taekook; sweet skin (달콤한 피부) ✨ EDITANDO

CATORCE🌈

Jungkook

—Ese es mi chico... —Pronuncia haciéndome sonrojar. Me está tocando lentamente, y lo único que yo puedo hacer es gemir, gemir para él, solo para él.

Volví muy rápido. No debí perdonarlo, es un idiota, pero me atrae y quiero que me toque y no me deje ahora.

—Ah, Taehyung...

Mis ojos llenos de excitación captan la atención de su erección. Dios mío, no puedo creer que todo eso pueda caber en mí. Con razón quedo destrozado cada vez que me la mete. Muy pocas veces se la miro, y pensar en el pene de Taehyung mientras me masturba es extraño, así que mejor quito los botones de su camisa con delicadeza.
Y si sigue mintiéndome, y si sigue jugando conmigo, y si todo lo que dijo casualmente es verdad... ¿Por qué sigo metido aquí? ¿Por qué dejo que me toque sin ningún reclamo?
Y así me haga lo peor posible, yo seguiría dejándolo entrar a mi corazón. Pero el caso es: ¿qué tiene ese hombre que ya no puedo siquiera apartarme de él más de una semana?
Es un imán a mí prácticamente.

Mientras acelera más sus movimientos me recuesta en la cama estando encima mía. Se aproxima mi clímax. Algo recorre mi espalda avisándome.

—¿P-puedo venirme? —pregunto en un gemido.

—¿Qué? —su voz es más ronca y es similar a la de un demonio tal vez.

—Por favor —suplico. Siento sus fuertes dientes aferrándose a la carne de mis labios, y es ahí cuando me vengo tomando su nuca para que se acerque más a mí. Necesito sentirlo pues, mi sed de él aún no cesa, lo necesito, así me haya lastimando de la peor manera.

Aturdido y con una nueva cicatriz en el labio, espero a mi Daddy suspirando su nombre. De verdad que no puedo creer que esté pensando en ese seudónimo tan estúpido, pero me excita.
Escucho como cada prenda suya cae al suelo. Cuando siento su mano en mi mulso me estremezco un poco y al escuchar su voz tremendamente cambiada quiero sonreír como un psicópata. Algo me dice que no existen más como él.

Comienza a besarme de una manera que no había sentido. Ahora es más suave, y cuando juego con su lengua corresponde a mis caricias. Se separa por un momento y comienza a darme pequeños besos en los labios, regresa y viene, regresa y viene. Es demasiado tierno de lo que pensé. Baja a mi cuello cautelosamente y lo besa esta vez sin dejar marcas en él. Está entre mis piernas tomando mis muslos y disfrutando de mi piel. Tomo su nuca deseando más al sentir sus roces y sus besos.
Trazo círculos en su espalda y noto como sus vellos se erizan al sentir mis manos frías en él.

—Voltéate, Kookie —murmura en mi oído. Obedezco, como el buen chico que soy y me pongo en cuatro apoyando mis codos en la cama al igual que mi cabeza.
Mete dos dedos en mí lentamente y los mueve exquisitamente. Me duele un poco, pero solo me quejo unos segundos.
Mete el tercero y no creí que me doliera mucho pero es así.
Gimo cada vez más cuando acelera sus movimientos y mueve sus dedos dentro de mí.

—Ah, Hyung... Cógeme, por favor —si hay algo que he aprendido es que Taehyung se enciende por completo cuando suplico, cuando soy sumiso a él por completo.

No lo piensa dos veces y lo hace. Tomo con fuerza las sábanas mientras gimo al sentir sus embestidas. No sé porque aún duele un poco sentirlo dentro.

—Eres un bebé llorón, Jungkook. ¿Te duele? —acaricia mi espalda hasta llegar a mi cuello y mantener su mano ahí.

—N-no, sigue —acelera sus movimientos mientras me toco.

Estoy sintiendo una electrizante sensación, tal vez es que nos hemos conectado más. Joder, es increíble, pero a la vez me preguntó qué es lo que estoy haciendo.
Cuando los dos terminamos es imposible no tirarme en la cama exhausto esperándolo a mi lado.
El labio me arde un poco, pero es algo leve que puedo soportar. Taehyung se acuesta sin dejar de verme, es abrumador que haga eso.