Capítulo 28: Tentaciones.

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—¿Cómo que no podemos salir? —vociferó Ringo —. Brian, ¡eso es injusto! Tenemos derecho a darnos una escapada al menos una vez por semana.

Se levantó del sofá pero Brian se encargó de contener a Ringo colocando una mano sobre su hombro.

Aquella era otra reunión donde estaban concretando algunas reglas que debían seguir. Al parecer el asunto de la maternidad de Lennon no quería cesar sino todo lo contrario. Los constantes ataques por parte de algunos reporteros y la falta de privacidad creaban un ambiente peligroso para el grupo. Epstein era continuamente atacado con preguntas y solo las fans que estaban a favor de las chicas ayudaban al manager para que arribase a la casa completo del cuerpo.

Él sabía de los peligros y no quería exponer a nadie. Solo dejaba que se asomasen al jardín para firmar algunos autógrafos hasta que una fan molesta por la postura de John le arrojó una piedra que casi logra golpearlo. A partir de ahí Brian, por seguridad de las chicas, tomó una decisión: que no salieran.

     —Al menos no por esta semana —aclaró el manager —. Chicas, hago esto por seguridad de ustedes. Sé que la prensa quiere declaraciones, pero no pienso exponerlas a un posible ataque como el que le hicieron a Joanne. Sí, sé que dije debían acaparar las cámaras, solo que esa piedra me hizo cambiar de opinión.

—¿Entonces nos piensas dejar aquí en casa por esta semana consumiéndonos en la aburrición? —Paul hizo un gesto de disgusto.

—¿Consumiéndose? ¡Por supuesto que no! Tienen muchas cosas qué hacer: ensayar, canciones por escribir y relaciones interpersonales que salvar —miró a Ringo y George cuando dijo lo último —. Y prepararse, porque las siguientes semanas las tienen llenas. Empiezan con un concierto en el London Palladium, entrevistas, una visita con el club de fans, declaraciones en favor de la cause de madres solteras que espero cumplan bien, otros conciertos en los alrededores de la ciudad y finalizan con uno magno por el movimiento de la revolución sexual. Además de que George Martín ya quiere que saquen otro disco, por lo cual deben escribir mucho y componer. O, y algunas marcas ya me están pidiendo que modelen algunos conjuntos poco conservadores que serán tendencia. Así que más les vale cargar la pila para todo lo que se viene.

—Que bueno que pudiste escapar de tu casa y para acompañarme a elegir algunas cosas de la boda —comentó Jane a Paul mientras caminaban por el pasillo de una tienda de flores

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—Que bueno que pudiste escapar de tu casa y para acompañarme a elegir algunas cosas de la boda —comentó Jane a Paul mientras caminaban por el pasillo de una tienda de flores.

     —Fue un poco costoso pero nada iba a impedir que viniese aquí contigo, Jane —suspiro Paul.

     En eso tenía razón. Había tenido que rogarle a Brian para que le dejase salir de la casa; tuvo que deslizarse por la parte trasera con una peluca roja y un par de lentes oscuros, pero el disfraz no le duró mucho cuando una chica la reconoció y gritó su nombre. Al final Paul se aventó con prisa al vehículo.

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