Majesty [EN CORRECCIÓN]

Capitulo 72

Chris

- Por lo menos hoy no me has dejado plantado Charly.
- Supéralo.
Íbamos a practicar polo, ya que el otro le había cancelado y me sentía mal por eso.
- Hola morenita ¿dónde vas?
Nos encontramos a Amelia que venía de afuera, se veía muy bien con su conjunto.
- Vengó más bien.
- ¿dónde fuiste?
- Con Drew.
Puse los ojos en blanco porque sabía que no había ido con Drew.
- ¿esos lentes son nuevos?
- Si.
No podía hablar es como si mi lengua se hubiera quedado congelada, solo la observaba y pensaba como cambio todo entre nosotros.
- ¿dónde los compraste? - Daniel se puso sus lentes - También se los he visto a Leonardo de hecho le iba a preguntar.
¡Lo sabía! Ella me miró rápido.
- Son Christian ¿no ves? - le quitó los lentes - Son míos, ¿desde cuándo estas de preguntón Daniel?
- ¿A ti desde cuándo te enoja que te pregunte?
- No me molesta, tengo cosas que hacer, adiós.
Tenía ganas de encerrarla y no saliera hasta que cambie de parecer, pero sabía que no era posible, Amelia era una de las personas que no le gustaba que le dijeran que hacer y mientras le digas lo que debe hacer, menos lo hará. Ella se despidió y se alejó.
- anda rara -  me dijo Daniel. Si él supiera - ¿aún no han arreglado nada?
- No.
Tenía ganas de contarle como estaban las cosas era mi hermano y mi confidente no tenía a nadie más aparte de Amelia a la que le podía decir mis cosas, pero sabía que eso no era posible, no quiero que Amelia quede mal enfrente de él o cambie su relación por todo lo que nos está pasando. Suspire, me sentía solo en esta agonía.
- Vamos hermano - le dije sin ganas.

- Lamentó haberme perdido tu cumpleaños
- No te preocupes Trevor.
- ¿cuándo llegaste?
- Está mañana.
- ¿Has visto a tu prometido? - Le preguntó Daniel.
- No, me prohibió ir antes, no le creí que fue a cazar.
- Si fue - le afirme.
- estaba cansando y después se iba a ver con la morenita porque se estaba probando sus trajes para la boda.
Entonces si estaba con Drew.
- ¿Bien, vamos a chismear o a practicar?
- Vamos.

***

- ¿Charles sabes lo que hizo Amelia?
Mi madre entró sin tocar a la oficina.
- No, madre.
- Ha contratado nueva seguridad y ha quitado a los que tenia.
- ¿por qué?
- No lo sé, dime tú, es tu esposa.
- Mañana hablaré con ella.
- No mañana Charles, hoy, ahora.
- Madre, tengo trabajo pendiente y...
- Charles esas no son las reglas, lo sabes, esto va de mal en peor.
Mi madre me estresaba más, así que para sacármela le pedí a Melody que le dijera a Amelia que necesitaba verla, tardo 10 minutos en llegar, tenía un vestido pegado de cuello de tortuga que hacía ver bien su cuerpo, entró sin tocar.

- ¿Para que me necesitas? -
- Buenos días Amelia - dije sarcástico.
- Lo siento, buenos días Charles, buenos días Grace.
Le sonrió a mi madre falsamente.
- ¿por qué has removido la seguridad que tenías? - apenas se sentó mi madre le preguntó.
- Porque no me sentía segura con ellos.
- ¿y has contratado a otros sin que pasaran los filtros ni nada?
- Los he entrevistado yo misma y pasaron mis filtros.
- Amelia debes entender que no se puede hacer así las cosas.
Estaba en su época de rebeldía.
- Lo sé Christopher, pero lo he hecho, me siento más segura ahora.
Me miró y vi que decía la verdad, podía entenderla.
- No pagaremos por eso - mi madre está molesta.
- ¿quiénes?
- Charles, nosotros...
- Tengo mi dinero, lo puedo hacer.
- Dinero que es de nosotros.
- también mío porque le recuerdo que soy la esposa y reina de su hijo.
- Cómo sea no sucederá.
- Usted no puede decirme que...
Debo parar esto antes que se ponga peor.
- Silencio las dos - estaba furioso son cosas insignificantes, me habían provocado dolor de cabeza, suspire cansado - Aceptare a los que has elegido y si te sientes segura está bien, no necesitas pagarlo con tu dinero, corre a mi cuenta.
Ella me sonrió, aunque Amelia no quiera admitirlo era un poco caprichosa y amaba que le cumplieran sus caprichos.
- Pero Charles... - empezó mi madre.
- madre es su seguridad.
- Gracias cariño - me dijo sonriente, ya no se si me lo dijo porque estaba mi madre o porque realmente se le salió - si ya quedó todo claro, tengo que prepararme para mi vuelo.
- ¿vuelo?
¿Vuelo? ¿A dónde iba? Yo no sabía nada ¿por qué no sabía?
- Si, iré a Ibiza.
- No me habías dicho.
Sabía a qué iba a Ibiza, la idea de encerrarla se volvía más tentadora.
- Bueno, hay muchas cosas que no nos decimos últimamente y un viaje no están grave ¿o si?
Sabe como hacerme sentir mal.
- No Amelia.
- Bien, les dejó.
- No puedes hacer lo que se te plazca Amelia - le dijo mi madre molesta por no haberse salido con la suya.
- Todos aquí lo hacen, es momento que yo también lo haga.