EPÍLOGO

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HERA's POV

Estaba tomando mi examen final, mi último examen del año. Después de esto era libre por cuatro meses, el verano había llegado más rápido que nunca, me había saludado de la mejor manera y yo no me iba a pensar el aprovecharlo o no. Lo tenía más que claro, eran cuatro meses junto a Aiden, junto al amor de mi vida.

Porque así era, Aiden es el amor de mi vida, nadie puede cambiar mi opinión, nadie.

Escribí la última palabra revisando que todo estuviera correcto, me levanté para entregar mi examen y salí de ese aula sin volver a mirar atrás. Por fin podía respirar, desde que mi secuestro había ocurrido no pude hacer mucho. Aiden pasó un mes recuperándose del disparo, estuvimos en el juicio de mi madre a la cual le cayeron el resto de su vida en la carcel. Stone recibió tan solo 30 años, pero su vida no estimaba para mucho.

Él único que estaba libre era mi tío, aún no había nada sobre él. La policía seguía buscándolo, pero el maldito era muy bueno escondiéndose.

Aiden empezó a retomar la relación con su madre, se mudaron juntos, ahora están más unidos que nunca, luego mi padre está aún recuperándose de todo lo ocurrido, sigue paranoico pensando que algo puede pasar. Tengo a Aiden, nada malo va a pasarme, jamás me he sentido tan protegida en mi vida.

Salí de la facultad dejando que los rayos de sol golpearan mi piel. A lo lejos lo vi apoyándose en su lujoso coche negro con una gran sonrisa en su cara. Corrí hacia sus brazos con otro gran sonrisa.

Salté a sus brazos sintiéndome feliz, el cogió mis piernas enrollándolas en su cintura. Besó suavemente mis labios y cuando se apartó yo cogí su cuello devolviéndole un beso más feroz.

—¿Ha salido bien? — Me preguntó en un susurro.

—¿El beso o el examen? — Él soltó una carcajada.

—Deberías dejar de salir conmigo, te estoy pegando mis estupideces. — Ahora solté yo una carcajada.

—Tengo un 10 en el examen. — Él rodó sus ojos debido a mi seguridad.

—Hera Hess, eres perfecta. — Sonreí besándolo de nuevo.

No era perfecta, no era para nada perfecta, en cambio el si lo era. Era él chico perfecto, me cuidaba de una forma increíble, era muy suertuda por haberlo encontrado, por haberme enamorado de él. Era feliz de tener a Aiden, era muy feliz.

—Aiden, te amo.

Aiden se tensó por un momento. Hacia un largo tiempo que no pronunciaba estas dos palabras y se sentía raro, pero a la vez bien.

—¿Puedes repetir eso lentamente? — Sonreí y asentí.

Quería decírselo un millón de veces más.

—Te amo. — Le di un beso. — Te amo mucho. — Le di otro beso.

Él sonreía como un bobo y yo no pude evitar reírme ante su cara. Se acercó a mi oído y yo me estremecí. Siempre iba a ponerme nerviosa cuando hacía eso, era algo que causaba en mi.

—Bien, ahora vamos a casa y me lo dices mientras estás debajo de mi. — Me susurró haciéndome sonrojar.

Aiden sabía cómo ponerme nerviosa, es más, era su pasatiempo favorito, molestarme y ponerme nerviosa eran sus dos hobbies.

Lo amaba tanto.

Esa noche me perdí con él entre las sábanas, lo único que se podía escuchar eran nuestras respiraciones agitadas, los gemidos, podía escuchar hasta como tocaba mi piel. Aiden causaba muchas cosas en mi y yo no podía evitar estremecerme ante su toque. Él era genial, era maravilloso, no solo en la cama, en todo lo que hacía. Me volvía realmente loca.

Aiden salió a la cocina a por un vaso de agua y yo me quede en la habitación, con su camiseta blanca puesta, sonriendo como idiota en medio de la oscuridad pensando en él y sus caricias.

Mi móvil me sacó del trance, empezó a soñar de la nada.

Era un número desconocido.

Un número desconocido a las 3 de la mañana.

Con miedo apreté el botón de aceptar.

—¿Diga? — Pregunté.

Pasaron unos segundos de silencio cuando por fin pude escuchar una leve carcajada que me hizo estremecerme entera.

—¿Cómo estás querida? — Su voz me daba asco.

—Voy a llamar a la policía. — Él empezó a reírse.

—No quieres hacer eso, no cuando tu mejor amigo está en peligro.

—Déjate de mentiras. — Él volvió a reír.

—Dile algo. — Escuché su voz alejarse del aparato.

—¡Hera ayúdame! — Ese era claramente Steve.

—Si quieres volver a ver a tu amigo será mejor que me hagas caso en todo lo que diga.

Mi tío me colgó el teléfono y yo solo me quede mirándolo como idiota.

Esto no había acabado.

Mi tío estaba de vuelta.

•••••

Y aquí el epílogo ♥️

Ahora viene mi discurso 😌😂

Quería agradeceros por todo el Amir que le habéis dado a Dragon, no puedo ni creer que en en un mes Dragon ha recibido 4.000 leídas, o sea es realmente increíble este hecho, no me lo podía ni creer al principio. Debo admitir que no planeaba hacer una segunda parte de Dragon, pero al ver todo el amor dedicado a este libro decidí daros una segunda parte incluso mejor.

Vais a tener que esperar un tiempo hasta que saque la 2 parte, como mucho hasta Julio o Agosto, si nada se interpone en mi camino. Por ahora tengo la idea de sacar una nueva historia, así que veré como irá mi tiempo, pero prometo sacar la segunda parte este año ♥️

Gracias por todo el amor dado ♥️

Muchísimas gracias, sois increíbles ♥️😭

Dragon © Onde histórias criam vida. Descubra agora