•°04 Pétalo°•

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Dormir es muy importante para el cuerpo. Nos ayuda a controlar el estrés y mantener un estado de ánimo equilibrado. Pero dormir ahora era lo único que Luo Binghe no podía hacer.

Eran las dos de la madrugada, y aunque intentaba conciliar el sueño cada vez que cerraba los ojos solo podía escuchar la voz de Shen Qingqiu y verlo alejarse de espaldas a él. ¡Esto era imposible! A este paso se quedará dormido en medio del examen.

"Shizun, te lo juro. Me las pagarás por esto." susurró en la almohada. Sus ojos ardían, los nervios y la emoción no lo dejaban ir.

No sabe en que momento se quedó dormido, pero el dolor de cabeza y el ardor de sus ojos le confirmó que no había sido por mucho tiempo. El joven se levanto y se dirigió al baño, evitó pisar las partes del despertador que rompió y una vez dentro se dio una larga ducha.

Con la idea de quitar el sueño, no verificó cuanto tardó. Al salir tuvo que alistarse de forma rápida, se colocó su pulsera, tomó un lapicero y con el cabello aún húmedo salió de su habitación hacia el patio del campus. Ni siquiera tuvo tiempo para desayunar, si no se daba prisa llegaría tarde.

Casi llegando se encontró con Xie Lian, quien al ver su rostro se acercó preocupado.

"Buenos días, Luo." la sonrisa amable en su rostro hizo que Luo se tragara su queja.

"Buenos días, Xie"

"Por lo que veo haz tenido una mala noche. Ven conmigo, los de nuestro año están por allá." señalando en una dirección donde se encontraba un grupo de gente, ambos se dirigieron hacia allí.

Luo Binghe conocio a Xie Lian hace unos días, exactamente, el mismo día que Jiang Wuxian falto a la sesión de estudios.

Debido a la falta del revoltoso pelinegro, Shen Qingqiu le había dicho que solo practicarían en ese momento y que no era necesario reunirse después de su clase de la tarde. Por lo que después de esta Luo Binghe estaba paseando por el campus para terminar de conocer ciertos lugares. En uno de los pasillos se topó con Jiang Wuxian, quien parecía tener una amena charla con Lan WangJi. Al sentir la presencia de alguien más, el chico Lan se despidió del pelinegro y se retiró por otro pasillo.

Jiang Wuxian se acercó y saludó a Luo Bingue con confianza.

"A-Luo" el apodo cariñoso fue escuchado por Lan WangJi, que no le quedó más que alejarse mientras agarraba su tablet con fuerza.

"Creí que tenías algo importante que hacer" Luo Binghe se cruzo de brazos. "Ahora resulta que volviste al delegado una de tus excusas."

"No, no, no. Lo que debía hacer ya lo terminé. Justo estaba de camino a ese horrible pabellón cuando me encontré con Lan Zhan." explicó el chico moviendo sus manos.

"Pues alégrate, ya no tienes que ir." Jiang Wuxian le dio una mirada interrogativa. "Shen Qingqiu dijo que no era necesario que nos reunieramos más tarde." trato de quitarle importancia, pero muy en el fondo de su corazón sabía que le había dolido.

El chico no solo le pidió que dejará de llamarlo por un apodo, sino que tampoco quería pasar tiempo a solas con él, ¡ni siquiera con la excusa del estudio! Luo Binghe sentía una presión en el pecho que no podía describir.

Normalmente, siempre había tenido chicas interesadas en él, incluso había aceptado varias declaraciones y seguía recibiendo llamadas y mensajes, pero no era lo mismo con Shen Qingqiu, no sabía si su coqueteo serviría de la misma forma con un chico. Él sabía que le gustaba, había sentido esa atracción, pero temía que, si invadía su espacio personal, pudiera terminar con un abanico clavado en algunos de sus ojos.

Los susurros de una flor [BingQiu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora