Dared...

5.5K 241 34
                                    

Yo les digo que no tengan miedo xd
Ósea,luego de pasar un poco de vergüenza por escribir las otras historias (La de Jonathan bb y la de Jotaro) se me hacia que iba muy lento y quería llegar al final así que no se asusten si subo los que faltan seguidos. Se me vino tremenda inspiración xd

Advertencia=+18. Fantasía.

Personajes=Joseph bb manita loca(???

J*P*N= Sólo es un pequeño,como decirlo,corte de un día para el otro o de horas después :3

♧♧♧♧♧♧♧♧♧♧♧♧♧♧♧

- ¡Joseph!. - Grité mientras corría detrás de él. - ¡Devuelveme mi sombrero de bruja!.

Joseph. Joseph. Suspire al poder alcanzarlo y sacarle mi sombrero. Él sabía perfectamente que odiaba que me sacarán mis cosas pero,alguna razón,lo seguía haciendo.
No podía decir que había madurado,aunque lo dije una vez,pero había cambiado completamente de cuando era un pequeño cachorro. Mi Joseph paso de un adorable perrito que cuidaba con su vida a sus dos hermanos a ser el mimado de la familia.

Todos siempre le daban algo y,aunque dijera gracias,los regalos los olía como si tuvieran una bomba pero al pasar los años dejó de ser un adulto en el cuerpo de un niño y paso a ser un niño en el cuerpo de un adulto. Sentí como alguien besaba mis mejillas.

- Joseph. ¿Puedes parar...? - Iba a seguir hablando pero sus ojos me pedían mucho amor. - Okay. ¿Quieres jugar?.

- ¡Claro que si!. - Se veía muy emocionado.

Si era mi pequeño niño.

J*P*N

- ¡Esto no es divertido!. - Gritaba Joseph mientras me veía sentada detrás del mostrador de la tienda.

Si,había llevado a Joseph a trabajar conmigo mientras los demás no estaban en casa. ¿Por que?. La última vez que lo dejé sólo... Se encontraba en el sillón con millones de cajas de pizza en la sala y "algunos" amigos borrachos haciendo sus necesidades en mi hermosa caldera.

No podía matarlo por que ese día me habia hecho los ojos de cachorro.
Sentí su mano en mi sombrero y lo miré.

- ¿Ya terminaste?. - Pregunté mientras dejaba la caja con el dinero del día debajo del mostrador.

- Así es. - Respondió mientras bostezaba. - ¿Puedo descansar?.

- Claro que si. Hiciste un buen trabajo. - Acaricie su cabeza mientras el sonreía embobado.

Una manta había en el suelo detrás de mi. Ahí siempre iban todos cuando eran pequeños,no podía dejarlos en casa y nadie podía cuidarlos así que los traía al trabajo. La tarde era tranquila ese día.

Joseph se concentraba en leer algunas pociones que tenía ahí pero,de nuevo,un aroma familiar vino a mi nariz. Me sentí irritada aunque sólo era un poco,no sabía muy bien que cara ponía pero era seguro que era de pocos amigos por que el cliente que entró se asustó de inmediato.

- H-Hola... - Hablo la chica que había entrado. Se veía cerca de la edad de mis pequeños.

- Bienvenida,señorita. - Trate de borrar cada rastro de molestia de mi rostro y sonreí lo más que podía. Me pare de mi asiento para atenderla mejor. - ¿Qué se le ofrece hoy?.

Todo iba bien hasta que...

- ¿P-Podría repetir eso?. - La chica me miraba un poco extrañada,yo sólo trataba de no matar a Joseph.

- C-Claro. - Respondió ella volviendo a darme las indicaciones.

¿Qué pasaba?. Joseph se encontraba en mi entrepierna,lamiendo como si fuera un hámster mi parte íntima,trataba de no gemir ni de asustar a la chica. Parecía que ella no se iba por que cada poción que pedía parecía ser más complicada que la otra,tome una libreta cercana mientras trataba de no perder el equilibrio y una idea pasó por mi cabeza.

