SI LA NEBLINA HABÍA APARECIDO, eso solo significaba que Pitch y los cuasi esqueletos estaban cerca. Ellos son como un paquete, si viene una mierda, lo demás también tiene que aparecer. Solamente esperaba que Roberta y Félix no me vinieran a buscar para ir al orfanato, porque eso sería la gota que derramó el vaso. Aunque, pensándolo bien, sería genial si Pitch se lleva a los cuidadores del infierno, así no tendría que verlos nunca más.
—Bianca, ¿qué está pasando? —León seguía a mi lado, ahora más cerca que antes, podía sentir mi brazo rozar el suyo.
Me había distraído con mis pensamientos malévolos. Roberta y Félix no importaban ahora. Los que sí importaban eran los cinco guardianes inconscientes que estaban en la sala. Si Pitch venía era su fin. Mordí mi labio mientras trataba de pensar en una solución; entonces, recordé que la espada aún seguía en mi antiguo cuarto. Debía ir por ella si queríamos tener al menos una oportunidad de salir... con vida, porque victoriosos lo dudo.
—Nada bueno —respondí. Apreté la mano de León para llamar su atención. La neblina había cubierto la sala, cocina y comedor; pero todavía era posible distinguir los objetos y personas que se encontraban aquí. El problema sería cuando esta se volviera más densa y no pudiera distinguir absolutamente nada—. No te muevas de este lugar, ¿sí? No me demoraré.
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Me rehúso a creer en Jack Frost | MRCJF #1
قصص الهواةBianca es una chica de 16 años que vive en un orfanato. Su día consiste en trabajar, trabajar y trabajar para luego llegar y tener que darle casi todos sus ingresos a la insufrible de Roberta, la dueña del orfanato. Ella no cree en ninguno de los cu...