29: Un héroe

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CAPÍTULO LARGO♥
MULTIMEDIA IKER PATTERSON

Aída Pierce.

Todo pasaba en segundos. Raymon luchando contra su propia familia para que lo dejarán salir, Glenn hacía lo mismo, pero al final no lo lograban. A mí alrededor estaba toda la multitud emocionados, con sus ojos rojos. Justo con la expresión en su rostro de un humano cuando le regalan algo tan deseado. Les provocaba felicidad ver toda está escena.

La Princesa me veía sonriente, estaba conforme con el hecho de que hoy sería su muerte. Sabía que no tiene oportunidad con la familia Adamson y menos con todas las familias que anhelan verla morir. Pero lo que más le agradaba es que moriría con sangre en las manos, y con ello me refiero a mi vida.

Todos los vampiros tenemos alas negras, excepto los que apenas iniciaron en está inmortalidad, por ejemplo Anzel. Pero justo después de la "muerte" fingida de la Princesa, nadie las ha tenido.

De por sí muy pocos las utilizaban, pero en estos momentos sí son indispensables. Aún no sabemos las razones de esté suceso, pero hay rumores diciendo que ese fué el acuerdo que hizo la Princesa con las Brujas para que la pudieran proteger el día en el que supuestamente sería la ejecución del resto de los Pierce. "Deshacerse de las alas de los vampiros, impidiéndoles volar y te garantizamos que la familia Tanner no te matará" .

—Te puede tocar una Princesa peor..— dice con una sonrisa de lado mientras mira a su alrededor.

—Supongo que luego la conoceré.

—Cuando te mate, haré lo mismo con tus amigos.

Miré a Anzel, a Ian, Iker, Soraya y estaban más que nerviosos.

—ó simplemente te puedes unir a mí.— agrega.

Cuando un sujeto dió la señal para que esto comenzará, enseguida tomé la postura de defensa mientras que la Princesa lo contrario. Ella estaba lista para atacar.

La princesa se acercó a mí segura de sí misma, y justo cuando soltó el golpe, fuí lo suficientemente rápida para esquivarlo. Al parecer no se había quedado conforme, así qué tiró dos golpes, pero está vez con una velocidad y fuerza impresionante, que no me dió tiempo a reaccionar. Me pegó en el rostro las dos veces seguidas, y el dolor era algo inexplicable, nunca antes había sentido semejante daño.

Me presumió una sonrisa con sus enormes colmillos, y a la vez me mostraba quién era la que mandaba aquí. Retrocedí unos dos pasos balanceandome de un lado a otro. Tenía que reaccionar, tenía que hacer el intentó.

Nuevamente la mujer se me acercó y venía con toda la intención de acabar conmigo. Miré como estaba apuntó de soltarme una patada en el abdomen. Pero la ocasión se repitió, y logré esquivarlo. Sin darle más tiempo. Regresé vários golpes seguidos, sin cesar en algún momento. La Princesa se rió, y apretó mi mano fuertemente, provocando que me detuviera por completo.

Todos gritaban, pedían más. Los vampiros ansiaban mirar más sangre, y al parecer la Princesa los complacería.

Sus dos manos estaban ocupadas en las mías, así qué patee su abdomen y justo en ese momento me zafe de su agarré. Me acerqué a ella más desafiante y está vez le tiré un puñetazo en el rostro, uno tan fuerte que hasta a mí me había dolido. Pero al parecer yo había sentido más dolor, ya que la princesa se quejó un poco, retrocedió uno que otro pasó, pero luego levantó la mirada y me sonrió como diciendo "¿Eso es todo lo que tienes?".

Corrió hacía mí tan rápido, que no me dí cuenta. Me tiró una patada en el estómago que me lanzó a metros de donde estaba. Todo mi cuerpo cayó en el suelo, me había golpeado fuertemente. Apenas me pondría de pie, pero cuando lo iba hacer, la tipa ya estaba encima de mí. Golpeó mi rostro varias veces.

Inmortales I: Prisionera Donde viven las historias. Descúbrelo ahora