CAPÍTULO 27

287 12 2
                                    

Me dirigí al baño de la habitación, puse a Macklemore en el iphone y empecé a desnudarme. El brillo había vuelto a mis ojos y un poco de color a mis mejillas, pero todo lo demás era extraño. Siempre había sido una chica delgada por todo el ejercicio que hacía, así que tambien tenía unos musculos definidos, pero nunca había estado tán delgada. Se notaban todos los huesos habidos y por haber. La verdad, esa no era la persona que quería ser. Estaba tan concentrada odiando mi cuerpo e intentando que unas cuantas lágrimas no cayesen sin mucho éxito, no me dí cuenta de que Zayn entró en la habitación. Se quedó mirando mi reflejo, mi cuerpo, mi cara, mis ojos...

- Esta no soy yo Zayn.- Le dije en un susurro.

- Si, si que eres tú. Tal vez no seas así,- dijo señalandome,- pero esa eres tu.- Dijo esta vez señalando a mi reflejo mientras que me abrazaba por la espalda.

- Yo no quiero ser así, quiero volver a ser como era antes, quiero volver a ser yo.

- Pues dejame ayudarte, por favor Marel. Siempre eres tan cerrada, hay cosas que no me cuentas, pero es demansiado para tí, tal vez haya cosas que prefieras contarselas a otra persona como Emma, Alyson, Hanna o Harry, pero nunca olvides que estoy aquí para tí, yo quiero ayudarte.

- Lo sé.- Pasaron cinco minutos más, yo seguía con mi mirada perdida en la figura que tenía delante.- ¿Necesitas respuestas?

- Sí, sí que las necesito. No quiero que me las des ahora ni cuando salgas de la ducha, pero necesito saber lo que ocurre para poder ayudar.

- Bien.

- De acuerdo.- Besó mi mejilla y salió del baño. Me metí en la ducha, necesitaba olvidarlo todo.

Una vez salí, me puse unos leggins negros, una camiseta de Zayn de Guns and Roses y me sequé el pelo para luego ponerlo en un moño alto, desordenado. Cogí el móvil y mandé un mensaje a mi hermano diciendole que ya había llegado a Londres y que todo iba bien, mientras bajaba por las escaleras. Cuando llegué abajo me encontré con Liam quien estaba al teléfono.

- Hey Payno! ¿Que tal?- Estaba de espaldas así que no ví su cara de cansancio hasta que se dió la vuelta.- ¿Que ocurre?- Susurré.

- Luego te llamo.- Dijo nada más verme, con una gran sonrisa en los lábios.- Preciosa! No se te ocurra volver a irte por tanto tiempo y tan derrepente, te he hechado tanto de menos!

- Yo tambien te he hechado de menos!- Dije respondiendo a su abrazo.- ¿Me cuentas lo que ocurre?- Dije señalando a su móvil.

- Ni siquiera yo lo sé, es sobre una chica, bueno ya hablaremos de eso... deberías ir a la sala, Louis está como loco por verte, si no fuese porque lo hemos parado, hace mucho que lo tenías metido en la ducha contigo abrazandote y diciendote lo mucho que te a hechado de menos!- Dijo riendo por lo que yo también me reí al imaginarme la escena.

- De acuerdo.- Entré al gran salón en la que los chicos hablaban animadamente mientras que un estúpido programa de risa estaba puesta en la tele.

- ¿Que tal grandullón?- Pregunté nada más entrar. Al oír mis palabras Louis se giró y corrió hacia mí como un niño hacia sus regalos el día de navidad.

- ¡¡ENANA!! Te he echado tanto de menos... no te lo puedes ni imaginar!!- No podía respirar, estaba tirada en el suelo con Louis tirado encima mío.

- Y-ya... bueno yo ta-tambien te he hechado de menos, pero levántate que no puedo respirar!- Dije medio ahogándome medio riendo.

- Bruto! No mates a mi chica, se te ocurre volver a hacerle daño y juro que yo mismo te mato!- Dijo Zayn apareciendo de la nada y sacándo a Louis de encima mío agarrandole con un solo brazo. Todos rieron ante la escena, y por mucho que Zayn dijera eso en broma, yo sabía que en realidad iba a ser así.

Only with youWhere stories live. Discover now