Unplanned

Capítulo 31 - Agradable sorpresa

◆MATT◆

15 de Agosto del 2011

Me encuentro realmente sorprendido cuando, al terminar de ducharme luego de haber trabajado en el cobertizo de los Howe, recibo una llamada de mi mejor amigo. Me detengo en el pasillo y acciono el botón verde para responder.

—¿Qué hay?

—Cabrón, no vas a creerme dónde estoy en este momento.

—Empieza por decírmelo y ya decidiré yo si te creo o no.

—Trae tu jodido trasero a la estación de autobuses de Auburntown, Adams.

—¿Qué? ¿Estás aquí?

—Estoy aquí, así que ven.

—Mierda, hombre. No tengo auto, dame un poco de tiempo... Ya mismo me pongo en camino. Espérame allí.

—Pero apúrate que muero de hambre.

Corto la llamada y me guardo el teléfono en el bolsillo de mis bermudas color verde militar. Me adentro en la habitación que me corresponde, encuentro una camiseta para ponerme y mis tenis. Tomo mi billetera que se encuentra sobre la mesita de noche y salgo a las prisas en busca de Allie, sin embargo me encuentro con su mamá, quien también va de salida.

—Grace —le sonrío—. ¿Y Allie?

—Me parece que está afuera, ¿ocurre algo, cariño?

Quizá es mi imaginación, pero siento que ella me ve de esta forma rara desde que está consciente de que su hija y yo estamos saliendo.

—Sí, es que mi amigo, que se supone estaba en Boston, acaba de llamar para decir que está aquí y debo ir a verlo.

Ella asiente lentamente mientras revisa que en su bolso se encuentra todo lo que necesita. Las llaves de su camioneta están bien sujetas en una de sus manos.

—¿Quieres que te lleve? —me ofrece cuando alza la cabeza para verme a la cara.

—Eso sería genial —asiento con alivio mientras mis ojos apuntan a la ventana en busca de señales de Allie. Mierda, no puedo creer que Axl está aquí.

—Entonces vamos —indica con una sonrisa antes de abrir la puerta y toparse de frente con su hija—. Oh, cariño, me voy a la floristería. Nos vemos en la tarde, cuídate ¿vale?

Le besa la mejilla a modo de despedida y luego dice que me de prisa, por lo que Allie enarca una ceja hacia mí, preguntándome sin palabras qué es lo que está pasando.

—Esto sonará de locos, pero Axl está aquí.

—¿Axl... como Axl el novio de Shay? —ella enarca ahora ambas cejas, sorprendida.

—Ese mismo —me rio—. Te cuento bien más tarde, ¿va? Tu mamá va a darme un aventón a la estación de buses. El imbécil vino sin avisarme.

—Bueno —asiente lentamente mientras que camina unos pasos al interior y deja la escoba apoyada contra la pared—. Lena va a traer a Tas aquí, así que puedes venir con tu amigo... si quieres, claro.

—¿Por qué no querría? —frunzo el ceño.

—¿Quizá por que entonces él se enteraría de... —las características manchas rojas comienzan a llenarle el rostro mientras evade mi mirada— de nosotros?

Me acerco, mordiéndome los labios para no reír, y ubico ambas manos a los lados de su rostro de bebé. Mis pulgares trazan una caricia sobre sus pómulos altos mientras niego con la cabeza.