Prólogo

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Cada día, los rayos del sol se asoman por la ventana iluminando toda la habitación; el canto de los pájaros se hace presente indicando el comienzo de un nuevo día. Un joven dormido se ve obligado a despertar por el cantar que se escucha desde afuera y, de mala gana, se frota los ojos y luego se levanta.

Camina hacia la ducha, abre el grifo y espera a que empiece a correr el agua caliente mientras se quita la ropa de dormir. Cuando se asegura de que el agua está a una temperatura adecuada entra y deja que el líquido caiga sobre su cuerpo y cuando finalmente ha terminado de bañarse, se seca el cabello y se envuelve en la toalla.

La pesadez en su cuerpo es evidente, durante la ducha no ha dejado de bostezar. Caminó hacia el espejo de cuerpo entero en la pared de la habitación y se miró a sí mismo en detalle, notó que las bolsas debajo de sus ojos se notaban más durante la mañana, incluso su rostro expresaba más fatiga de la que normalmente sentía. Luego, se quitó la toalla que lo envolvía y miró hacia su cuerpo;  debajo de su clavícula estaban presentes pequeñas manchas rojas, incluso si miraba de cerca, podía encontrar varias de estas marcas en lugares inimaginables.

Suspiró pesadamente mirando la toalla que caía a sus pies.

¿Es esta la persona en la que me han convertido?, pensó.

Solo ha pasado medio mes desde que ha tenido una vida tan agitada, fuera de su horario, lejos de su familia y trabajo; lejos de esa felicidad que no supo valorar.

Caminó hasta el armario y seleccionó la ropa, el sonido del reloj lo ponía nervioso cada día que pasaba. Y cuando se encontró vestido con un conjunto de ropa negra, se miró de nuevo en el espejo. Estaba agradecido de que al menos no le quitaran su personalidad.

Alguien llamó a la puerta y un hombre con camisa negra y corbata desajustada se asomó.

-Chuya, ¿estás listo para desayunar? -el hombre cuestionó.

-Iré en un segundo.

La puerta se cerró y volvió a mirar al espejo.

¿En qué momento se arruinó su propia vida?

Medio mes antes, sus padres habían estado involucrados en un ataque. Las amenazas de muerte pasaron de llegar a la puerta de su casa durante un mes hasta llegar a diario; no entendía la razón por la que su padre, un excelente médico de carrera que trabajaba para el gobierno, había estado involucrado en tal situación.

La situación se salió de control, la protección del gobierno no fue suficiente y su padre tuvo que verse obligado a contratar protección privada y, de ser necesario, alguien que pudiera acabar con los que estaban detrás de la persecución.

Dicho hombre cumplió con su misión, liberó a los padres del joven llamado Chuya de ataques y amenazas que ya no tenían un solo objetivo, pero ni siquiera el mismo salario de sus padres alcanzaba para pagar el esfuerzo de proteger a tres. El "guardaespaldas" tenía una personalidad y una mente mucho más oscura que las mismas personas que estaban detrás del médico.

-Entonces permítame poner el costo a pagar sobre la mesa.

Dijo el hombre serio y su mirada pasó del médico a Chuya, los segundos que pasaron fueron eternos para el joven, pero para el guardaespaldas la cosa fue muy diferente.  Sonrió levemente, estaba decidido.

-Tienes una deuda que pagarme, serás mi amante por un mes.

Los padres no se opusieron, el padre sorprendido tomó la mano del hombre y le agradeció por cuidarlos durante este momento difícil.

Después de eso, comenzó el infierno en el que vivía.

Fake Lover | Soukoku - BSDWhere stories live. Discover now