POV Lauren
No sé bien que me llevó a preguntarle a Camila por su pasado amoroso, tal vez solo la curiosidad que sientes por la vida de alguien que se está volviendo indispensable en la tuya, quizá fue también por mi torpeza en los temas, por mi perdida del sentido común y mi exceso de sinceridad cuando la tengo cerca, escucharla contarme de su pasado me dejó varias sensaciones, recuerdo que ella alguna vez mencionó haber besado a otras chicas, sin embargo la relación de la que me contó fue con un hombre, solo me alertaba saber que tan lejos pudieron llegar, era idiota cuestionarme eso, su pasado era solo suyo, el mío tampoco era el mejor ejemplo para reprochar eso. Me había invadido la extraña sensación de querer retroceder el tiempo, no para cambiar este momento, jamás querría eso, por el contrario, quería borrar tantas cosas que desde luego hubiese preferido no hacer, solo, si hubiese sabido que algún momento ella llegaría a mi vida.
-Solo conté esa historia porque tú preguntaste -se excusó rompiendo el silencio que invadía nuestro momento.
-Lo sé -dije intentando darle un sonrisa que resultó una mueca, una no muy simpática según la expresión de su rostro.
-Ya es parte del pasado -dijo volviendo a intentar darme tranquilidad en vano.
-Eso ya no importa -dije serena- es solo un tema más, puedes hablarme de lo que quieras -aseguré-Pero... -entonces mi siguientes palabras complicarían aún más mi noche- ¿Crees que seguirían juntos si tu no te hubieses mudado? -argumenté sin ningún control
-Es... -ella se detuvo a pensar- probablemente si -dijo seria, mi corazón se detuvo al escucharla- pero no fue ese el desenlace que nos tocó -habló buscando mi mirada- y yo no -se detuvo sin terminar sus palabras.
-¿Tú... No qué? Volví a cuestionar.
-No sabía que te iba a conocer -habló devolviéndome la confianza que su historia me robó.
-Estoy de acuerdo -dije sonriendo por inercia- quizá él no era para ti -hablé sin medirme.
-No lo conociste -replicó ella y luego hizo una pausa algo prolongada- pero, puede que tengas razón.
-Hace un poco de frío -comenté tomando su mano- ¿Quieres mi chaqueta? -pregunté amable para aprovechar de cambiar aquel tema.
-no, estoy bien -dije acercándose a mi, creo que quería una abrazo y no iba a negarme.
Nos quedamos tiempo viendo la ciudad, hacía una linda noche, pero de hecho, bastante fría, la abracé a mi cuerpo intentando que el frío no la invadiera ya que se negó a tomar mi abrigo, teníamos que volver, no quería que Camila se metiera en un problema por llegar tarde, yo por otra parte hace mucho tiempo que no tengo complicaciones en casa, pero prefería evitar, mi humor estaba muy optimo para arriesgarme.
-¿Nos vamos Camz? -dije en tono suave mientras ella miraba el paisaje.
-Nos vamos -repitió dando una mirada mas al lugar, mientras bajaba de la parte delantera del auto.
Por el camino Camz estuvo silenciosa, solo me miraba una que otra vez y sonreía, pero en silencio, parecía cansada, era lógico, estamos en semana de clases y yo la hice estar fuera hasta tarde, antes de llegar a su casa tomé su mano con suavidad y le dije que había disfrutado su compañía esta noche, ella solo asintió con su cabeza y me lanzó un beso en el aire, hubiese deseado poder sentirlo y no solo tener que mirarlo. Al llegar finalmente ella se inclinó y dejó un tímido beso en mis labios, después de tanto, sobre todo de tantos besos, me sorprendía como a veces ella seguía sintiéndose cohibida en algunos momentos, como me seguía besándome con timidez y otras veces lo hacía robándome toda la seguridad, me volvía loca, totalmente loca, sin duda. La vi alejarse y con un suspiro hice lo mismo, pero en dirección a mi casa, al estar ahí me quede de inmediato en mi habitación estaba cansada también.
-Lauren... -habló mi padre abriendo con discreción mi puerta.
-Adelante -dije acomodándome en la cama.
-Princesa... -se acercó a la cama- mañana llevaremos los autos para revisarlos -explicó mientras se sentaba- tus hermanos irán en taxi a la escuela, pero quiero que tu me acompañes -agregó
-Pero... -recordé los planes de Camila-
-¿No puedes faltar? -preguntó con algo de decepción- no quería ir solo y hace mucho que tenemos un tiempo solos -completó haciéndome reflexionar sobre eso.
-Creo que el mundo no acabará si falto un día -hablé convenciéndome y dándole la respuesta que él quería.
-Entonces mañana iremos juntos -habló poniéndose de pie y besando mi frente- descansa princesa -habló mientras salía de la habitación.
