50.-Pasión desbordada

3.5K 205 56
                                    

Andrea sabia que por el camino que Samuel la estaba dirigiendo solo podían ir a un solo lugar, el lago, pero ir al lago a las 11:00pm era un poco extraño, y ni loca se metería  a nadar con ese frio que hacia en ese momento, así la tratara de convencer de la mejor manera.

Samuel: Ven.-dijo abriéndole la puerta y tendiéndole la mano para que ella bajara del auto, y Andrea así lo hizo.

Andrea: No se que pretenderás trayéndome a este lugar pero si tu intensión es que nos metamos para darnos un chapuzón de una ves te advierto que no me...-dijo antes de ver todo lo que el había organizado. Quedándose en shock cuando vio la sorpresa que Samuel le tenia preparada.

Samuel: No pretendo meterte al lago si no quieres, aunque no me desagrada la idea de bañarnos aquí, a la luz de la luna.-susurro sobre su oído haciendo que la piel de ella se erizara. Pero ahora no sentía excitación, bueno si, pero poca, lo que realmente sentía era una emoción tan grande que hasta le dieron ganas de llorar, nunca nadie le había preparado algo así en toda su vida.

Las velas alrededor de los pétalos rojos en forma de corazón, sobre una manta algo grande, las rosas que adornaban la pequeña mesa que había, el camino de velas que había formado desde donde estaban ellos, hasta donde estaba la mesa, las veladoras largas color rojas que estaban en medio de ella, las copas de Champagne...todo era hermoso. 

Samuel: ¿Te gusta? Lo prepare especialmente para ti.-dijo y sonrió con ternura al ver como las lagrimas comenzaban a inundar los ojos de Andrea, dando por echo que la sorpresa seguro le había gustado.-Es a causa de nuestra reconciliación, que espero sea la ultima y después de esto, no tengamos ni un problema.

Andrea: ¿Y aun así me prepararas sorpresas como esta? Por que si no es así, yo estoy dispuesta a pelearme contigo todos los días.-susurro y el comenzó a reír.

Samuel: No será necesario, claro que te preparare sorpresas como esta, solo que no diario porque se nos volvería costumbre y no algo especial.-dijo y beso su mejilla, tomando su mano.-Ven.

Andrea: Es hermoso.-murmuro con emoción mientras dibujaba una sonrisa que después desapareció.-Pero yo no te compre regalo de reconciliación, nadie me dijo que tenia que comprar uno.

Samuel: No te preocupes, el que tu estés aquí y me ames, es mi mayor regalo.-dijo sonriendo y se acerco a besarla con delicadeza y amor, cuando estuvieron cerca de la mesa.-¿Cenamos?

Andrea: Sii.-dijo y soltó una risita sentándose a comer mientras el besaba su mejilla y se sentaba junto a ella.-Ay que brindar.

Samuel: Si, porque?-pregunto sirviendo el champagne en las copas.

Andrea: Eheee, bueno por nosotros, por nuestro amor que hasta ahora lo reconocí abiertamente, como quien dice, salí del closet de los enamorados...pero que en realidad siempre estuve enamorada de ti, por lo que somos ahora, y lo que esperamos ser en un futuro.-dijo alzando su copa y Samuel la igual juntándolas con delicadeza.-Salud.

Samuel: Salud.-susurro y ambos bebieron.-Bueno, ahora si señori...señora perdón. A probar esta rica, y desidiosa comida.-dijo sirviendo spaghetti en los platos para después echarles la salsa mientras Andrea veía sintiendo que la boca se le hacia agua.

Andrea: ¿Y tu la preparaste?

Samuel: No, Rosa.

Andrea: Ahaaa pues mientras a mi plato no le haya echado veneno para ratas, todo esta perfecto.-dijo y Samuel comenzó a reír.

Samuel: No, tranquila que yo estuve supervisando todo, y bueno, en todo caso nos morimos los dos.

Andrea: Ahaaa bueno, eso me consuela mucho.

INDIFERENTESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora