Harry Potter y el Señor del Rayo

Capítulo 24

"Bienvenido de nuevo, Lord Gryffindor"

Harry se sonrojó intensamente. Pero ya no podía ignorar las diversas heridas que había sufrido. En ese momento, de repente, Ginny Weasley se despertó con un gemido. Sus ojos viajaron al cadáver del basilisco gigante y a un Harry herido y empapado de sangre que estaba junto a él.

"Harry - oh, Harry. Quería decírtelo hoy en la cena, pero seguiste evitándome . Fui yo , Riddle m- me obligó a hacerlo. Lo j-juro. ¿Dónde está Riddle? Lo último que recuerdo - "dijo Ginny.

"Está bien" dijo Harry, su máscara sin emociones volviendo a su lugar. "Riddle ha terminado. Y sé que tú tampoco tienes la culpa. Estabas poseído por lo que claramente era un artefacto oscuro. Vamos. Ambos necesitamos atención médica. Con suerte, los dos podemos salir de esto sin un daño, aunque dudo "dijo mirando su mano derecha. ¿Fueron las lágrimas de fénix suficientes para contrarrestar el veneno que se había extendido por todo este cuerpo?

Ginny balbuceaba sobre su expulsión, pero Harry no le prestó mucha atención. Fawkes los estaba esperando, flotando en la entrada de la Cámara. Harry instó a Ginny a avanzar; Regresaron al túnel cuando las grandes puertas de piedra se cerraron detrás de ellos con un silbido.

Harry tomó la espada y el sombrero con una mano, guardó el diario en el bolsillo y agarró las plumas de la cola de Fawkes con la otra. Le pidió a Ginny que lo tomara de la pierna y volaron por la tubería hasta que finalmente llegaron al baño de Myrtle.

"Estás vivo", dijo rotundamente.

"Lo siento, Myrtle, pero parece que no compartiré tu baño después de todo" dijo Harry secamente mientras acompañaba a Ginny afuera.

"¿Donde ahora?" preguntó Ginny.

"Enfermería" dijo Harry mientras cojeaba. Tenía un dolor terrible porque los hechizos adormecedores ya no parecían tener efecto. Las lágrimas asomaron a sus ojos; con suerte, Madame Pomfrey podría curarlo pronto.

Pero antes de eso, decidió que había algo más importante que eso. "Toby", dijo.

"¿Sí, Maestro Hadrian? Maestro, ¿qué te pasó?" preguntó Toby sorprendido por la apariencia de Harry.

"Tú y el resto de los elfos pueden gritarme más tarde Toby" dijo Harry sonriendo levemente. "Pero por ahora, quiero que tomes esta espada y este diario y lo coloques en la bóveda de alta seguridad en mi estudio en el Castillo Potter. Y asegúrate de aumentar las barreras alrededor del estudio también, por si acaso. los elfos no deben tocarlo. La espada está cubierta con veneno de basilisco y este es su colmillo ", explicó.

Toby asintió y se alejó con la espada y el diario. Ginny estaba boquiabierta ante Harry " ¿Castillo de Potter?" preguntó con incredulidad.

"Mi casa, ahí es donde vivo" explicó Harry mientras cojeaba hacia la enfermería, Ginny lo seguía y se preguntaba qué tan rico era realmente Harry. Una vez que se acercaron, abrió la puerta y entró. Harry gimió mentalmente cuando vio a varias personas allí. Parecía que estaban en el proceso de entregar el borrador de mandrágora a los estudiantes. Todas las víctimas petrificadas estaban sentadas en sus camas, junto con Madam Pomfrey, Horace Slughorn y Lord y Lady Greengrass. Su corazón dio un vuelco cuando vio a Daphne sentada en su cama, sus ojos enrojecidos por las lágrimas, pero su expresión pétrea.

"¡Harry, señorita Weasley!" gritó Slughorn. "Recibimos informes de que la señorita Weasley fue llevada a la cámara y que Harry entró tras ella. ¿Qué pasó?"

"El peligro de la Cámara de los Secretos ha pasado, profesor. Pero ahora mismo, necesitamos atención médica. ¿Señora Pomfrey?" preguntó mirando al sanador residente de Hogwarts.