Voy a luchar por él.

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Emma.

Mita quiso venir a ayudar a envolver regalos para el evento de caridad, íbamos a pasar toda la noche en eso y por lo tanto no podíamos permitirnos tener sueño, consumimos un par de bebidas energéticas y coloqué mi playlist más alegre a retumbar por la casa. Luca vino hasta la sala con las manitas en los oídos por el escándalo.

Mema ¡cállate!― dijo como si era yo quien estaba emitiendo el sonido― ¡mamá, papá! ¡Mema ta chendo mucho ruido!― Lo tomé en brazos para llevarlo de vuelta a la habitación donde estaba segura no se escuchaba nada, solo era un molestoso como papá.

― No Pelu, no voy a quitar nada mi amor, en cambio te voy a comer, ¡sí, te voy a comer!― dije haciéndole cosquillas y besándolo por todas partes ― ¡vamos arriba!

Cuando volví ya Mita estaba puesta al trabajo y yo comencé a cortar papel de regalo en tamaño estándar para acelerar el proceso de envolver, la abuela y papá pronto se nos unieron, por alguna razón cada vez que hacíamos esto yo sentía como un ambiente de navidad en el aire, me hacía feliz. La cuestión es que soy la fan número uno de la navidad, pasaba todo el mes de rojo y verde, por mí podía durar todo el año. Sonó una canción muy antigua que para colmo era bastante tonta, de hecho, por eso me gustaba, Mita decía que era imbécil. Para molestarla comencé a saltar a su alrededor haciendo pasos de baile y cantando:

«It's friday, friday gotta get down on friday everybody is looking forward to the weekend, it's friday, friday getting down on friday everybody is looking forward to the weekend, party and party and HE!.. fun, fun, fun!»

Salté al ritmo de la música como una loca mientras papá y la abuela primero reían y luego me miraban como si estuviesen pensando qué sanatorio mental me convenía más. Di un paso en falso, salté muy alto y choqué la cabeza contra el brazo de un robusto perchero de roble cerca de la escalera, por supuesto, terminamos tanto el perchero como yo en el suelo y comencé a reír. Papá se acercó a ayudarme a levantar mientras se burlaba de mí a más no poder y Mita miraba hacia un lado como pensando que yo no podía ser más inmadura.

― No te caíste preciosa, solo decidiste descansar en el piso súbitamente― rió papá alzándome.

― ¡Papá! no seas así, ¡me dolió!― al final de la madrugada sí dejamos todo listo, sí, fui eficiente y colaboré, no solo soy una niñata que pierde el tiempo, es solo que se pueden hacer las dos cosas a la vez.

...

Luego de la presentación para los niños papá quiso invitarnos a cenar, fuimos todos, hasta tío Thiago y tía Belle. Decidí que era tiempo de que lo supieran, además, si estaban todos reunidos tal vez papá tendría compasión, no lo hablé con Sago, pero pienso que ya estamos aquí e igual lo tenían que saber...

Así que cuando estamos en la mesa y se encuentran parloteando entre si, digo de repente por encima del bullicio:

― Tengo algo que contar...― se callan tan precipitadamente como yo hablé― Isago y yo estamos enamorados... estamos saliendo hace algunas semanas...― él me mira sorprendido como si no estaba preparado para lo que yo diría, tío Thiago está lanzando sobre él todo el peso de su mirada seria y responsable, la mesa sigue callada, tía Belle se ve algo confundida, Mita también se está viendo contrariada y algo más, no logro saber qué es. Amie me da una sonrisa de apoyo, sigo rodando la mirada hacia la abuela que está a su vez mirando con preocupación hacia el lugar que estoy evitando llegar, el puesto de papá... finalmente le doy un vistazo, está furioso y lanza la servilleta contra la mesa, levantándose:

― ¡Aléjate de mi hija, Isago!

― Papá, pero nos queremos, de verdad, esto no tiene que ser algo malo...

Estado sentimental: es complicado (DGPP #2).Where stories live. Discover now