si lo que digo es verdad... tu precioso reino necesita más que ya lo ha hecho, ¿verdad?"

La Pantera me miró fijamente, o al menos supuse que me miró fijamente, su máscara hacía difícil leer al tipo, "Muy bien, llamemos a la paz... por ahora. Si lo que dices es verdad, yo Tengo mucho en qué pensar". y entonces la Pantera me tomó la mano, que ya era algo.

MARVEL: CAMINO DEL JUGADORWhere stories live. Discover now