A pesar del tiempo

Capítulo Especial 2

Narra Gianna

Mientras Julián cantaba, mis ojos se llenaban de lágrimas. Todo es demasiado lindo, bello, perfecto... Después de tantos años al fin estamos juntos, después de todos los problemas que enfrentamos, nuestro amor los superó todos y cada uno. Estar frente a él en este momento se siente como un sueño.

Sus ojitos brillaban de emoción cuando terminó de cantar.

–Mi amada Gianna Ellis, ¿aceptarías casarte conmigo?

Quería responderle, quería gritar a los cuatro vientos que aceptaba casarme con Julián, pero de mi boca no salió una sola palabra, así que moví varias veces la cabeza hacia arriba y abajo para hacerle saber que sí aceptaba.

–¿Sí? –Dijo con sus ojitos rebosantes de esperanza–.

–Sí, Julián, quiero casarme contigo.

Sonrió de una forma que nunca había visto. Sacó el anillo de la caja y lo puso en mi dedo anular.

Me tomó entre sus brazos y me elevó un poco, giramos y reímos.

–Te amo –dijo–. Te amo, Gia, siempre lo he hecho y siempre lo haré.

–Te amo, Julián. Te amo, te amo, te amo, te amooooo.

Me puso de nuevo en el suelo, tomó mi cara entre sus manos y me besó.

De fondo sonaba la canción "caminar de tu mano" de Río Roma.

De pronto, él se separó.

–¿Estás segura de que esto es lo que quieres?

–Julián Burnett, eres el único chico al que le he entregado mi corazón, no me veo viviendo lo que me queda de vida con nadie más, sólo contigo, eres el único compañero de vida que necesito, no imagino una vida lejos de ti... otra vez.

Lo besé. Sin duda esta es de las pocas veces en que he tomado la iniciativa. Quiero que él sepa que me importa, que sepa que lo amo.

***

Llegué a casa flotando en una nube con arcoíris a mi alrededor y corazones en el aire.

–HAY BODAAAAAAAAAAA –grité al entrar en el departamento–.

–¿Qué? –Dijo Emma un tanto confundida– ¿quién se casa?

–Pues... –le mostré mi mano– yooo.

–¿QUÉ? –Exclamó–. Para eso era la cita... Tebi me debe una caja de chocolates.

–¿Apostaron el motivo de la cita? –Asintió–.

–Él no creyó que pasaría tan pronto, yo sí... será mejor que le advierta a Julián, Álvaro va a ser peor que un suegro –rió–.

–Mañana iremos a pedir hora para el matrimonio.

–Oww, mis tortolitos se casan. Estoy tan orgullosa –los ojos se le llenaron de lágrimas–, sé cuánto han luchado por estar juntos, a pesar de las trampas de esa víbora... pero eso no importa... ella no importa... lo que importa es que ¡GIANAN ES REAL Y SALE BODA!

***

No pude dormir en toda la noche. Estaba muy emocionada. Nunca estuvo en mis planes casarme, pero si es con Julián quiero intentarlo. El amor es esencial en el matrimonio y creo que si ambos nos amamos, no hay nada que temer, los problemas se resolverán y nos respetaremos.

Después de una larga espera, sacamos la hora y será a las 17hrs dentro de un mes.

–¿UN MES? –Gritó Emma en cuanto supo la fecha–.

–Sí, mucho tiempo, ¿no crees?

–Eh... no, hay que preparar muchas cosas, Gianni, tu vestido, lugar, banquetería...

–Ya hablamos con Julián respecto al lugar y será en una parte muy significativa para ambos.

–¿Al aire libre? –Asentí–. ¿Vieron el tiempo? Espero que no llueva, sino se arruinaría todo y...

–La que se casa soy yo y tú estás más nerviosa –reí–. Hablando de eso, ¿Tebi y tú no...?

–Nop, ninguno de los dos planea casarse, por mi parte no creo que el papel sea necesario para demostrar que dos personas se quieren y quiero que si estamos juntos sea por decisión, no porque un documento nos amarre... mis experiencias con conocidos que se casaron no han sido las mejores –hizo una mueca–... pero a Julián y a ti no les va a pasar eso, porque amor les sobra, sabrán salir adelante de cualquier problema que tengan. Los felicito y les deseo lo mejor.

–Gracias, amiga.