POV Camila
El día inicio y rápido estaba en la escuela, todavía no tenía claro exactamente que haría con Lauren, estaba preocupada por eso, llegué y con la mirada traté de ubicarla, pero fue en vano. Varios de sus amigos estaban algo agitados hoy, los veía con algunas caras bastantes raras por toda la escuela, espera verla a ella en cualquier momento. Sin embargo no fue así, asistí a mi primera clase y seguido al almuerzo, donde al entrar tampoco la vi a ella, de hecho, en la mesa donde habitualmente los encontrarían todos ellos, solo estaban los chicos, de las mujeres no había señales, así que entendí que probablemente no la vería. Vi entrar a Cece con una cara de tragedia mundial, caminó a otra mesa y seguido de eso tropezó con una chica que no la vio venir, creo que fue su sentencia, la rubia solo la empujó a un lado, lanzó su bandeja y continúo su camino alterada, es justo en momentos como estos en los que no me interesa cruzarme con ella. Ahora el resto de las chicas entraron, con caras algo dramáticas y una de ellas con una expresión triste, como si hubiese llorado.
-No vendrá -habló Chris en un tono discreto mientras se sentaba a mi lado.
-Lo miré y seguido miré al resto de mis amigos en la mesa que estaban entretenidos en otras cosas, antes de dar una respuesta, volví a mirar a la mesa de los populares- Yo solo... -pero me interrumpió esta vez.
-Hoy no vendrá -repitió- así que no pierdas tiempo mirando la puerta o su mesa -dijo riendo- ella no vendrá.
-¿Qué es lo gracioso? -pregunté perdida
-Que mi hermana es tan imbécil que no le avisa a su novia que no va a venir, te dejó esperando por ella -dijo sin quitar la sonrisa- te dije que ella era un tonta, pero me ignoraste.
-no esperaba por ella -mentí mirando mi comida- además no soy su "novia" -hice las comillas con mis manos- solo que hay mucho drama ahí, y me perdí mirándolos -señale con la cabeza a la mesa de los chicos.
-siempre hay drama ahí -dijo él con un expresión odiosa en su rostro- por eso ellos encajan tanto con mi hermana, son todo todos unos dramáticos.
-ya deja de quejarte tanto -dije empujándolo con la mano- A veces eres tan dramático como ellos -afirmé solo para molestarlo.
-¡Claro! -dijo riendo, en este punto los chicos se interesaron por saber de que hablábamos pero evadimos el tema.
Sentí ganas de preguntarle a Chris las razones por la Lauren faltó a clases, pero quizá era una tontería pedir explicaciones a otros, eso era algo que ella misma debía decirme, tampoco era el fin del mundo, incluso podría ser valioso para mi, necesitaba alguna idea para nuestra... "Cita", sabia que Cece podría darme ese punto clave y sin Lauren en la escuela hablar con ella no seria un problema o una misión imposible, pero con ese mal humor que ella desfilaba por el lugar noté que tampoco seria sencillo acercarme a ella.
POV Lauren
En la mañana salí casi dormida a realizar mis "asuntos" con papá, estuve conduciendo mientras luchaba con mi sueño, me levanté mas temprano de lo habitual, papá llevó su auto e iba delante, guiándome en el camino, estacionamos en el taller, y él estuvo un tiempo hablando con el mecánico, yo espere casi dormida en la oficina del lugar y como una tonta recordé que esta mañana no tomé mi teléfono al salir, "Camz me va a odiar" fue todo lo que vino a mi mente luego de recordar eso.
Estuvimos de un lado a otro por toda la mañana, me tomé unas cuantas tazas de café para mantenerme alerta mientras mi papá resolvía todos los asuntos de los autos, casi al medio día estuvimos libres para almorzar, en un par de horas debíamos regresar aquí y recoger los vehículos, ahora solo pensaba en comer y finalmente irme lejos de este aburrido lugar.
-¿Dónde iremos a comer? -pregunté mientras papá intentaba detener un taxi.
-Iremos al restaurant de siempre -dije sonriendo- ya hace mucho que no vamos -afirmó, entonces vino a mi mente el día que llevé a Camz a ese lugar.
No demoramos mucho en estar allí, el taller quedaba cerca de esa playa, en cuanto nos sentamos en una de las mesas de arriba el dueño se acercó como de costumbre a saludarnos, luego de hablar un tiempo considerable con mi papá entonces se dirigió a mi.
-Bonita, ya te extrañábamos por acá -dijo poniendo su mano en mi hombro- ¿Cómo está tu linda amiga, con la que almorzaste aquí la última vez? -preguntó algo imprudente
-Está bien -dije algo nerviosa- ¿Cómo está su esposa? -dije cambiando el tema, mi papá ya estaba algo intrigado pero no interrumpió.
-Ella perfecta -dijo sonriente- espero que vengas pronto, así sea sin Mike -completó antes de irse.
-¿Así que traicionaste nuestro lugar privado? -preguntó mi papá fingiendo un tono de molestia, pero se veía sereno.
-Solo vine hace unas semanas atrás -hablé tomando su mano- extrañaba el lugar.
-¿Con qué "chica linda" viniste aquí? -preguntó curioso.
-Una amiga... -hice una pausa, me costaba mentir y teoría lo hacia-... De Chris -completé ahora sabiendo que vendrían más preguntas.
