Fake Lover | Soukoku - BSD

Epílogo.

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Epílogo

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En el gran estudio, cuatro personas estaban reunidas. Los dos invitados, miraban con curiosidad la cantidad de libros que tenían frente a ellos, justo a espaldas de su anfitrión.

Un hombre con vendas en el ojo, brazos y cuello guardó silencio un momento después que sus invitados tomaron asiento; y un joven pelirrojo permanecía de pie a mano derecha.

—Gracias por venir. Lamento tener que hacerlos esperar, este mes seguramente no fue muy fácil para ustedes. Díganme, ¿han vuelto a estar en peligro?

—No realmente —respondió un hombre en traje azul—. Como le dijimos en nuestro último encuentro, la preocupación sobre nuestro hijo es lo único que no nos ha abandonado.

—Estuvimos contando las horas y los minutos ansiosos del día en que nuestro querido hijo regresara a casa. Finalmente es el día.

Dazai guardó sus palabras. No tenía nada que decir respecto al trato que ya había finalizado, sin embargo, tenía que encontrar las palabras adecuadas para informarles del cambio de planes.

—No voy a volver —se apresuró a decir el pelirrojo.

—¿Qué? —los invitados cuestionaron al unísono— Hijo, si estás siendo amenazado por este hombre tienes que decirlo ahora.

—No estoy siendo amenazado —chasqueó la lengua—. Pensé que esto sería muy difícil para decir porque no me tomarían en serio, pero en realidad, estoy cómodo aquí.

—¿Qué clase de broma es esta, Chuya Nakahara? —enfadada, exigió explicaciones.

—No se trata de nada de lo que están pensando... Durante toda mi vida no hice más que vivir rodeado de la indiferencia materna, mi padre siempre estuvo ocupado con el trabajo... ¿Quién en su sano juicio entrega como moneda a su hijo?

—Chuya, hijo... Tenemos una explicación para eso...

—No me interesa escucharla —interrumpió con firmeza—. Lo hecho, hecho está. Y aunque vuelva a casa...

—Lo que Chuya-kun está tratando de decir, señor y señora Nakahara es que —Dazai intervino—, tiene una relación formar conmigo y ahora le es imposible alejarse de mi. No importa el medio o cuanto tengan para ofrecer, su hijo ahora es mi propiedad.

—¡¿Una relación?! ¡¿Que demonios está pasando aquí?! —la mujer no pudo contener su ira.

—Decir lo que pasó en este periodo tan largo no está estipulado en nuestro trato; ustedes pagaron con su hijo porque no tenían otro medio para hacerlo aun cuando sabían que mi trabajo no es fácil.

Dazai se puso de pie.

—Desgraciadamente, no soy responsable de la nueva decisión de Chuya. Les prometí que lo devolvería sano y salvo, deben estar felices sabiendo ahora que no tiene un sólo rasguño, pero mis intenciones con él ahora don diferentes.

—M-Mi hijo... No... Él... ¡Imposible!

—Entiendo —asintió el hombre de mediana edad—. Si ese es el caso...

—Mi promesa sigue siendo la misma. No voy a lastimar a Chuya, pero si podemos obtener formalmente su aprobación para esto...

—¡¡No soy un niño!! Tu... bastardo...

—¡Mi hijo no puede casarse con un hombre! ¡¿Quién va a darme descendencia?!

—Dazai-san, ¿podemos hablar en privado?