CAPÍTULO 17

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Admitir que siempre fue ella, solo me hace sentir más mierda. Me siento una total mierda porque siento que le estuve mintiendo a Maddie por todo un año. Se que la quise, y la quiero, pero admitir lo que todos me vienen diciendo desde hace tiempo, me hacen dudar de mis palabras. Dudo de todo lo que le dije a Maddie, y me lamento terriblemente por eso.

Le menti, me menti, nos menti. Me siento enfermo con la persona que soy.

Estoy mirando el techo de mi habitación, pensando, y atando cabos. Mi mente me lleva a momentos en donde puedo ver que siempre fue ella, solo que no lo quise ver, lo ignore, y lastime a alguien por eso. Me traslado a momentos donde era claro lo que me pasaba, y todos me lo decían, pero yo estaba convencido de que sentía algo por Maddie, solo por ella. Y que mis acciones para con Zoey, solo eran de amistad.

Convencí a Maddie de eso, la convencí de una mentira, y me odio por eso.

El chico que creía que era una persona honesta, fue siempre una mentira. Soy una asquerosa mentira.

Una vez que admites una verdad, las respuestas se hacen más claras y todas te llevan a eso que estuviste ignorando, evitando o negando.

Tuve que saberlo desde el momento en que Zoey lloraba por Trevor. Recuerdo que la veía sufrir y moría por decirle "yo no te haría eso, yo te cuidaría porque eso mereces. Mereces ser amada, y yo te amo" pero ignore esa voz en mi interior, la ignore y la abrace como abraza un amigo.

Más se aclara mi mente, más caigo en momentos donde mis sentimientos eran notorios, y recién ahora puedo entender el por qué de los ataques de celos de Maddie. Ahora son más que justificables, y entendibles. En su momento los creía estúpidos, pero ya no es así, hoy no.

Me siento frente a la computadora y abro mi casilla de mail, miro la pantalla durante unos largos segundos, hasta que finalmente me decido. Voy a mandarle un mail de disculpas a Maddie, me gustaría decirle todo lo que tengo para decirle cara a cara, pero respeto su decisión de no verme.

Me dejo llevar, y le escribo. Le pido perdón por todo, por el no respeto, por mis tal vez evidentes mentiras, en fin... me disculpo por todo. Es lo minimo que puedo hacer. Se que un perdón no soluciona todo, pero que me quito una mancha en mi horrible ser.

Una vez que envio el mail, vuelvo a acostarme y mirar el techo de mi habitación. Hoy solo hay ánimos de esto, de nada, de solo mirar el aburrido techo blanco y matarme con mis pensamientos.

Unos leves golpes en la puerta obtienen mi atención, dejando mis pensamientos por unos segundos.

–Quiero estar solo –digo, pero aun así la puerta se abre y veo a Paul.

–No te dejare solo en este estado de mierda –dice caminando hacia a mi– Levantate, nos vamos.

–No quiero moverme de aquí.

–Bien, entonces me quedaré aquí y hablaremos– se sienta en la cama y me mira– ¿Qué ocurre?

Suspiro profundamente y me siento. Paul sería la primer persona con la que lo hablo luego de haberlo admitido. No quise hablar con Ronny, por más que haya insistido.

–¿Siempre fuiste honesto con mamá sobre lo que sientes?

Paul se detiene unos segundos, pensando en la respuesta, hasta que finalmente asiente.

–Jamás le mentí sobre lo que siento. Aunque bueno, lo negué por un tiempo. Pero cuando lo admiti, siempre fui honesto con ella ¿por qué lo preguntas?

–No fui honesto con Maddie –Paul no se sorprende, simplemente asiente– La quiero, la quise, pero no al punto en que le dije que lo hacía, y eso es horrible de mi parte ¿por qué le menti? ¿por qué recién ahora lo noto?

Siempre fuiste tú (#3 A través de ti)Where stories live. Discover now