Capitulo 78: ¡La Capital De Los Casinos!

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[Iris: ... No quiero casarme...]


Me estaba mirando en el espejo del baño que proveía una de las habitaciones del hotel, como sí fuera mi única compañía que me comprendiera en estos momentos dejé escapar ese breve murmullo.

Ya estamos en la capital, finalmente... después de 3 o 4 días de viaje completos, estoy aquí para sacar la cara por mi reino.

Para ser sincera, no tengo ganas ahora mismo de hacer nada... es la primera vez, que me entristezco de esta forma, mis sentimientos y responsabilidades se han mezclado en un cataclismo dentro de mi...

Ha este paso los esfuerzos de relajarme en el camino junto con nii-sama se irán por la borda.

[Iris: Aun así... prometí que haría de Belzerg un lugar mejor.]

Sé que el príncipe de este reino tiene mi edad, ¿comprenderá de alguna manera mi situación? tal vez sí mis palabras le llegasen, entonces podríamos llegar a un acuerdo mutuo donde no debamos contraer matrimonio y así recibir la ayuda financiera en la guerra contra el rey demonio.

Agarré uno de los peines que estaba ubicado a un lado de la repisa del espejo, empecé a peinarme mientras todavía seguía en mis pensamientos.

... Nii-sama y compañía salieron a explorar la ciudad, me quedé con la excusa de que debo despejarme primero, estar sentada por horas y horas a veces podría ser muy cansado...

[Iris: De todos modos... voy a seguir adelante.]

No puedo dejar que mis sentimientos se interpongan con mi deber, por que despues de todo...

...

Le prometí que haría del reino un mejor lugar.

...

Me pregunto... así como se preocupa conmigo... ¿estará haciendo lo mismo con ellas?

Bueno, Nii-sama no demuestra tanto su apego hacía la jefa y las demás, pero en el fondo de su corazón, él demuestra su afecta por ellas a su manera.

Dudo mucho de que en un lugar desconocido para ellos se logren separar.

Porque a pesar de que él les diga que son molestas, disfruta mucho estando en su compañía.

Así como disfruta estando a mi lado.

...

...

[Iris: Eh? ... ¿Hay alguien ahí?]

Gracias a que tengo los sentidos bien afinados, escuché el richirrido de la puerta abriéndose con suavidad.

logré asomar un poco la cabeza por él borde de la puerta, delante mía estaban muebles típicos que podías encontrar en una sala de estar, tal como una mesa, un sofá, cuadros que con solo mirarlos deducirías qué se combinan muy bien junto con el color de las paredes, etc.

...

Estoy muy segura de que Nii-sama y las demás se aseguraron de colocar todo bajo llave, o más bien yo fui la que me percaté de este asunto y lo dejé pasar.

Ellos están velando por mi seguridad, sentiría algo de culpa si no disfrutan de su descanso.

[Iris: -Suspiro- Es extraño.]

Konosuba:  Mímica empaticaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora