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𝙻𝚞𝚗𝚎𝚜 17 𝚍𝚎 𝚏𝚎𝚋𝚛𝚎𝚛𝚘 𝚍𝚎𝚕 2020

𝒞ℯ𝓁𝒾𝓃𝒶

- Mati ¿Podés pedir un taxi?- Pregunta Ignacio al ver a Eva dormida y acurrucada en el sillón.

¿Que hago? ¿Le digo que los llevo?

Levanto mí vista en busca de respuestas para esas preguntas y tengo la vista de Carolina posada en mí y con una ceja levantada. Entendí todo, le tengo que decir que yo los llevo.

- No, dejá, yo los llevo- Le digo y Matías deja el teléfono y me mira sorprendido.

- ¿Segura?- Me pregunta y yo asiento.

- Si, avisame cuando querés que vayamos- Le digo y él asiente.

- ¿Puede ser ahora?- Me pregunta y yo asiento- Mañana Evi tiene clases y le cuesta un huevo y la mitad del otro levantarse, me gustaría que duerma bien- Ay se preocupa por la hija, ¿Dónde firmo el concubinato?

- Vamos- Le digo y agarro mi mochila, las llaves de mí casa, del auto, mi teléfono, mi billetera y la bolsa reutilizable en la que traje las cervezas.

Ignacio alzó a upa a su hija y yo agarré el abrigo y la mochila que la nena había traído.

- Nos vemos carita de verguita- Me dice Matías y escucho la risa de Ignacio atrás mío.

- Chau putito- Le digo y abrazo a mí amiga.

Llegamos a la calle y le saco la alarma y le abro la puerta para que, en el asiento de atrás, acueste a Evi. Antes de subirme al auto, chequeo los mensajes en mí teléfono.

"Ay dios son una familia! q orgullosa q estoy del plan d Matías y mío! somos unos cupidos<3"

Este mensaje puede haber tenido un solo emisor, Carolina.

Me río y me saco una foto rápida haciendo fuck you y sin importar cómo salgo, se la mando.

›››

- Gracias- Me dice Ignacio antes de bajarse y buscar a su hija atrás.

Luego de un par de bastantes minutos y una charla bastante amena con el jugador de River, llegamos.

- No te preocupes- Le digo y el sonríe.

- Te invitaría a que pases a tomar algo- Mí corazón se detiene- Pero es muy tarde y mañana vos también tenés que ir a la escuela- Y si lo escuchara otra persona, pensaría que es un depravado por la edad.

- Sí, está bien, no te preocupes- Le digo por segunda vez- Otro día capaz acepto- Le digo sin ser concientes en lo que acabo se decirle. Las tres latas de cerveza que tomé, capaz están empezando a hacer efecto. Igual lo dudo, tengo un aguante bastante bueno.

- Cuando quieras Celi- Me dice- Por cierto- Acota antes de abrir la puerta- Sos la primer persona que conozco con ese nombre y la primera vez que lo escucho; y me encanta- Dice y siento mis mejillas arder. Se baja del auto y abre la puerta de atrás para agarrar las pertenencias de su hija y a su hija. Y yo sigo en estado de shock- Nos vemos linda, gracias nuevamente- ¿QUE ACABA DE DECIR?

Reina ; Nacho ScoccoWhere stories live. Discover now