Harry Potter y el Señor del Rayo

Capitulo 42

N/A:Escenas subidas de tono si no te gustan saltarte las.(Diablos a quien engaño se que querían esto)

Era la noche del Baile de Navidad. Harry se miró en el gran espejo frente a él, aparentemente satisfecho con su apariencia. Llevaba una camisa de seda azul zafiro que combinaba perfectamente con el vestido de Daphne; chaleco y corbata plateados; pantalón negro; y su túnica negra tenía un estilo experto y estaba hecha de seda Acromántula muy cara, con reflejos azul zafiro. La bata era la misma que había usado para la boda de Sirius, pero la había alterado y el color de los reflejos cambió de plateado a azul. Miró hacia abajo y vio sus botas de piel de basilisco. Estaban muy de moda, ya que los había encargado la mejor persona para el trabajo que vivía en Francia. La bruja se sorprendió por la piel de basilisco ya que no estaban disponibles en grandes cantidades; obtener acceso, incluso una pulgada, fue extremadamente difícil, pero ella los diseñó sin dudarlo. Brillaban de color negro bajo los encantos de los relámpagos, pero relucían de un verde negruzco a la luz del sol. Se miró las muñecas y vio un reloj que Sirius le había regalado hace un par de años, y a la derecha estaba el regalo más nuevo de Daphne: un brazalete diseñado para hombres con amuletos de protección que podían detectar venenos y pociones. No eran estrictamente legales ya que la magia usada en el brazalete era cuestionable, pero a Harry no le importaba; fue muy útil. La pulsera era una cadena, con oro en el interior y varios diamantes en el exterior. Harry ni siquiera quería preguntarle cuánto había costado, ya que sabía que era ridículamente caro. El comerciante que se lo vendió debe haber estado derramando bendiciones y elogios a Daphne por simplemente comprarlo y darle tanto dinero. Brillaban de color negro bajo los encantos de los relámpagos, pero relucían de un verde negruzco a la luz del sol. Se miró las muñecas y vio un reloj que Sirius le había regalado hace un par de años, y a la derecha estaba el regalo más nuevo de Daphne: un brazalete diseñado para hombres con amuletos de protección que podían detectar venenos y pociones. No eran estrictamente legales ya que la magia usada en el brazalete era cuestionable, pero a Harry no le importaba; fue muy útil. La pulsera era una cadena, con oro en el interior y varios diamantes en el exterior. Harry ni siquiera quería preguntarle cuánto había costado, ya que sabía que era ridículamente caro. El comerciante que se lo vendió debe haber estado derramando bendiciones y elogios a Daphne por simplemente comprarlo y darle tanto dinero. Brillaban de color negro bajo los encantos de los relámpagos, pero relucían de un verde negruzco a la luz del sol. Se miró las muñecas y vio un reloj que Sirius le había regalado hace un par de años, y a la derecha estaba el regalo más nuevo de Daphne: un brazalete diseñado para hombres con amuletos de protección que podían detectar venenos y pociones. No eran estrictamente legales ya que la magia usada en el brazalete era cuestionable, pero a Harry no le importaba; fue muy útil. La pulsera era una cadena, con oro en el interior y varios diamantes en el exterior. Harry ni siquiera quería preguntarle cuánto había costado, ya que sabía que era ridículamente caro. El comerciante que se lo vendió debe haber estado derramando bendiciones y elogios a Daphne por simplemente comprarlo y darle tanto dinero. Se miró las muñecas y vio un reloj que Sirius le había regalado hace un par de años, y a la derecha estaba el regalo más nuevo de Daphne: un brazalete diseñado para hombres con amuletos de protección que podían detectar venenos y pociones. 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