Capítulo 22

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Pensé que las cosas con Liam continuarían igual pero no fue así, han pasado tres días desde que me dejo de hablar, me duele su ausencia y sus charlas sin sentido, nuevamente vuelvo a mi vida silenciosa y tranquila.

Es exactamente las seis y media de la mañana llego al salón de clases y en esta ocasión traje mis audífonos ya que ayer termine de leer mi libro en el que tristemente los protagonistas no terminan juntos pero quien sabe si en los siguientes libros haya un giro inesperado.

Me coloco los auriculares y le pongo play al reproductor de música a la vez que recuesto mi rostro sobre la mesa, enseguida escucho el cover de Dime quien ama de verdad de Beret por Karen Méndez, otra de mis canciones favoritas que habla sobre la lucha interna que tenemos cuando llegamos a amar a alguien a pesar de que estamos rotos por dentro además de lo triste cuando en ocasiones olvidamos amarnos a nosotros mismos.

En segundos entra una llamada de Alexa que corta la canción, respondo inmediatamente y escucho su voz débil:

—Mar, me encuentro muy enferma no voy a poder ir lo siento —escucho su voz ronca.

—No te preocupes Alex, tienes que recuperarte okey.

—Sí, sabes que soy fuerte

—Por supuesto, en la tarde voy a verte y descansa —intento darle fuerza, es rara vez que Alexa se enferma.

—Gracias Mar, nos vemos. —Cuelga, y continúo escuchando música y agradezco haber traído mis audífonos para no sentirme tan sola.

El salón de clases se empieza a llenar a pocos minutos de iniciar la clase, alzo a mirar el umbral de la puerta esperando que llegue la maestra de literatura pero en su lugar me encuentro con Liam con quien cruzo miradas, sin embargo el desvía rápidamente la suya y con un semblante serio continua caminando hasta su asiento al final del salón, siento una presión en el pecho por que el realmente se había vuelto alguien especial, alguien que pensé que jamás dejaría de hablarme.

Al llegar la maestra dice que debemos tomar nota de todo lo que anote en la pizarra sobre el tema de las figuras literarias, que para el mejor entendimiento realizo un mapa conceptual con definiciones y ejemplos.

Enseguida saco mi cuaderno de apuntes e inesperadamente escucho su voz.

— ¿Puedo sentarme? —al regresar mirar Liam estaba enfrente del asiento vacío de Alexa pidiendo mi aprobación, simplemente agito mi cabeza. —Desde atrás no se ve bien —justifica.

—Está bien —avanzo a susurrar, es extraño tenerlo tan cerca nuevamente.

— ¿Qué le paso a tu amiga? —inquiere curioso. Alexa nunca falta puede que llegue con un minuto para iniciar la clase pero siempre llega, en esta ocasión ya habían transcurrido veinte minutos.

—Está enferma... no vendrá hoy—digo con tristeza ante su ausencia.

—Lo lamento, espero que se mejore —dice mientras abre su cuaderno para tomar nota de todo lo que está escribiendo la profesora.

—Sí, yo también—esbozo una ligera sonrisa y continuo escribiendo.

Presto total atención en lo que menciona la maestra sobre cada figura literaria, al terminar continuo tomando nota y Liam interrumpe.

—Mar...—extrañaba tanto que dijera mi nombre.

—Si...

— ¿Puedo hablar contigo, durante el receso? —musita apenas. Mi asombro no me permite contestarle pero asiento con mi cabeza y él sonríe levemente.

No tenía idea de lo que podíamos hablar, bueno tal vez si pero es difícil. Aunque siempre dicen que si se te presenta una oportunidad de arreglar las cosas con alguien que es importante para ti debes arriesgarte y al menos intentarlo. Y él es valioso para mí así que tomare el riesgo.

Ya no quiero perder a más personas, no quiero perderlo a él.

Tú, mi ansiedad©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora