| 03

1.9K 125 21
                                    

El día de hoy Peter ha estado junto a mí prácticamente cada segundo desde que llego, las únicas excepciones han sido cuando él necesita ir al baño y en las únicas dos clases que teníamos separados.
No me molestaba en lo absoluto, sabía que este acercamiento era por la ausencia de influencia femenina en la vida de Peter; su madre se encontraba viajando continuamente y no desempeñaba muy bien su papel, su hermana no socializaba con su familia desde hace siete años, debido a una terrible pelea con sus padres. Cuando éramos niños él recurría a mí, Heather fue mi relevo, y al parecer ahora que habían terminado, volví a mi papel.

Y por supuesto los rumores al respecto ya comenzaban a correrse como el herpes en un prostíbulo. Pero eran algo divertidos.

El primero lo escuché de parte de Laia. Algunas chicas de nuevo ingreso que pretendían conocernos a fondo, iban por ahí esparciendo la mentira de que Peter había terminado con Heather, solo para comenzar a salir conmigo. Pero que al enterarse que Heather fue más rápida que él al salir con Hemmings, Peter se enfureció y por eso ocurrió la pelea del día de ayer. Bastante creativo para el diminuto cerebro de las chicas de nuevo ingreso.

El segundo rumor era un poco más fantasioso, era prácticamente lo mismo, Peter había dejado a Heather por que había elegido estar conmigo, por obvias razones. Pero al parecer la pelea que sucedió ayer fue debido a que yo ocultaba una relación con Luke Hemmings y al enterarse de mi nueva relación con Peter, perdió los escrúpulos y quiso vengarse de mí saliendo con mi amienemiga Heather.

Ambos rumores me parecían irónicamente desagradables. Heather y yo no somos simples juguetes desechables que se pueden intercambiar de hombre en hombre, tal y como los rumores nos hacen ver. No se lo que ella piense, pero en una relación yo soy quien elige a la pareja, no el hombre a mí.
Y aunque esté enfadada por la visión tan machista que la escuela sostiene, me veo forzada a postrar una sonrisa en el rostro y mostrar a todo el público que no me ha afectado en lo absoluto.

—El coach Lange ha decidido adelantar el entrenamiento— menciona Peter mientras nos dirigimos a nuestra cuarta clase del día, psicología empresarial.

—¿Cuánto tiempo?— pregunto repasando mi agenda mental.

—Una hora y media antes.

—Por Dios, ese hombre y su desorganización terminarán por matarme— resoplo exasperada —Dudo mucho que pueda asistir.

—¿Porqué? Molly en dos semanas son las eliminatorias.

—Tengo junta con el equipo de debate y después una reunión con Jordan del equipo de matemáticas. El ir al entrenamiento implicaría adelantar esas dos reuniones y faltar a mi último periodo ¡Y no puedo faltar a mi última clase!— coloco mi mano en mi entrecejo, comienzo a masajear mi frente y frunzo el ceño. Detesto que las personas cambien los horarios y por ende estropeen mi organización.
Esta a punto de darme un colapso mental.

—Cancela a los de debate— sugiere Peter —Los chicos de ese club aunque sean bastante habladores nunca replican ante una orden de tu parte.

—¿Cómo sabes eso?— preguntó bastante curiosa. Peter sonríe y muerde su lengua.

—Te he prestado bastante atención— me guiña un ojo. Ese gesto de su parte podría derretir o emocionar a cualquiera, pero a mi no, bueno no tanto.

—Aunque cancele la reunión del club de debate aún queda Jordan, y esa chica es más molesta que un grano en el culo.

—Solo dile que vaya a la pista, le pides unos minutos al coach y que diga rápido lo que tiene que hablar contigo— llegamos a nuestro destino. Peter me permite pasar primero al aula, un gesto bastante caballeroso.
Esta vez nos sentamos enfrente, uno junto al otro.

GET TO U |L.H.Where stories live. Discover now