Andrea dejo escapar un suspiro cuando la boca de Samuel cubrió la suya, moviendo sus labios de una manera dulce, cada vez necesitaba más sus besos, y le resultaban más difíciles de olvidar, sentía los latidos de su corazón a todo galope, y las palabras que le había dicho hace unos segundos le habían paralizado en corazón, estaba perdiendo la batalla, y lo sabia.
Cuando las manos de Samuel bajaron hasta su cintura ella alzo las suyas para colocarlas alrededor de su cuello dejando caer la rosa roja que había cortado cuando llego ahí, y profundizando más el beso, aunque seguía siendo lento y dulce, y cuando sintió que se le iba la respiración se fuera separando lentamente de él. Mirándolo a los ojos y viendo el brillo que había en ellos.
Andrea: Nunca te canses de mi ¿Si?
Samuel: Nunca, nunca podría.-dijo sonriendo y la abrazo pegando su cabeza a su pecho.-Es tarde, debemos irnos.
Andrea: ¿Te quieres ir?
Samuel: No, pero no se trata de eso, debemos irnos, puede ser peligroso de noche, es mejor que te deje en tu casa y después me vaya a la mía si? Mañana nos veremos de nuevo.-dijo aun teniéndola entre sus brazos y esta asintió, volviéndolo a besar.
Andrea: Muy bien vamos, aunque traje mi caballito.-dijo mientras caminaban hacia la salida.
Samuel: Muy bien, vámonos en tu caballito y después regreso por mi auto.
Andrea: Últimamente andas mucho en auto no ranchero? Como que te volviste muy catrín ¿no?
Samuel: Te parece? Bueno este para loa planos que tengo que traer siempre, es más cómodo en auto, pero por supuesto que también monto, ya no tanto como antes pero si de ves en cuando.
Andrea: Bueno, pues mañana vamos a salir pero a caballo, en uno solo, así podemos ir más apretaditos y sentirnos mejor.
Samuel: Andrea...
Andrea: Que? Porque siempre tienes que malinterpretar lo que digo ranchero, te lo dije en buen plan, te lo juro.-dijo y el comenzó a reír.-Mira porque no mejor tu te vas en el auto y yo a caballo, mi hacienda queda más cerca, y de chica muchas veces salí y regrese a altas horas de la noche, ten consta porque me ibas a buscar.
Samuel: Si, me acuerdo, muchas veces me quede en vela porque la niña no aparecía, y tenias a casi media hacienda preocupada.-dijo y ella comenzó a reír.-Esta bien, ve tu sola, solo que cuídate si?
Andrea: Si.-dijo y se dieron un ultimo beso antes de que ella se montara en el caballo y comenzara a irse.
Cuando el ya no la distinguió más, entonces se subió a su auto y lo encendió dirigiéndose a su hacienda, agradecía que las cosas entre Andrea y el se arreglaran, y como le había dicho Abram, lo mejor era confiar en ella, y luchar por su amor, eso era justo lo que iba a ser él, demostrarle a Andrea que podía confiar en él, y al mismo tiempo confiar el en ella.
Andrea caminaba por las caballerizas, hace mucho que había amanecido, y se había quedado de ver con Samuel en la hacienda pero él le dijo que aun no terminaba algunas cosas, así que lo pospusieron para más tarde, quiso pedir un caballo para ir a montar un momento y después ocuparse de algunas cosas de la hacienda pero justo cuando estaba llegando a uno de los establos escucho como unos niños estaban peleando y se acerco para ver y escuchar más, a uno no lo reconoció, pero el otro estaba segura que era el niño con el que platico la otra ves.
###: Pues a mi, mi mamá si me quiere y mi papá también en cambio a ti ni siquiera tu papá!-dijo y Andrea se recargo divertida sobre unos costales, esperando a que Pan se defendiera, pero este no lo hizo solo comenzó a llorar.
