BUCKY BARNES-ONE SHOTS. |EN EDICIÓN|

41. |𝑩𝒖𝒄𝒌𝒚 𝑩𝒂𝒓𝒏𝒆𝒔|

—Me lo dejó muy claro aquella noche, Sam. —Tomas tu trago de un solo golpe y le haces una seña al barman para que preparara otro.— No siente lo mismo por mi, Steve sigue amando a Peggy. 

—Puedes hacerlo cambiar de parecer... — suspiras y niegas con la cabeza.

— Sí, claro. — dices con ironía.

— Muñeca. 

Te giras y observas a Bucky, lucía muy bien.

— Viniste. — sonríes.—  ¿A donde vas, a un funeral? — Bromeas al ver su ropa oscura

—Esto me gusta. —se encoge de hombros.

— Eso es lo importante. — le guiñas un ojo y agarras el shot para llevarlo a tus labios y beberlo.

— ¿Cuanto has bebido? - pregunta Bucky.

— Lo suficiente. - Steve hace acto de presencia y te mira con seriedad.

Resoplas con fastidio y ruedas los ojos. 

— Ve a tu habitación, _______. — Ordena Steve cruzando sus brazos sobre su pecho.

— ¿Disculpa? No estamos en horario de trabajo, no tengo porque obedecerle, capitán. —Dejas el pequeño vaso de vidrio con fuerza en la barra.— Con permiso. — Miras con seriedad a Steve y caminas fuera de la sala hasta el baño.

Te miras en el espejo y sus ojos se humedecen, Natasha te había advertido que no debías enamorarte de alguien como Rogers, que aún seguía sin superar su pasado. Coges una servilleta y secas tus lágrimas antes de salir. 

Abres la puerta y sales del baño, encontrándote con Bucky apoyado de la pared.

—¿Estás bien? — Cuestiona acercándose un poco a ti.

—Sí, gracias... —sonríes leve y el asiente apretando sus labios.

—¿Volvemos? — dice haciendo un movimiento con su cabeza

— No... Creo que me iré a mi habitación. Espero disfrutes la fiesta, Buck. —  te giras y te dispones a irte.

—¿Disfrutarla sin ti? — responde y detienes el paso aún dandole la espalda.—Vine por ti, ______.

Te giras lentamente y lo observas por unos segundos.

— ¿Qué te parece si seguimos la fiesta en mi habitación? — Preguntas con una sonrisa traviesa.

Bucky sonrió de lado y miró hacia atrás observando hacia la fiesta.

— Tal parece que nadie nos extraña, vámonos de aquí. — Bucky tomó tu muñeca y tiró de ti.

Ambos corrían como niños pequeños por el complejo, mientras reían. Te detuviste en medio camino para quitarte los tacones.

— Están... Matandome. — dices sacándolos con fastidio y tirandolos en alguna parte.

— Ya comenzaba a preguntarme cómo rayos corrías con esas cosas. — dice Bucky señalando los zapatos tirados en una esquina.

Sin embargo, al mirar los tacones, la visión de Bucky captó la gran piscina que yacía detrás de la ventana.

— ¿Estás pensando lo mismo que yo? — preguntas en su oído y notaste como se estremeció levemente.

Pasaste por su lado y abriste la puerta corrediza de cristal, el aire frío golpeó en tu rostro y respiraste profundamente.

— ¿Entrarás así? — Bucky señala tu vestido y tú bajas la mirada para mirarlo de igual manera.

— ¿Qué tiene de malo? — dices bromeando y comienzas a caminar hacia atrás mientras Bucky te miraba atento.