Reina ; Nacho Scocco

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𝙼𝚊𝚛𝚝𝚎𝚜 2 𝚍𝚎 𝚓𝚞𝚗𝚒𝚘 𝚍𝚎𝚕 2020

𝒞ℯ𝓁𝒾𝓃𝒶

Fue difícil retomar la costumbre de levantarse temprano nuevamente a dar clases, además de que todos medio que ya nos habíamos acostumbrado a esa modalidad, y, para mí, era muchísimo más cómoda. El domingo a la tardecita, recordaba que me ponía a preparar las tareas que tenían que ser enviadas en el transcurso de la semana. Lo que más me gustaba es que no tenía que salir de mí casa, golazo de media cancha y a los 45 del segundo tiempo.

Hablando de segundo tiempo y de partido, hoy juega River. Después de no se cuanto tiempo, me volvía a encontrar con el amor de mí vida. Ustedes no saben lo mucho que extrañé el futbol en general en esos meses de cuarentena.

Hay veces en las que pienso lo retorcida que es la vida y me aseguro cada vez más, que el destino existe y que es maravilloso. El amigo de Montiel, no puedo creer que sea amigo de él, que justo con un amigo de un amigo mío, peguemos re buena onda y desde el sábado que nos escribimos todos los días, salvo cuando trabajamos. Bueno, el punto que al partido de hoy, también va Ángelo..

Mientras esperaba a que mis alumnos copien lo que estaba escrito en el pizarrón, yo tomaba un café, que muy amablemente me había traido una portera. Después de la "Pelea" con Nacho, lo bloqueé de todas las redes existentes, realmente me dolia y me daba por el quinto forro de las pelotas ver a él y a su pareja ser completamente felices.

El domingo, después de la salida del sábado y viernes, Carolina se quedó a dormir ya que los chicos entrenaban a la tarde y las otras dos, además de personas, son madres, y tienen que cuidar de sus criaturas. Ok, el punto fue que en un momento del día, cuando de a poco se pasaba el pedo que teníamos, empezamos a hacer catarsis, de todo lo que nos pasaba en el momento. Por suerte a ella le esta yendo bastante bien, tiene el trabajo que siempre soñó, está enamoradísima de Matías y él, se ve que también. 

Yo, en cambio, me estoy olvidando de mí ex algo, para seguir sola, no puedo estar con alguien al que yo, le soy doce años mayor, me parece una barbaridad. Capaz, le aclare a Angelo, que lo nuestro no va a pasar a más de un par de besos y listo, no me siento preparada para estar con alguien y encima doce años menor que yo. No, inaceptable. 

- Seño, seño, seño- Escuchaba una voz muy a lo lejos llamarme, salgo de mi trance y le presto atención al dueño o dueña de la voz. Era un alumno llamado Jeremías. 

- ¿Qué pasó amor?- Le pregunto.

- Quería saber si está bien- Dice pasandome su cuaderno con las sumas y restas planteadas en el pizarrón.

Miro sus sumas y estaban todas bien, una vez que terminé de corregirle a él, viene Eva, con su cuadernito y su lapiz negro. 

- El día de tu cumpleños la pasé muy bien seño- Me dice mientras yo le ponia un excelente con un corazón como a todos.

- Que bueno gordita.

- Ya que vos me invitaste a tu casa, un día te voy a invitar a la mía, te diría a la de papá, pero papá volvió con mamá y ahora vive con nosotras- Dice entusiasmada. Y si, que mejor que para un infante de seis, siete años, tus papa esten juntos.

- Me alegro por tus papas, bonita- Por suerte ella no sabe cachar el sarcasmo- Muy bien tu tarea. 

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- Les comento a los padres de segundo, que mañana hay reunión de padres para entregar boletines y voy a hablar personalmente con cada padre, madre, o familia, para comentarles el proceso de sus hijo o hija. Si ustedes no vienen mañana no les voy a poder dar los boletines hasta que no sellemos otra fecha- Aviso mirando a las familias, entre ellas, el innombrable- Horario y demás está en el cuaderno.