El Donante | hs

II. Una Broma

II. Una Broma

La decisión que había hecho al elegir a Harry Styles como él donante para mi bebé había sido toda una revelación, incluso para mí misma en su momento. Había sabido de su existencia por primera vez durante el baby shower de Cass cuando esta estaba esperando a Nach, él se había presentado vistiendo traje cuando la celebración se había llevado a cabo en un jardín en medio del verano, recuerdo que me había parecido ridículo dada la alta temperatura que había echo ese día, sin embargo, eso no lo había detenido para participar en las distintas actividades que habían organizado. Me había reído muchísimo ese día. Se preguntarán cómo es que no nos habíamos conocido, o cómo es que él no se acordaría de mí, y la respuesta era simple, nunca nos habíamos topado de frente, para mi mala suerte o quizá para la buena había tenido un accidente y me había quebrado la pierna derecha, había pasado casi todo el día sentada junto a las tías mayores, escuchándolas contarse todos los nuevos y jugosos chismes que abundaban en la familia. Por ende, no había estado ni siquiera cerca de conocerlo, solo mi buena vista me había ayudado a... identificarlo y a agregarlo dentro de mi lista.

Posterior a esa primera vista de él lo había investigado con Cass, ella creyó que quizá me había llamado la atención y contentísima me había contado todo sobre él: Soltero, 29 años, hombre de negocios, pues tenia diversas empresas en Londres y algunas cedes en Los Ángeles, además de eso participaba con donaciones a la caridad y era padrino de un orfanato en su ciudad natal. El hombre era guapo y tenia buen corazón, o eso me permití creer.

Él y Cassim se habían conocido hace casi una década gracias al padre de Cass, no tenía idea cómo es que nunca la había escuchado hablar de él, o bueno, quizá lo había mencionado, pero hasta que un nombre no tiene cara no hay relevancia. Y bueno, de ahí en adelante había acompañado a Cass cuando tenía eventos de caridad. Todo lo que hacía y la transparencia con la que manejaba todo me hacía ver que realmente era interés puro por ayudar a todas esas personas. Me había parecido hermoso que se tomará el tiempo de jugar con los niños del orfanato y les creará actividades recreativas, este sería el tercer año que organizaba torneos de futbol, había asistido al anterior y moría de ganas por asistir al de este.

Sonreí mirando al hombre frente a mí.

"Quiero pedirle que sea mi donante de esperma"

Esas ocho palabras habían permanecido en el aire por menos de 1 minuto, pero en el ambiente se sentía la tensión de mucho tiempo más. No era capaz de describir su expresión, no sabía si estaba horrorizado, divertido, aliviado o apuntó de llamar a seguridad. Su rostro no me decía nada. Joder. Él hombre frente a mi estaba en blanco. Deseaba esperar que fuera él quien rompiera el silencio, pero no veía señal alguna de que fuera a hacerlo pronto

Di un paso hacia él.

—¿Se encuentra bien?

Harry movió su cabeza en lo que parecía tratar de despejar sus pensamientos. Se recargó en la barda detrás de él y llevó una de sus manos a su barbilla, rascándola.

—Sí, disculpe. Es solo que me parece que no la escuché bien, ¿usted quiere qué? — Su voz sonaba inestable con algo de diversión en ella. No había rastro de la voz firme con la que me había recibido en primer lugar.

Aquí voy. Directa. Sincera.

—Quiero que usted sea el donante de esperma para mi embarazo. Esto, sí llega a aceptar, lo vamos a manejar bajo contrato y con abogados. — Saqué de mi bolsa mi expediente y de más documentos que podría llegar a necesitar. — Este es un certificado médico que le puede asegurar que estoy 100% sana y bien mentalmente, por si tenía dudas; no tengo antecedentes penales y estoy bien establecida económicamente, así que si acepta le puedo asegurar que no tendrá ninguna responsabilidad ni conmigo ni con el bebé nunca, no voy a pedirle nada y no volverá a saber de mí. En pocas palabras, este no sería su hijo. Se lo repito, podemos manejar esto con abogados y agregar sus términos.