Capítulo 46 ✔

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Pov. Ana

—Hola -hago la que no me importa

—A caso está acompañada la princesa -dice rozando mi cara con su mano, me muevo incómoda.

—Te comió la lengua, el ratón -rosa, su mano contra mi pierna descubierta, ahora se pasó.

Veo a Luis apretando los puños, se iba a parar cuando mi mano estampa con la cara del chico, lo cual me mira molesto y confundido, llevando una mano a su mejilla que es de color carmín.

—Maldita perra como te atreves a golpearme.

—Si no quieres uno igual lárgate.

Se me acerca, no puedo moverme porque estoy pegada a la silla.

—Eres una zorra que está mostrando el culo a todo el mundo.

—Lo zorra lo tiene tu noviecita la cual no deja de perseguir a los chicos a pesar quien no puede mirar -me uno a él susurrando- pero nadie puede tocar.

Termino todo dándole un patada en su entrepierna

Tomo la mano de Yoshi y camino a fuera no quiero estar más en esa clase, joder ni así puedo estar en paz, tiene todo bien marcado, pero tiene de pasa como cerebro, a pesar se da como un super modelo

Con que su noviecita es Rosmeri, no lo sabía, solo lo supuse, ella se paró cuando me acerque a él para ir se molesta, eso es más que necesario, juraba que se iba a reír cuando dije eso de su noviecita, pero resulto ser verdad.

Sigo caminando con la mano de Yoshi, me sorprende que no se haya quejado hasta ahora.

—Agg puedes creerlo y pensar que estaba bueno el tipo, pero le quita lo arrogante y machista, se tira como un rico, necesito un pote, la disolución es enorme, Yoshi.

No contesta, no lo tomo importancia, yo voy por la cochera, necesito un helado urgente.

Sigo caminando rápido y hasta ahora no se queja, corro a la moto.

—Yoshi, pásame las llaves, necesito irme de aquí -No recibo respuesta, ¿Estará molesto?

—Yoshi ... -volteo y hay, no está Joshua, sino Luis, veo lo que pasó, había dos manos en la mesa y justo tomé su mano santa mierda.

—¿Qué haces aquí?

—Así que bueno, eh -Dice con ironía, todo de él me dice que está enojado.

—Para qué negar lo obvio, bye voy por Yoshi.

Sigo mi camino hasta que me carga y me lleva a su carro, lo cual me deja encerrada hasta que se suba en él.

—Joder, no te acostumbres a llevarme a así a cualquier lugar que desees -se soba la cabeza haciéndome callar.

—¿Cómo sabías que estaba con Rosmeri? -en serio me vas a preguntar eso.

—Intuición femenina..

—Y sabiendo que está con él me haces tu drama.-lo interrumpo.

—Espera ahí, yo hacerte drama -suelto una enorme carcajada, no se cuento tiempo, me he reído que hasta he llorado y mi estómago me duele, la mirada de él es enojada, pero me vale, creo que le hice un drama ya quisiera suelto un suspiro.

A ver en primer lugar yo para hacerte un drama a ti -lo apunto- debe haber algo y no, no lo hay, entonces lo que te hice no fue un drama sino una consulta, el que hace un mundo en un vaso eres tú -sonrió por mi respuesta.

—Entonces a ti no te importa si me revuelco con otra -"Ok esa pregunta, si me cayó como un balde de agua fría» me hago la pensativa por un momento.

—Nop -me encojo de hombros

«bueno, si me importaría, pero lo aceptaría, me considero un persona con mente abierta y como están las cosas he pensado que no hemos sido o hemos llegado a algo, solo es como un juego que alguien sujete y suelta y eso me harto aunque no busco una relación concreta, no estoy para una desilusión de nuevo»

He estado tanto en mi mente que no me di cuenta de que Luis, está con la mirada perdida como si mi respuesta le hubiera afectado.

—Hey planeta tierra, hay alguien ahí -muevo mi mano enfrente de él.

No se mueve, no hace ni un movimiento, me acerco más a él y nada.

—Ya que el dueño del cuerpo está en otro mundo, puedo hacer esto -agarró sus cachetes y ahogó un jadeo aunque no se vean, son muy suaves, sigo jugando con ellos, es tan relajante.

Interrumpen mi sección cuando me agarran de la cintura lo miró cómo estoy y por la santa virgen de la papaya «que digo se me está pegando las palabras de Noelia» estoy encima de él

—No te muevas así -suelta la primera palabra después de horas, mis manos siguen jugando con sus cachetes, pero él no las aparta, sus ojos están conectados con los míos, «joder por qué juegas así conmigo mundo», ninguno aparta la mirada, es como si no importaras los que pasará a nuestro alrededor, solo existimos los dos y con eso es suficiente.

No aguanto más para unirme a él, lo beso y sé que es un peligro, pero hoy se decide si o sí.

En lo que me convertistes【En edición】Where stories live. Discover now