You're so 𝗚𝗢𝗟𝗗𝗘𝗡. Harry Styles.

𝟵

𝑻𝒉𝒆𝒓𝒆'𝒔 𝒎𝒂𝒈𝒊𝒄 𝒃𝒆𝒕𝒘𝒆𝒆𝒏 𝒚𝒐𝒖 𝒂𝒏𝒅 𝒎𝒆
𝑵𝒐 𝒃𝒂𝒃𝒚, 𝒕𝒉𝒊𝒔 𝒊𝒔 𝒏𝒐𝒕 𝒂𝒏 𝒊𝒍𝒍𝒖𝒔𝒊𝒐𝒏

«ɪʟʟᴜsɪᴏɴ»
ᴏɴᴇ ᴅɪʀᴇᴄᴛɪᴏɴ
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comodo un poco mi cabello al mismo tiempo que camino para acercar un bolso y salir de mi habitación. El apartamento está en silencio, a excepción del televisor en la cocina. Ronnie está de espaldas hacía la puerta muy concentrada en lo que está cocinando y cierro mis ojos con una sonrisa porque huele delicioso.

—Buenos días. —canturreo.

Ronnie se gira con una sonrisa en sus labios colocando un bowl con huevos revueltos sobre la isla de la cocina, camino hacía ella para poder ayudarla con todo esto, pero la mesa está repleta de comida que ya ha preparado y decido tomar asiento.

—Buenos días, cariño. —contesta—. En un momento termino.

—Se ve todo muy bien aquí. —muerdo mi labio inferior.

—¿Quieres beber café? —me mira—. También hice jugo de naranja más temprano.

—Café, está bien. Yo lo sirvo. —aseguro—. ¿Ya desayunaste?

—No. —resta importancia—. Pero puedo hacerlo después de ti.

—¿Por qué? —niego y sonrío—. Desayunemos juntas.

—Bueno... —frunce el ceño—. Está bien. —acepta.

—Si, siéntete en la plena confianza de hacerlo. —pido—. Ahora vivimos juntas.

—Está bien, cariño. —acepta.

—Bueno, sé que me ayudas con toda la limpieza y también cocinando. —señalo—. Pero está también es tu casa ahora y no es como si vaya a ordenarte cosas. —me río—. Y si necesitas salir o volver a tu casa en cualquier momento, lo harás.

—Eres muy amable, Gabs.  —sonríe.

—No tanto como tú. —guiño un ojo.

—¿Vas a salir? —me pregunta.

—Ah, si. —acerco nuestras tazas con café —. Mi hermana viene a pasar unos días aquí conmigo.

—Pensé que solo eran tú y Charles. —dice.

—No. —niego—. Mi mamá volvió a casarse y me dio una hermana.

—Entiendo. —se ríe.

Toma asiento frente a mi y enseguida comenzamos a desayunar juntas. Comienza a contarme cómo comenzó a trabajar en primer lugar con Charles, se ha dedicado a esto prácticamente toda su vida puesto que creció en una familia muy humilde y tenía que ayudar con los gastos en su casa.

Nunca tuvo hijos, aunque se casó solo una vez y las cosas no funcionaron, sin embargo su hermana menor tiene dos hijas, Carolina de veinte años y Payton de siete y las aprecia tanto como si fueran sus hijas también. Vivía con su hermana desde el momento que el  padre de las chicas falleció por un cancer terminal y desde entonces ayuda a su hermana con todos los gastos.

Recuerda la primera vez que vino aquí para trabajar e incluso ella me recuerda puesto que trabajo un par de veces en la casa de Richard también, lo que parece curioso y sonrío un poco apenada porque realmente no la recuerdo mucho.