Completamente Imperfectos (9°SAI)

Capítulo 6.

Dante.

Atracción.

¿Saben cuántas definiciones hay de esta simple palabra?

Acción de atraer.
Fuerza que tiene una cosa para atraer a otra o hacer que se le acerque.
Interés que provoca un persona o una cosa y hacer que alguien se sienta atraído hacia ellas.
Persona, animal o cosa que atrae o provoca interés.
Puesto, mecanismo o actuación que forma parte de un espectáculo o lugar de diversión.

Me detengo ahí porque podría pasar horas dejando que mi cerebro saque miles de definiciones a veces no es bueno tener un IQ tan alto porque pareciera que mi cabeza nunca descansaba en su totalidad.
Retomando mi idea sobre la verdadera razón del porque búscaba la definición de atracción era por el simple hecho de que no podía dejar de pensar en Abigaíl y no entendía eso ya que en este preciso momento mi cerebro estaba en un trance o sufriendo un especie de apoptosis.

No tenía respuestas y eso me frustraba demasiado.

¿Qué sucedía conmigo?

- Dante - papá entra a mi habitación y cierra la puerta lo que significaba que debíamos hacer algo sin que mamá se entere.

- ¿Cuál es la misión? - inquiero divertido.

- Debemos robarle el pasaporte a tu hermana para que no pueda viajar - dice con contundencia.

Papá nunca cambiaría.

- Lo robamos pero sabes muy bien que hoy en día se puede ir al aeropuerto tramitar el pasaporte express y todo solucionado - digo  observando cómo papá pone los ojos en blanco.

- ¿Me ayudas o no? - pregunta bufando.

- Claro que sí - afirmo levantándome de la cama.

Nunca podía negarme a ayudarlo en sus planes porque era absolutamente divertido ver a mamá regañarlo por invadir nuestro espacio personal.

Cosa únicas.

Lo repito siempre tengo una familia super loca y poco convencional empezando por mi padre y siguiendo por tío Giovanni alias el abastecedor de condones, cada uno estaba absolutamente loco pero era la escencia de la familia Salvatore.

Antes de acompañarlo a la habitación de mi hermana tomé algo del cajón de mi cuarto para joder un poco la paciencia de papá era tan fácil hacerlo enojar que se había vuelto competencia con mi hermano Sebastian para ver quién podía cabrearlo más y sobre todo si en esa broma estaba su total debilidad, mi hermana. Todo lo que sea relacionado a Olivia unido a la palabra sexo lo sacaba de quisio.

- ¿Se puede saber que hacen? - la voz de mi hermano más pequeño  nos sobresalta al ambos ya que estábamos revisando los cajones de la habitación de Olivia.

- Cierra la puerta - susurra nuestro loco padre.

- ¿Qué hacen? - el idiota de mi hermano susurra también mientras cierra la puerta. - La jefa está en casa - agrega generando que papá abra los ojos asustado.

La jefa es mi mamá, la única mujer que con una simple mirada puede ponernos a cada uno en nuestro lugar y la personas más amorosa del mundo.

La mejor mamá del mundo.

- Debemos robar el pasaporte de Olivia - murmuro.

- ¿Es broma no? - cuestiona Sebas.

- Si robamos el pasaporte ella no se irá con el idiota - comenta nuestro padre.

Olivia y Adam se irán de vacaciones juntos, el tema es que papá no quiere aceptar las cosas y ver lo que todos observamos. Ellos se aman.

- Si Oli se entera que fuimos nosotros y nos delata con mamá no me haré cargo - sentencia mi hermano hurgando en los cajones.