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Sus largas piernas se movían constantemente, se encontraba inclinada sobre la mesa, miraba a Bucky como si fuese un trozo de carne, jugoso y delicioso.
- Vas a quebrar la botella. - Murmuró Natasha en tu oído.
Desviaste la mirada hacia tu mano y soltaste la botella de soda, tus nudillos se encontraban blancos y la palma de tu mano se tornó rojiza debido a la presión.
- Es una... Perra. - Apretaste la mandíbula con fuerza y volviste a mirarlos.
Establecían una conversación normal, sólo que sabías que la intenciones de esa mujer con Bucky no eran precisamente ir a comer un helado.
- Sí Barnes ya te dejó claro que te quiere a ti... ¿Por qué desconfías? - Natasha se plantó frente a ti obstruyendo tu visibilidad hacia James y la zorra.
- ¡Confío en él, en serio! - Natasha alzó una ceja y bufó con diversión.- Sólo que... No confío en ella. ¡Mírala, se lo está comiendo con los ojos! - Gruñiste con molestia y golpeaste levemente la mesa con el puño.
- Sólo relájate, nena. - Dijo Natasha antes de irse con Clint.
Bucky te miró y esbozó una sonrisa, de esas que te alegran hasta el alma. Lo miraste con seriedad y desviaste la mirada. Él frunció el ceño, se disculpó con la mujer y caminó hasta ti.
- Hey... - Se colocó detrás de ti y te rodeó con sus brazos.
- Hola. - Dices cortante.
- Encanto, ya le dejé claro que te amo... - Repartió varios besos en tu cuello haciendo que inconscientemente cerraras los ojos.
- No confío en ella. - Ladeaste la cabeza dándole más acceso a sus besos.
- Sólo tú puedes besarme, tocarme... Hacer lo que quieras conmigo. - Murmuró en oído causando un escalofrío en toda tu anatomía. Observaste a lo lejos a Visión con el Doctor Banner.
- Vamos a la habitación. - Te giraste para tomar su mano y llevarlo a rastras.
Al entrar en la habitación, Bucky cerró la puerta y te acorraló en ésta.
- Eres mío, sólo mío. Y quiero que esa zorra lo sepa. - Dices en un gruñido y besas sus labios.
Quitas su camisa y diriges tus labios hacia su pecho, besando y mordiendo suavemente su piel. Un ligero jadeo salió de sus labios, haciéndote sonreír con malicia.
Colocas ambas manos en su pecho, haciéndolo retroceder hacia la cama. Lo tumbas en esta, y te subes encima de él.
Te sientas encima de su miembro y quitas tu camisa dejando ver tu brasier, el cual quitaste dejando tus pechos al aire. Volviste a sonreír al mirar la cara de Bucky mirando tu cuerpo, como si fuese la primera vez que lo hace.
Bucky llevó ambas manos a tus senos, masajeandolos con suavidad.
- Buck. - Gemiste inclinando la cabeza hacia atrás y haciendo fricción sobre su miembro.
- Mierda. - Soltó un jadeo elevando la cadera.
Desabrochaste su pantalón y lo bajaste, su erección rápidamente llegó a tu vista. Acto seguido, subiste tu falda hasta tu cintura.
- ¿Harías los honores, cariño? - Dices con voz cargada de excitación.
- Será un placer. - sonrió y con su mano de metal, rompió la tela de tus bragas, luego las lanzó hacia un rincón de la habitación.
Te comodaste encima de su miembro y comenzaste a introducirlo en ti muy lentamente.
- Dios... - Cerraste los ojos jadeando.
Bucky soltó un gemido y colocó ambas manos en tu cadera, mirándote con placer.
+++
Sus caras reflejaban agotamiento luego de una tarde muy agitada.
- Dentro de unos días es nuestro aniversario... - Canturreaste mirándolo con una sonrisa mientras caminaban hasta la sala de juntas.
- Y te tengo preparado una sorpresa muy especial. - Te miró con picardía lanzandote un guiño.
Mordiste tu labio inferior mirándolo de la misma manera.
Tu sonrisa se borró al observar a la estúpida zorra parada en la puerta, esperando a quien sabe quien.
Bucky observó tu expresión, estuvo apunto de preguntar qué había pasado pero calló al ver que observabas a la mujer.
- ¡Bucky! - Dijo la mujer sonriendo.
- Se llama James. - Interveniste con rabia. Bucky rodeó tu espalda baja con su brazo y te apretó un poco hacia su cuerpo, esa señal significaba que Bucky no quería problemas.
- Oh... - La mujer hizo un puchero.- Lo siento, señorita Mason.
- Señora Barnes para ti. - Bucky intervino empujandote hacia dentro de la sala. Dentro de la sala a penas estaban Steve y Visión.
- Eso fue... Irrespetuoso. -Dijo Bucky en tono de regaño.
Bufaste, te cruzaste de brazos con molestia. Bucky se acercó a ti y susurró algo en tu oreja.
- Te ves muy sexy cuando te pones celosa. - Elevaste la mirada para protestar pero sus labios chocaron contra los tuyos.
- Eres un imbécil. - Rodaste los ojos caminando hasta una silla para sentarte.
- Así no me decías hace unas horas. - Dijo susurrando nuevamente en tu oído, y mordió levemente tu oreja.
