Capitulo 3

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Amelia

¡Mierda!

¡Mierda!

Ya no me daba tiempo de ir al departamento a buscar unas bragas.

—Su real alteza Daniel, la espera.
—Si, claro.
—Acuérdese de todo lo que hemos estudiado — dijo Edith sonriéndome para tranquilizarme, asentí nerviosa.
—claro.
—vamos.

Si supiera por qué estoy nerviosa se iría para atrás, estaba pensando en alguna excusa, pero se me prendió el foco, escribí un rápido mensaje, del cual recibí respuesta rápida, problema solucionado.

Daniel me esperaba en la entrada con las personas que lo acompañaban, siempre a él lo veía más que a Chris, aunque no estaba muy contenta por lo que ha estado haciendo en los últimos meses, entendía que estaba triste por la muerte de su papá, incluso un día en el departamento nos emborrachamos y Drew tuvo que traerlo al palacio, lo único que supe es que se había ido a vivir a otra parte, Chris no me dijo nada solo que habían discutido, pero Daniel me dijo que arruinó algo del palacio, me dijo que era mejor no decirle a Chris que la fiesta fue en el departamento.

— ¿Los tienes? — dije cuando lo saludé de beso.
— Sabes que tuve que mandar a alguien a buscarlos.
Edith carraspeó y sabía a lo que se refería, hice reverencia y él puso los ojos en blanco.
— Eso no era necesario Edith — dijo de mala manera .
Edith estaba apenada y sentí lástima por ella.
— No, está bien — dije enseguida — estoy practicando contigo ¿recuerdas?
Él volvió a poner los ojos en blanco, le sonreí a Edith y ella me agradeció con la mirada.
— su real alteza — dijo George con trabajo por el esfuerzo que había hecho en correr, Daniel se acercó a él y George le entrego algo rápido, este le dijo algo, alejándose de él.
— Amelia ¿me permites un minuto?
— Claro.
Me acerque a Daniel.
— abre tu bolsa.
Hice lo que me pidió y me puso rápido uno de sus bóxeres adentro.
— Gracias.
— Parecerá que te estoy pasando droga.

Miramos a los demás que nos veían curiosos, pero Daniel los miró con cara de pocos amigos y enseguida desviaron la mirada.

— Entra a esta habitación.
— claro.

Entre y me los puse lo más rápido que pude los Calvin Klein, me quedaban bien, un poco grandes, pero ayudaba el elástico.

— Lista — dije saliendo.
— Es hora de irnos.

Cada quien se fue en diferentes autos, cuando llegamos al evento los fotógrafos ya estaban ahí y algunas personas de la construcción, Daniel iba a dar comienzo de un edificio.

— Recuerde sonreír en cualquier momento — Asentí con la cabeza — ¿Puede dar entrevistas? — Edith le pregunto a Sandra la cual negó con la cabeza — Entonces la tendrá fácil — me sonrió — volví asentir con la cabeza nerviosa.

Ya me habían explicado que voy a hacer, literal estar a un lado sin hablar y solo sonreír, Daniel salió de su auto eso quería decir que seguía yo, las cámaras empezaron hacer click.
Me dolía el rostro de tanto sonreír.

— espera que suba al estrado y ve como dormirá — Dijo Daniel en mi oído disimuladamente refiriéndose a un señor mayor de edad que se estaba durmiendo, tuve que morderme el labio para no reír por lo alto.
— Un aplauso para su real alteza Daniel.

Todos aplaudimos a Daniel, tomamos asiento de nuevo, Daniel empezó hablar, mire disimulada al señor y era verdad, apenas podía tener abiertos los ojos, Daniel y yo chocamos con la mirada y sonreímos, él tosió para disimular siguió con su pequeño discurso, volvimos aplaudir cuando terminó lo que hizo que el señor se asustara y se despertara, tenía que aguantar la risa porque Edith me regañara.

Daniel bajo del estrado y agarró la pala la hundió en la tierra y la volvió a sacar y aventó la tierra a un lado todos aplaudieron, me miró y me hizo seña para que me acercara.

¡Diablos!

Me acerqué a él que me dio la pala e hice lo mismo que él había hecho, segundos antes tenía miedo de caerme al hacer eso, ya que la tierra no era estable y las zapatillas no ayudaban, pero lo bueno que no pasó, todos volvieron aplaudir, nos tomaron fotos, antes que pudiera alejarme los periodistas se nos acercaron con cuidado, empezaron a preguntarle cosas a Daniel, mire a Sandra o Edith para qué me sacarán educadamente de ahí, cuando vi a Edith me negó con la cabeza.

— ...Amelia — al escuchar mi nombre regresé a concentrarme.
— ¿Disculpa?
— Está pensando en su rey — dijo Daniel para quitarle peso al asunto.
Los periodistas rieron porque claramente se vio que no había prestado atención.
— ¿Qué piensa de estos proyectos?
¿Qué pienso? Se supone que no debía hablar.
— Es una buena iniciativa para hacer crecer a la comunidad y el mayor beneficio es que generará empleos.
— ¿Ya tienen listo todo para la boda?
— Faltan pocos detalles.
— ¿Estás nerviosa?
— Tengo miedo a caer.
Todos rieron.
— Príncipe Daniel ¿Qué piensa de las fotografías que han salido de usted?
— su real alteza y la señorita Amelia tienen que irse — dijo George salvando a Daniel de la incómoda pregunta, nos alejamos de ellos.
— Nada mal para tu primera vez.
— estaba muriendo de nervios.
— lo hiciste bien.
— Se supone que no debía hablar.
— Vas a hacer la reina, no dejes que se te suban a la cabeza.
— Es hora de irse alteza — dijo George.
Llegamos al coche, nos despedimos formalmente porque había gente.
— Supongo que te veré después.
— Obvio.

Entre al auto y Sandra me asalto con cosas que debí de haberme quitado para no decir nada
— Eso hubiera sido muy grosero de su parte — dijo Edith enseguida — Lo hiciste bien.
— ¡Gracias Edith!

A veces no soportaba Edith cuando se ponía muy mandona, pero la mayoría de las veces me agradaba sé que es su trabajo enseñarme bien.

A veces no soportaba Edith cuando se ponía muy mandona, pero la mayoría de las veces me agradaba sé que es su trabajo enseñarme bien

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Majesty [EN CORRECCIÓN]Where stories live. Discover now