-¿De Chris? -preguntó confundido papá- no entiendo -argumentó.
-Papá -dije acomodando mi postura en la silla- ¿Tú crees que esté mal... Ya sabes -me detuve- si alguno de nosotros -hablé refriéndome a mis hermanos- estuviera saliendo con alguien de su mismo -volví a pausarme....
-...¿sexo? -completó él, dejándome algo helada.
-Si -fue todo lo que dije.
-No imaginé que ustedes -también se pauso a reflexionar- que alguno de ustedes quisiera eso -entonces respiró profundo- pero son mis hijos, lo serán siempre, lo que decidan hacer con sus vidas, no siempre me va a gustar -habló sincero- pero si los haces felices, entonces de seguro, me hará feliz -volvió a pausarse y ahora su mirada estaba fija en mi- Lauren, tú...
-No quiero decepcionarte papá -dije casi apunto de estallar en lagrimas.
-Nunca lo harías -se puso de pie y me hizo levantarme- Siempre serás mi princesita -besó mi frente- mi pequeña princesa -rectificó- sin importar lo que decidas hacer con tu vida -habló abrazándome fuerte- sin importar lo que yo hubiese querido -aseguró- porque yo ya tomé mis decisiones, decisiones que me llevaron a tener una familia, tener a Clara y con ella a Chris, Taylor y a ti -habló nostálgico- yo quiero que tú tomes decisiones que te dejen cosas importantes que valgan la pena -habló ahora separándome para ver mis ojos- yo nunca -cambió su tono a uno mas fuerte- nunca me voy a decepcionar de ti.
Por un instante dejé salir todo, el llanto se apoderó de la escena, creo que sus palabras fueron las necesarias, las que requería para afrontar mi nueva realidad, yo nunca supe si mi papá conocía la historia con Verónica, la verdad no creo que estuviera al tanto, tampoco nunca me intereso contarle, porque en el fondo aquello no fue real, pero ahora estaba en una situación diferente, tenía mi corazón en manos de Camila, mis decisiones sólo estaban basadas en, y por, ella. Agradecí que el lugar estaba vacío en la parte superior, no hubiese querido que nadie presenciara aquella escena, pronto alguien del restaurante fue a tomar nuestra orden, yo ya estaba más calmada, pero no menos conmovida, ordené la comida junto a papá y continúo la conversación, ahora sentados.
-Hija... -dijo pensativo- solo dime una cosa, ¿me la presentaras? -preguntó sin ninguna expresión, así que tuve miedo de que respuesta dar.
-Yo... No lo sé -dije temerosa de su reacción.
-Quiero conocerla -dijo finalmente dando la sonrisa que necesitaba.
-Te parecerá raro -dije notando que nada podría parecerle más raro ahora, que mi confesión inicial- pero, tú... La conoces -dije tímida.
-¡Ay Laur! -dije poniendo las manos en sus ojos -¿No es Cece verdad? -preguntó casi llorando por la posible respuesta.
-No papá -reí un poco- Cece es mi mejor amiga -aclaré- eso es imposible -dije nuevamente riendo.
-No es que tenga nada en contra de ella -explicó- pero tantos años teniéndola en casa, la siento como una hija, además ella siempre ha sido tan.. Ya sabes activa, efusiva, casi incontrolable -agregó riendo- no te imagino con ella, al menos papá podía visualizarme con una mujer sin problemas.
-Ni yo podría -respondí a su argumento- esta chica es especial -dije mirando a otro lado por la pena.
-Llegará el momento en que la traigas a casa entonces -afirmó- Y... -reflexionó- a tú madre le de un infarto.
-No le digas nada aún -pedí alterada- no estoy lista para eso -confesé.
-No lo haré -dijo acercando su mano a la mía- creo que es mejor que tú lo hagas cuando estés lista.
-Además papá... Aún es algo oficial -dije sin darme a entender, estaba enredada pensando- es decir, no estoy oficialmente con ella -expliqué siendo más clara ahora.
Mi papá trató de indagar durante el resto del almuerzo en el tema, era obvio, era mi padre y sentía curiosidad de los detalles, pero justo porque era mi padre no podía hablar de más con él. Admito que me sentía mejor y mas preparada para enfrentar el mundo, ahora mi papá está de mi lado, siendo lo que mejor sabe ser, mi héroe. La comida pasó casi a convertirse en una cena, estuvimos hablando de tantas cosas que casi no notamos como avanzó el tiempo, pero al caernos la noche sabíamos que nos excedimos, salimos al taller con la esperanza de encontrarlo abierto, por suerte llegamos mientras estaban cerrando, buscamos los autos y nos fuimos a casa, al llegar corrí en busca de mi teléfono, habían algunas llamadas perdidas, ninguna de Camila, lo entendía, fui yo quien debió llamarla, pero entre tanto mensajes y cosas por revisar, algo llamó mi atención de manera particular:
"Gracias por ser parte del juego y verme la cara de idiota"
Yo evidentemente me perdí de algo que tarde o temprano iba a pasar.
