Cuando habla el Corazón 2 (chico x chico)

Capitulo 23

Aún podía oler el intenso tufillo a putrefacción cuando Julian intentó abrir los ojos, pero sólo consiguió despegarlos de los parpados en el tercer intento. Podía notarlos excesivamente pesados, como el resto del cuerpo y un dolor intenso le recorría la cabeza hasta la mitad de la espalda. Hizo una mueca, moviéndose lentamente, tratando de ver algo a su alrededor sin llamar la atención.

Las luces aún estaban encendidas y Julian comprendió sin necesidad de moverse mucho que seguía en la misma habitación que había estado antes de que le golpearan, pero ya no se encontraba al lado de la puerta, sino al otro lado y no tuvo el valor de moverse para comprobar si realmente se encontraba al lado de la pila de cadáveres que se suponía debían encontrarse en ese lado donde estaba. Cerró un segundo los ojos, conteniendo mal un sollozo y miró con horror como algunos gusanos se revolvían bajo su cuerpo.

Con esfuerzo, Julian se tragó las ganas de vomitar que sintió en ese momento y desvió la mirada, entre arcadas y clavó la mirada en los tres hombres que había en el medio de la habitación, sin prestarle atención.

Tres.

Julian comenzó a respirar con fuerza, mirando con más violencia el resto de la habitación que abarcaban sus ojos. Estaba vacía, no había nadie más. Con un espasmo de terror volvió a mirar a los hombres antes de apartar los ojos hacia la puerta abierta. ¿Qué había sucedido? Ni siquiera sabía cuanto tiempo había estado inconsciente y podía haber pasado cualquier cosa mientras él dormía... La idea era descorazonadora. sabía lo que sucedería si cualquiera de los amigos de Kei habían muerto... No... no podía ser verdad, no podían haber muerto...

Julian hizo ademán de incorporarse. Necesitaba saber lo que había pasado, necesitaba que le confirmasen que todos estaban bien, que seguían vivos, pero no necesitó levantarse; se quedó petrificado, con la cabeza levantada, sin prestar atención al movimiento de los gusanos entre sus dedos mientras veía como un grupo de hombres arrastraban a cuatro de los chicos que habían salido con él del escondite de Kei.

Estaban todos heridos y por el hilo de sangre que uno de ellos dejaba por todo el camino, Julian imaginó que al menos uno estaba malherido.

Sin intentar seguir fingiendo que seguía inconsciente se incorporó con la necesidad de verles la cara y no sintió alivio al comprobar que entre ellos no estaban los rostros conocidos de Oshi y Rykou. Sin darse cuenta se llevó una mano al pecho. El dolor físico que sentía por todo el cuerpo, sobre todo en la cabeza le suponía una manera de resistir la angustia que le desgarraba el pecho, pero no apartó la cabeza de los cuatro hombres mientras los obligaban a arrodillarse en el suelo y los ataban con fuerza.

—Éste intentó matarse —dijo uno de los hombres, dando una patada en el estómago a uno de los chicos arrodillados.

—¿No hay ninguno más?

—Encontramos algunos cuerpos más entre los escombros de la zona destruida, pero no respiraban.

No... Julian se encogió, desmoronándose y sintió como se le humedecían los ojos y la desesperación ganaba la batalla.

—Asesinos —sollozó, intentando levantarse con la mirada borrosa por las lagrimas.

—Vaya, se nos ha despertado. Al final no le diste lo suficientemente fuerte.

—Bueno, uno más para interrogar. Átalo y júntalo a los otros.

Julian retrocedió, asustado, aún sin controlar las lágrimas y echó un vistazo a los cuatro chicos arrodillados, rostros que solo había visto una vez, personas que no significaban nada para él pero que sabía que eran importantes para Kei, igual que lo eran aquellas que habían muerto en ese lugar, igual que Oshi y Rykou y notó como todo a su alrededor desaparecía al leer los labios al hombre al que habían dado la patada, aquel que había respondido a Oshi en la entrada y había decidido adentrarse en aquel lugar.

—Mátate.

No era una orden, era un consejo, algo que ellos habían deseado para ellos, pero Julian no reaccionó a tiempo y cuando unas manos lo agarraron, intentó apartarse pero volvieron a golpearlo en la cabeza y Julan se escuchó gritar cundo notó una punzada en un ojo y lo arrastraron hasta el resto, atándolo con fuerza, inmovilizándole las manos.

—Parece un poco débil —comentó el hombre, apretando la cuerda en sus muñecas—. No parece un soldado.

—Da igual. Si está con ellos nos servirá igual —El hombre que Julian había considerado el líder se paseó frente a ellos y se molestó en levantar alguna de las cabezas, observando con asco el rostro antes de soltarles la barbilla—. Pondremos esto fácil. Todo terminará rápido en cuanto me digáis donde se encuentra escondido Kei Kazahara.

Nadie respondió y Julian mantuvo la mirada fija en el suelo, asustado, preocupado, notando el ligero temblor que sacudía todo su cuerpo y se odió por no tener la entereza de los otros cuatro hombres.

—Ya, nadie habla, ¿eh?

Julian se humedeció los labios resecos y dio un respingo cuando el hombre le agarró la barbilla y le levantó la cara, mirándole a los ojos sin vacilar.

—¿Dónde se esconde? —preguntó hasta con falsa amabilidad.

Julian intentó hablar pero no consiguió que su garganta emitiera ningún sonido y tardó en hablar, con voz débil, temblorosa y asustada.

—No lo sé —musitó.

El hombre sonrió y lo soltó, girándose para mirar al resto de sus compañeros.

—No lo sabe, ¿habéis oído?

Muchos rieron y otros dijeron algo en ruso. Sólo uno se mantuvo serio, aburrido, observando interesado el espectáculo. Julian bajó rápidamente la cabeza para no encontrarse con su mirada.

—¿Y qué podemos hacer ahora?

—¿Por qué no le refrescamos la memoria?

Y como respuesta, el hombre sacó el arma que guardaba en el pantalón y disparó dos veces al hombre que tenía a su lado, derrumbándose en el suelo mientras la sangre alcanzaba a Julian, manchándole la ropa.

Julian miró el cuerpo con los ojos muy abiertos, notando como la respiración se le aceleraba por segundos y se encorvó hacia delante, entre convulsiones, vomitando finalmente.

—¿Qué? ¿Necesitas algo más para refrescarte la memoria?

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Bueno, dije en facebook que lo subía hoy.... cortito, pero bueno, creo que el siguiente no tardaré en subirlo :)

Gracias por leer, votos y comentarios ^^

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