Amor de Meteoritos [Pausada]

26. Sabor a vinagre

El corazón de Xiaoxi latió muy fuerte al escuchar a Jiang Chen detrás de ella ¿¡Por qué tenía que aparecer en ese momento!?

–Xiaoxi, ¿Quién es él? –preguntó con voz áspera. Jiang Chen sí sabía quién era. Ese peinado era inconfundible, estaba más que claro que era el tipo con el que se besó Xiaoxi en la playa.

–Él... Él... –¿Por qué no puedo responder? Se preguntó a sí misma varias veces. Doaming Si se dio cuenta de la actitud de la menor, así que adelantó sus palabras y habló por ella, mirando desafiante al muchacho con bata blanca.

–Soy Doaming Si, supongo que te ha hablado de mí antes –A-Si sonrió orgulloso de sí mismo.

–Lo siento, no –respondió el más alto –mi novia casi no habla de sus compañeros –dio algunos pasos hacia el frente y tomó a Xiaoxi por los brazos y dirigiendo su mirada hacia ella, continuó –¿Nos vamos?

Nerviosa, Xiaoxi sólo pudo asentir, sin mirar a ninguno de los muchachos.

La pareja de alejó de Doaming Si, quién los observaba sintiendo un ardor dentro de su estómago.

¿Novio? ¿Otro novio? Debe ser una broma. Seguramente su primo el doctor había enviado a aquel chico a cuidar de Xiaoxi.

Se alejó de ahí con la bolsa de regalo en sus manos. La próxima vez se encargaría de que sólo estuvieran ella y él. Sin metiches.

Mientras tanto, en los jardines de Mingde, Jiang Chen seguía sin soltar a Xiaoxi. La pobre a penas podía llevar el mismo ritmo que él. Era la mitad de pequeña y sus pasos eran las lentos.

–¡Jiang Chen! –gritó safándose del brazo del alto. Éste se detuvo en seco y la miró –¿A dónde me llevas?

–Lejos, a dónde sea –intentó tomarla de nuevo, aunque esta vez de la mano, pero Xiaoxi se volvió a soltar.

–¿A qué te referiste con eso de "mí novia"?

–¿Qué no lo eres?

–No. No soy tu novia.

El rostro de Jiang Chen se relajó y comprendió que aquella niña frente a él había cambiado y probablemente se equivocó al pensar que Xiaoxi y él serían algo después del beso.

–¿Entonces es que te gusta alguien más?

–No. No me gusta alguien más. Pero no somos novios porque nunca me lo pediste.

A lo lejos, observó a Liao Danyi salir con una chica. No se sentía agusto con Jiang Chen en esos momentos, así que se alejó de él, alcanzando a su amigo.

Mientras tanto, Jiang Chen se quedó incrédulo ahí. Las chicas que pasaban cerca lo señalaban porque sin duda su bata blanca lo hacían ver muy guapo, pero él jamás se percató.

¿Por qué se comporta así? Se preguntó a sí mismo mientras observaba a Xiaoxi y los otros alejarse.

La única persona que lo podría poner al corriente de lo que sucedía con Xiaoxi, era sin duda su primo.

Caminó con dirección a la sala de maestros para ver si allí lo podría encontrar.

–Hermano... Doctor Gu –dijo susurrando para no interrumpir a los demás profesores –¿Puedo hablar con usted un momento? –Gu Wei asintió,  cerró la computadora y un minuto más tarde, se reunió con Jiang Chen.

–¿Vienes a preguntarme sobre las clases o sobre Xiaoxi?

–No vengo por ninguno de los dos.

–Vaya. Suena bastante serio. Dime.