Capitulo 65

683 51 5
                                    

Amelia

- ¿pero qué pasó aquí? - dijo Daniel cuando entró junto con Drew.
- Algunos no se toman bien la honestidad.
- ¿Estas bien? - daniel se acercó a mi preocupado.
- ¿Él te hizo esto? - dijo viendo molesto las marcas de mi brazo - Lo voy a matar.
- Ya somos dos.
Los dos estaban molestos y Daniel iba a salir de la habitación, pero lo detuve.
- No, por favor - le supliqué con la mirada - los dos nos alteramos demasiado, no fue totalmente su culpa.
- Amelia, tienes marcas de sus manos en tu brazo.
- No me duelen, Dani. Por favor no hagas nada, no te metas.
Estaba molesto podía verlo.
- Pero Amelia eso... - siguió Drew.
- Prométanlo.
- No puedes hacer eso - Daniel estaba molesto.
- Prométanlo.
- Está bien - dijo resignado.
Mire a Drew esperando.
- Está bien morenita, solo que si vuelve a tocarte...
- Gracias.

No dijeron nada, solo me ayudaron a levantar las cosas destruidas que estaban por toda la habitación, había arruinado todo mi preciado maquillaje.

- Te compraré otro.
- Gracias Dani.

Ya no les tenia tanto coraje por haberme mentido, se que hicieron lo mejor para mi y suficiente los hice sufrir al irme sin decirles nada, mi teléfono empezó a sonar, vi el número y colgué.

- ¿quién era? - preguntó Drew.
- Mi mamá - mentí.

Seguimos recogiendo las cosas hasta que quedo un poco mejor, olía mucho a perfume y deje las ventanas abiertas para que saliera un poco el olor.

- Nunca pensé que una habitación oliera tanto a Chanel n5.
- Ni yo.

Cuando acabamos de limpiar se despidieron de mi dejándome sola de nuevo.

- Hola señor presidente - dije muy bajo para que nadie pudiera oírme aunque era imposible.
- Mia Regina ¿cómo estuvo? - me alegró escuchar su voz.
- ¿a que te refieres? Porque pasó de todo.
- Cuéntame.
- Mis amigos me pidieron perdón por haberme mentido.
- ¿los perdonaste?
- Si.
- ¿perdonaste a...?
- No, pero le he dicho.
- ¿qué le has dicho?
- lo qué pasó, pero no le dije con quien.
- ¿No sé si alabarte por valiente? O ¿alabarte por...?
- No quiero ser igual a él, antes cometí el mismo error con mi ex no lo haré esta vez, prometimos ser honestos sin importar la verdad.
- Pero tus intenciones no fueron 100% por eso.
Me avergoncé.
- No lo fueron, pero igual se lo dije.
- Entonces aún puedo ir a la fiesta dentro de dos días.
- Si.
- Te extraño - Hubo un microsegundo de silencio de mi parte - imaginó que suena ridículo porque no tiene ni 5 horas que te deje en el aeropuerto, pero lo hago y sé también que tengo un...
- 50% - dije bromeando.
- 50% de que me rompas el corazón.
- Tu dijiste hay que vivir el momento.
- Tienes razón.
- Siempre.
- Se te ha pegado algo mío.
- Creó si, ¿sabes qué es gracioso?
- ¿qué cosa?
- Que no te soportaba pero ahora eres el único que me a levantado.
- Soy una caja de sorpresa, mía Regina.
- Demasiadas sorpresas.
- ¿qué haces ahora?
- Estoy encerrada en el baño.
- ¿No te han mandado al calabozo?
- No aún, pero apuesto que la madre de Christopher no tarda en hacerlo.
- Tienes un punto a mi favor, mi madre ya no está, pero aún así era un amor.
- Todos dicen eso de su mamá.
- La mía si era buena.

Tardamos más de una hora hablando de cosas que a veces no tenían sentido, pero Leonardo hacía que saliera un poco de mi realidad.

- Voy a necesitar estos diseños, espero estén cuando regrese del evento.
Ella se quedó sorprendida al ver mi vestimenta, había escogido un color verde esmeralda que era pegado y de un solo hombro con una pequeña tira, no era un vestuario muy digno de una reina, tuve que maquillarme mis brazos, ya que Christopher me dejó marcado los brazos.
- Claro majestad - le entregué mi lista de maquillaje a Sandra.

Majesty [EN CORRECCIÓN]Where stories live. Discover now