Capítulo 21

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Los siguientes días pasaban con normalidad mi herida ya estaba cicatrizada, pero lo que había cambiado era la manera de hablarme de Liam cada día que se me acercaba no faltaban esas dos palabras incomodas «me gustas», ahora estaba más convencida de que estaba bromeando el ¿por qué?, aún lo desconozco por la simple razón de que no me atrevo a preguntarle pero sin duda mi respuesta siempre ha sido «tu no me gustas», tal vez sea mentira pero prefiero no caer en su juego, quien sabe a cuantas más les ha dicho eso y quizá esa sea la razón del por qué muchas estén enamoradas de él.

La última clase del viernes durante la clase de inglés la profesora nos juntó en grupos de cuatro para realizar una historia utilizando correctamente los tiempos al terminar de nombrar cada grupo el mío quedó formado por Alexa, Liam, Zoe y yo, afortunadamente el hecho de que Alexa este conmigo me tranquiliza.

Enseguida nos reunimos, Zoe y Liam ya habían juntado las mesas al final del salón así que Alexa y yo fuimos hasta allá.

—Ven Mar, aquí hay un asiento —Liam no duda en llamarme rápidamente y me indica el puesto a lado de él. Alexa continuaba arreglando sus cosas y estaba tardando; cabe mencionar que es algo desordenada así que no me quedo de otra más que aceptar con tal de que mis compañeros no me queden observando al estar de pie en el centro sin saber qué hacer.

Al tomar asiento saludo a Liam y Zoe que está sentada al frente de él.

—No te parece tanta casualidad que siempre nos toque juntos —Liam menciona con una gran sonrisa de satisfacción.

—Tal vez sea porque nuestros apellidos están seguidos en la lista —explico ingenuamente con una media sonrisa.

—De todas maneras me agrada estar contigo —baja su mirada y abre su cuaderno de notas, Alexa finalmente llega y se centra en su cuaderno sin regresar a verme.

—Mar... me gustas, acéptame —lo dijo en frente de mi amiga y de Zoe sin embargo en mi mente estaba claro su juego.

—Estás loco, ya sabes la respuesta—lo rechazo en broma.

—Así que me vas a dejar en la friendzone.

—En la... ¿qué? —Nunca antes había escuchado esa palabra sabía que era una frase en inglés que significa zona amigo o algo parecido pero no entendía de que podía tratarse. Liam ya no me respondió así que alzo a ver a Zoe en busca de una respuesta pero ella me mira con asombro y gran impresión lo que hace que me confunda más, pero me extrañaba que Alexa ni siquiera le había dado importancia.

Liam tomo una actitud seria al igual que Alexa, Zoe estaba relajada y yo confundida aun así continuamos con el trabajo, lo terminamos rápidamente porque todos en el grupo sabíamos bien inglés. Al sonar el timbre de salida Liam se levanta y se despide de todos y se marcha seguidamente Zoe hace lo mismo.

Alexa y yo tomamos nuestro tiempo para recoger nuestras maletas, mientras caminábamos no pude guardar mi curiosidad.

—Alexa... —vacilo en continuar.

— ¿Qué pasa Mar?—por un momento pensé que estaba algo molesta, pero al escuchar su tono de voz natural me atrevo a preguntar.

—Escuchaste a Liam. ¿Qué es la friendzone? —cuestiono sinceramente.

Alexa se detiene y voltea a verme. —Mar, ¿enserio no te das cuenta?—me mira incrédula.

— ¿De qué?

—Nos vemos pequeña ingenua —, Alexa me deja con la mayor duda existencial y se marcha.

Al llegar a casa de inmediato corro a mi habitación y prendo el portátil en el buscador inserto la palabra friendzone, abro la primera página y todo está claro.

Se trata de una situación de amistad en la que una de las personas empezó a enamorarse de su amiga o viceversa y tristemente no es correspondido.

No podía creer que Liam me haya dicho eso, y lo peor es que jamás podre saber el porqué, mis inseguridades no me permiten creer en sus palabras ciertamente siento que son sueños cada vez que me ha dicho que le gusto e incluso pienso que nunca paso.

Dicen que cuando no sientes algo es fácil decirlo como: un me gustas, un te quiero incluso un te amo. Al final son palabras vacías sucede que la primera vez que lo dices sintiéndolo resulta ser tan difícil, pero después cada vez que lo dices lo sientes sinceramente y el cosquilleo en tu pecho nunca falta. Esa es la razón por la que no puedo creer en sus palabras, por la facilidad con la que dice un «me gustas»

Tú, mi ansiedad©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora