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3 horas antes.

El tiempo había pasado tan rápido, incluso cuando creí que mis heridas internas harían pasar las horas con extrema lentitud.

Me encontraba como en estado de coma, inconsciente y levitando, mi cuerpo estaba junto a Calum encerrados en la sala de juntas de los directivo, pero mi cerebro estaba como en una cápsula del tiempo, volviendo cada segundo al momento en el que mis ojos se conectaron con los de Luke Hemmings mientras él se follaba crudamente a Heather.

¿Pero qué pasaba con lo que Calum me había confesado?
Esa declaración me estaba martillando el cráneo, con una fuerte migraña.
Creo que ya había quedado completamente deshidratada de tanto llorar sobre el hombro y pecho de mi buen mejor amigo. Como todo buen hombre, él me daba pequeños golpecitos y algunas palabras de aliento que no servían de nada; en otra ocasión me daría pena que alguien me viera con el maquillaje negro corrido por todas mis mejillas y mi labial desbordado por lo alrededores de mi boca, pero ahora no tenía tiempo de pensar en ellos, no había espacio.

Aunque si me lleno de culpa, ya que Calum pensaba que mi llanto era única y exclusivamente influenciado por la muerte de Ezra; de igual forma él podría estar bajo tierra y yo no sentiría nada en lo absoluto, pero el hecho de que Luke tuviera algo que ver con su muerte, sumándole el golpe traicionero que me había dado horas atrás... algunas personas podían soportar más que otras, y ya estaba bastante dañada psicológicamente como para poder con el peso de esto. Me había quebrado.

Hemmings había cumplido cada una de sus amenazas, ahora entendía todo, estaba tan claro. Él había aprovechado la vulnerabilidad con la que me manejaba; sus advertencias dieron justo en los clavos más enterrados de mi cuerpo: fue contra mi familia y mis sentimientos. El pensar esto último me revolvió el estómago, no quería tener sentimientos por Luke, no después de todo lo ocurrido.

—Ha arruinado mi maldita vida— chille intentando que más gotas saladas salieran de mis ojos. Apreté mis manos aun teniendo su camiseta entre estas, pero él no se quejó.

—Lo va a pagar— susurro contra mi oído mientras brindaba pequeños mimos en mi cabeza.

—Calum— me levante de su regazo y conecte mis ojos con los suyos —Necesito que me digas todo lo que sabes respecto a Luke Hemmings y Ezra.

—Solo alguien me ha asegurado que los vio discutir más de una vez esa noche, que no solo pelearon en mi casa y que el verdadero objetivo de Luke no era Ezra, sino Peter.

—¿Sabes como se le llama a eso?— él negó —¡Rumores Calum! ¿Qué otras pruebas tienes de que ha sido su culpa?

—Él tiene pruebas— sentenció con una voz seria.

—¿De quién demonios hablas?— comencé a alarmarme y no era menos de lo esperado.

—No debería haber dicho eso— su voz fue tan baja que me hizo pensar que se hablaba a sí mismo —Fue un maldito impulso— golpeó el suelo con su puño.

—Dímelo de una maldita vez— rogué pegando pequeñas palmadas en su pecho. Estaba desesperada.

—Peter— mencionó como un niño regañado —Él sabe toda la verdad— tomo aire —Mi única tarea era mantenerte alejada de Hemmings, ambos tenemos miedo de que algo pueda ocurrirte. No lo conoces Molly— como si supiera que sus palabras me lastimarían, me encerró entre sus brazos con la suficiente fuerza como para que no pudiera escapar de él.

—Necesito buscar a Peter— fue lo único que dije intentando levantarme y luchando contra su masculina fuerza física.

—Te ayudó; estaba en la pista de baile con...— entonces dejó de hablar, al recordar que estuvo apunto de mencionar el nombre de la sabandija Rose.

GET TO U |L.H.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora