Reina ; Nacho Scocco

17.

𝙹𝚞𝚎𝚟𝚎𝚜 19 𝚍𝚎 𝙼𝚊𝚛𝚣𝚘 𝚍𝚎𝚕 2020

𝒞ℯ𝓁𝒾𝓃𝒶.

Nacho y Eva me dijeron que pase la noche en su casa, y que, mañana, temprano, me vaya a mí casa. Me sentía bastante mal y bastante irresponsable en estar en una casa que no es la mía, pero bueno, me agarró desprevenida.

Terminé aceptando, es que otra no me quedaba, si o si me iba a tener que quedar con ellos.

Ocho de la noche y con Nacho seguíamos tomando mates y comiendo tostadas con manteca y dulce de leche, esto era el paraíso.

- ¿Y vos seño nos vas a mandar tarea?- Me pregunta y yo alzo una ceja.

- Ya te dije que fuera de la escuela dejo de ser Seño- Le digo y ella asiente- Y... Si, seguramente sí- Le digo y ella niega.

- No, no, no, no- Me dice- Porfavor- Y pone sus manos en señal de súplica. yo simplemente me reía.

- Si ma directora lo pide yo lo tengo que hacer Evi- Le digo.

- Bueno, pero que no sea mucha- Me dice.

- No va a ser mucha, si vos traes Harry Potter y la Piedra Filosofal y nos lees a tu papá y a mí- Le digo y Nacho simplemente miraba como ella y yo hablábamos.

- Trato echo- Me dice y estrechamos las manos- Pero con una condición- Dice y yo hago una seña para que siga hablando- Leemos los tres, una hoja cada uno- Propone y Nacho y yo asentimos.

Ella empieza, lee dos o tres renglones, en aproximadamente diez minutos ya que se traba o hasta que en su mente juntaba las sílabas.

- Me aburrí de leer- Dice bajando el libro al no poder pronunciar "Dumbledore".

Nacho y yo reímos.

- Dámelo y yo leo- Dice Nacho. Ambas miramos embobadas al hombre leer. La voz, los ojos, como se le movía la boca y como pronunciaba algunas palabras. Por lo menos yo estaba extasiada.

Sin darnos cuenta, Nacho había leído unas diez páginas. Y Eva se había dormido sin cenar, nuestra idea era cenar tarde ya que mañana no había nada para hacer, y yo me iba a ir temprano tipo once

Ignacio deja el libro en la mesa y agarra a Eva a upa y se la lleva a su habitación.

Yo voy a la cocina de él, con su previo permiso, y empiezo a agarrar diferentes cosas de la alacena y heladera para ver que podemos cocinar.

Por suerte a el le llueven los canjes y, como me contaba una vez, pinto canje con unos que les dan verdura a los famosos y cada miércoles le traen dos cajones con verduras varias y dos con frutas varias. Yo también quiero ser así de famoso para que me den cosas así.

- ¿Con qué me vas a deleitar?- Pregunta él, sin jean, con jogging y una casaca de River. Ok, creo que no me voy a contener mucho. Dejé de verlo, para hacerme la que miraba todo lo que tenía ahí a disposición mía para cocinar. Que hijo de puta que sos.

- Había pensando en una tarta de verduras con todas esas que tenés ahí- Digo señalando la esquina con el coso para las verduras- Porque por más de que no jueguen y eso te tenés que cuidar igual y no comer boludeces.