~Capitulo 11.

906 49 0
                                    

Erin y Blake van a venir a mi casa esta noche. Erin quería traer a Justin,así que él también viene. No he invitado a nadie más. Odio las fiestasmastodónticas, sobre todo si son en mi honor. Pensé en invitar a Danielle,pero cuando se lo dije a Erin, me medio convenció para que no lo hiciera. 

—Quizá invite a Danielle — comenté. 

—Ah — respondió Erin, en ese tono que usa cuando algo la asquea.

 —¿Qué pasa? —pregunté. 

—Nada, es que... ¿crees que es una buena idea? Quiero decir... que apenas nos conoce. 

—Me conoce a mí.Erin tiene problemas con Danielle. Le molesta que nos hayamos hecho tan amigas después de que yo rompiera con el Círculo de Oro. Si hubiera sido por Erin, nunca podría haberme ido del grupo. Danielle y diversión no son precisamente sinónimos en su diccionario mental. Así que nunca las hago coincidir, algo con lo que Erin está completamente de acuerdo. 

—No te enfades —siguió Erin—, pero es que creo que sería mejor que estuviéramos solo nosotros cuatro. Solo te conoce a ti. ¿No crees que igual se siente un poco desplazada? 

Quizá Erin tuviera razón. Podía ser que, si invitaba a Danielle a mi cumpleaños, se sintiera incómoda.Así que decidí no hacerlo. Cuando me preguntó qué iba a hacer para celebrarlo, le dije que me apetecía pasarlo sola, porque últimamente no estaba teniendo mucho tiempo para mí. No me gusta haberle mentido, pero es que no se me ocurría qué otra cosa decirle.One World me organizó una fiesta durante la reunión de ayer. Danielle hasta hizo una pancarta. Ninguno parecía enfadado porque me haya cambiado de mesa. De hecho, con Danielle las cosas están un poco raras,pero solo a la hora de la comida; el resto del tiempo está como siempre. Mi madre ha preparado un descomunal desayuno de cumpleaños esta mañana.Como parte de su regalo, mis padres van a pasar la noche en la ciudad hoy para que podamos tener la casa para nosotros solos. A mí me parece que es más bien un regalo para ellos, pero bueno. El plan es pedir comida y ver pelis.He estado pensando en lo que pasó el otro día a la hora del almuerzo conlo de los códigos y he decidido no darle importancia. A Justin no le gusto. No puedo gustarle. Evidentemente, no fue nada.Blake no está de acuerdo.

 —¿Lo va a traer aquí? Blake piensa que estoy loca por arriesgarme a estar en la misma habitación que Justin en presencia de Erin y que es imposible que no se diera cuenta de que le gusto en la competición de cometas. He intentado explicarle que Erin no se dio cuenta porque no hay nada de lo que darse cuenta, pero Blake cree que estoy en estado de negación. No solo de que yo le guste a Justin, sino de que él también me gusta a mí. 

—¿Pero cuál es el problema de estar en la misma habitación que él? —digo yo. 

—¿El problema? ¿En serio?Estoy revolviendo un cajón de la cocina en el que guardamos trastos varios, buscando los menús de comida a domicilio. Apenas los usamos porque mi madre cocina prácticamente todas las noches. 

—Es obvio que le gustas —insiste Blake.

 —¿Puedes dejarlo? — lo interrumpo.

—¿Me dejas terminar?Sigo rebuscando en el cajón.—Como iba diciendo —continúa Blake — , es obvio que le gustas. Y es obvio que a ti te gusta él.

 —¿Por qué sigues insistiendo con eso? 

—¿Y tú por qué sigues negándolo?Dejo de rebuscar. 

—¿Sabes que hay gente a la que se le leen los pensamientos en la cara?— añade Blake.

 -¿Sí?

El novio de mi mejor amiga.Where stories live. Discover now