- ¿Puedes esperarme un segundo?. - Pregunté a la chica y ella asintió.

Con mucho cariño,tome el rostro de Joseph y lo acomode mientras él miraba curioso lo que hacia cuando pude poner su cabeza bien,me sente sobre la misma. Sonreí victoriosa pero,como si fuera una máquina,él no dejó de lamer haciendo que mi victoria sólo sea una estúpida idea.

- P-Puede seguir. - Le hable a la chica que sólo me miraba pero siguió hablando.

Seguía haciendo ruidos extraños que aquella chica no podía evitar,ella me miraba preocupada.

- ¿Se encuentra bien?. - Me preguntó preocupada.

- E-Estoy bien. - Sonreí tratando de que ella se sienta bien pero no resultó. - ¿Ne-Necesita a-a-al-go m-más?.

- No. Eso es todo. - Sonreí triunfante y me paré para mostrarle cuanto era todo y hacerla firmar pero sentí un par de dedos entrar en mi vagina.

- G-Gracias por su compra. - Finalice una vez que ella firmó y se marchó de la tienda.

Una vez que se fue,Joseph salió debajo de mi y me sonrió,una vez que se fue de ahí abajo,toque mis partes para ver lo mojada que estaba.

- ¡Joseph!. - Estaba realmente enojada pero un beso de él en mis labios sólo logró que me calmara un poco.

- Por favor... - Su voz se escucho dulce como si fuera un dulce de leche.

No pude aguantar y lo volví a besar,íbamos a iniciar pero un cliente más vino así que me acerqué a atenderlo aunque sabía que Joseph no aguantaría mucho. El cliente se acercó a mi mostrador para poder decirme lo que necesitaba pero algo más llamó mi atención.

No se podía ver nada detrás del mostrador pero Joseph tenía su mano en mi trasero,lo acariciaba haciendo difícil concentrarme en lo que hacia y llevando me,una vez más,la mirada de preocupación de un cliente. Sonreí tratando de aliviarlo pero los juguetones dedos de Joseph no estaban quietos,mi trasero era acariciado y rozado por los mismos hasta que metió uno de ellos.

Afortunadamente,el cliente salió luego de firmar y caí sobre el escritorio por las acciones del más alto. No había ningún cliente y los demás negocios empezaban a cerrar,yo sólo me encontraba gimiendo en los brazos de Joseph quien me sostenía de la cintura haciendo lo parado junto a él.

- M-Mamá... - Él idiota gruñía mientras sus embestidas eran más rápidas.

- N-No me llames así... - Estaba cansada y enojada. Era una sensación muy extraña. No sabía si odiarlo o amarlo.

- V-Voy a venirme... - Al terminar de decir eso,mordió mi hombro haciendo que me viniera antes que él.

Joseph sólo dio tres embestidas más y se vino dentro de mi.
Vi como suspiraba tranquilo,parecía que había echado todo el polvo que tenía guardado.

- ¡Joseph!. - Lo mire enojada recordando todo lo que había hecho antes,mis mejillas se ruborizaron. - ¡Estas castigado!.

- ¡¿Qué?!. - Me veía sorprendido. - Lo siguiente que dirás será...

- ¡Aunque lo hayamos hecho,no quiere decir que no me avergonzaste enfrente de los clientes!. - Gritamos los dos al unísono.

Estuvo conmigo en la tienda,atendiendo clientes o limpiando por todo un mes. Ese era su castigo.

^^Fin^^

Estaba pensando que tal vez tenían algunas curiosidades sobre estos one-shot que ya no son one-shot (???
Así que no tengan miedo de preguntar,tal vez,algunas de ellas serán respondidas en los próximos. Hablando de estos pequeños últimos :3

Espero que lo hayan disfrutado y nos vemos♡

Jojo's Love Where stories live. Discover now