Majesty [EN CORRECCIÓN]

Capitulo 28

Amelia

— ¿Cómo le vamos a hacer? — pregunto Daniel.
— No sé, déjame pensar.
No pudimos pegar un ojo en toda la noche.
— tal vez yo le puedo sugerir y tú me apoyas.
— No estaría mal — estaba pensando — o podemos decirle la verdad.
— También.
Los dos suspiramos.
— Tal vez nunca me perdone.
— No nos perdonará — corrigió Daniel.
— No quiero que Scott se salga con la suya.
— Mira Morenita ni yo, pero no quiero verte sufrir ¿Por qué crees que hice todo? Lo mejor es darle lo que quiere y que nos deje en paz.
— No sé, si le decimos la verdad tal vez no sea tanto a qué él se la diga, no me gusta mentirle y fue algo que hicimos cuando no estaba con él.
— Tenemos una semana para pensar que hacer, ahora tengo que irme.
— Debería disculparme con Trevor.
— Hazlo.
— Fui un idiota con muchos.
— Hey todos alguna vez lo hemos sido, adiós Dani. Vengo más al rato y por favor haz que limpien.
— adiós morenita.
Le di un besó en la frente y me fui de ahí.

— Veo que se alargó la noche — dijo Chris cuando nos vimos para almorzar.
— Si, lo siento no haber llegado.
— Pude haber ido por ti.
— Lo sé, pero no dejaron que me fuera.
— Me imagino.
Ahora me sentí más culpable le estaba mintiendo mucho
— ¿Qué pasa?
— es que casi no dormí.
— ¿Por qué no descansas?
— Tengo que checar lo de la fundación.
— Puedes decirle a Sandra.
— Me gusta estar pendiente.
Habíamos terminado de comer, cuando Daniel entró al comedor, me sorprendió verlo.
— ¡Daniel que sorpresa! Hasta que te veo hermano.
Chris se le acercó a saludarlo.
— ¡Hola, hermano!
— ¿No te alimentan dónde estás?
— Extraño la comida de aquí.
— Tal vez deberías regresar aquí.
— ¡Hola, Morenita!
— ¡Hola Daniel!
Le di un abrazó en saludo como si no lo hubiera visto en dos meses.
— ¿Quieres comer?
— No, estoy bien aparte ya terminaron, vengo a proponerte algo.
— Dime
Tomamos asiento
— Sé que estás buscando alguien que se encargue de algunas cosas importantes, ya que se jubila Antonio ¿Qué tal Scott?
Mire a Daniel, habíamos quedado en hablar bien las cosas antes de hacer algo.
— ¿Qué Scott?
— Morton.
Chris empezó a reír.
— ¿Estás loco?
— No es tan mala idea — dije rápido.
Chris nos miró.
— Amelia, tú odias a Scott.
— No es verdad.
— y tú dejaste de juntarte con él.
— Solo porque les cae mal a ustedes.
— Dijiste que era nefasto.
— tal vez, pero sería bueno para el trabajo.
— No pondré a Scott en un puesto como ese, es más en ningún puesto.
— Deberías pensarlo mejor hermano, tiene buenas relaciones.
— con prostitutas, dealers y otras personas de bajo mundo.
— No deberías juzgar tanto a las personas — dije, alguien tocó la puerta solicitando a Chris — todos merecemos una oportunidad ¿No crees?
Él se levantó de su asiento para irse.
— No sé qué les ha picado a los dos, pero no pondré en nada a Scott.
Me dio un beso antes de irse.
¡Mierda!
— me agarraste desprevenida — le dije calladito
— Lo siento, pero tenía que intentarlo.
— Creó que ya sabemos lo que tenemos que hacer.
— Nos queda tiempo para hacer que acepte.
— No sé, no me siento bien haciendo eso.
— Tranquila, ahora deberías arreglarte para lo de hoy
— Tu igual y por favor quítate esa barba.
— Se me ve bien, no te metas con ella.
Puse los ojos en blanco me fui de ahí dejándolo solo.

No tenía ganas de asistir a ningún evento, pero la ventaja que era aquí en el palacio, vendrá muchas personas, me puse un vestido color nude con piedras y me dejé el pelo suelto con ondas, hoy como siempre Chris apareció, bajamos juntos me sorprendió ver a Scott.

— ¿Tú lo invitaste? — le dije a Daniel entre dientes.
— No, apareció.

Ya habíamos cenado y estábamos en el gran salón, disfrutando de la música, varias parejas estaban bailando