Estado sentimental: es complicado (DGPP #2).

Extra #3.

David.

Solo recuerdo que tenía un dolor terrible en el pecho, que mamá estaba llamando por la agenda inteligente a alguien y luego todo se fue a negro... ahora estoy en una habitación de hospital, me encuentro algo perdido y nadie familiar aparece. Alguien vestido de médico entra, cuando puedo darme cuenta es Kass.

― Qué bueno que despertaste David, ahora vas a estar débil, estás en observación, sufriste un infarto, gracias a Dios pudimos controlarlo.

― Kass... un infarto... yo... casi...―digo asimilándolo― si hubiese muerto al menos hubiese podido reunirme con ella finalmente... hubiese acabado toda esta agonía...

― David creo que olvidas que tienes a Emma, ella va a aparecer y también a los gemelos, de hecho, Amie está aquí... deberías dejar que ella y los niños vean que estás bien. Y que quieres estar bien, no puedes seguir así.

― ¿Dónde está Juliette? ¿Ella ha venido?

― ¿Sinceramente? NO LO SÉ y NO ME IMPORTA. No puedes estar hablando en serio... No puedes preguntar primero por esa zorra que por tu familia... ni siquiera sé cómo demonios se te ocurre compararla con M, porque estoy muy segura de que sabes que el mínimo parecido que pueda tener no significa nada en comparación a lo que mi hermana era... ¡la deshonras cada vez que te acuestas con esa prostituta!

― No es tu problema con quién me acuesto o no desde que tu hija provocó que la mía, mejor dicho, la hija de «tu hermana», desapareciera sin dejar ningún rastro, no me vengas con lecciones de moral por favor Kass... ¡que a Alma no se las diste!― ella me mira con cara indignada y dolida.

― Será mejor que descanses ahora David... ya habrá mucho tiempo para sacarnos los trapitos al sol... ¿Sabes? A veces pienso que desde que M murió nunca pudiste volver a ser tu mismo... Y eso lo podía entender hasta cierto punto, pero ya no... ya no...

Se va y pasado un rato entra Amie en la habitación, junto con los gemelos, ellos se sientan juiciosos a mi lado, ella se queda parada justo detrás. Se están comportando solo porque se encuentran intimidados por las máquinas e intravenosas pegadas a mi.

― Hola David... ¿Cómo te sientes?― pregunta Amie decaída.

― Pues débil, pero bien, parece que saldré de esta...― sonrío sin alegría― y tú ¿Cómo estás?

― Bien... niños ¿no van a saludar a papá?

― Hola Señor papá― dicen al unísono.

― Dios los bendiga rizaditos...

― ¿Por qué tenes tantos cables? ¿Eres un robot?

― No Nito, no es eso, sino que estos cables van a curarme, estaba algo enfermo...

― No papá no se enferma... mami, ¿verdad que no? ¡Señor Papá es un superhéroe!― gritó Luca levantando un puñito en el aire.

― ¡En realidad me descubriste Pelu! Estos cables solo son para recargarme las baterías de superhéroe, se me estaban acabando ya.

― ¡Yo sabía!

― Ahora van a ir un momento con la abuela Regina y ya los voy a alcanzar, ¿De acuerdo?

― No mami, ¿me puedo quedar aquí Señor Papá? Yo quelo dormir contigo... ya no duermes con nosotros... ¿Por qué no duermes con mami y con nosotros en la casa nueva? Mami siempre dice: papi viene después, pero papi nunca viene... no me usta...