BAD BOY || KookMin

BAD BOY 16

«Era un día jueves cuando Min YoonGi caminaba como todas las noches en el parque que estaba cerca del gimnasio. De regreso a casa le gustaba pasar por ahí ya que sentir la frescura del viento y ver la imagen de la hermosa luna le alegraba las noches; sin embargo aquella ocasión fue diferente.

El castaño siempre se repetía a si mismo que ayudar a los demás no debía ser un acto de conveniencia ni beneficio, creía que si deseaban ayudar al prójimo era sin buscar nada a cambio, y por ello, cuando vió que un grupo de cuatro hombres estaban rodeando a un quinto, se acercó para averiguar qué era lo que estaba pasando.

—El celular, y el reloj— escuchó decir a uno de ellos— ¡Rápido!

Y entonces supo que a ese chico le estaban robando, por lo que molesto se acercó dispuesto a detenerlos, solo que no se esperaba que el joven de cabellos grises, sin decir nada, sin hacer gran movimiento, lanzara una patada a la entrepierna del tipo, una que definitivamente lo tiró al suelo sin posibilidad de levantarse pronto.

—No te doy nada— dijo con una voz bastante grave que a YoonGi le erizó los vellos de la piel.

Y lo siguiente fue algo que lo dejó sin habla, pues el chico sabía pelear bastante bien, tanto que los ladrones al final fueron los que terminaron huyendo.

—Cobardes— murmuró el chico.

YoonGi no supo exactamente porqué, pero se acercó como si sus piernas se lo hubieran ordenado, y cuando estuvo a escasos centímetros de tocar su hombro para preguntarle si estaba bien, por acto reflejo el peli gris se dió la vuelta y le propinó un puñetazo en la cara, un golpe tan duro que trajo de vuelta a YoonGi sobre la tierra.

—¡Pendejo!— fue lo primero que salió de sus labios cuando sintió la sangre fluir de su nariz, acompañada por un fuerte dolor.

—¡¿Qué mierda?! ¡¿Por qué llegas así de la nada?!

—¡Solo te iba a preguntar si estabas bien!

Y el peli gris entonces se sintió un poco avergonzado, por lo que minutos más tarde se encontró sentado en un banca junto al castaño, quien tenía un papel en su fosa nasal para detener el sangrado.

—De verdad lo lamento. Pensé que eras uno de ellos— y realmente estaba arrepentido, pero no solo por haberlo golpeado, sino porque también pensó que su vestimenta lo hacía ver cómo delincuente.

—Me di cuenta— murmuró señalando la zona donde lo golpeó—, pero aún así me sorprende lo bien que peleas.

El peli gris sonrió apenado y frotó sus manos con algo de nerviosismo.

—Bueno, mi hermano me enseñó a pelear.

—Entonces debe ser un gran maestro, porque ese golpe enserio me sorprendió.

—Y a mi me sorprendió que no te desmayaras. Ni siquiera te moviste de tu lugar, generalmente las personas pierden el equilibrio cuando los golpeo de ese modo.

—Hoh, así que eres un chico problemático.

—Solo aveces.

Hubo un breve silencio, aunque no uno incómodo, sino más bien tranquilo, donde ambos chicos se quedaron mirando fijamente hasta que el peli gris desvió sus ojos a otra parte.

—Soy YoonGi, por cierto.

—Taehyung.

Y a partir de ese día, ambos se encontraban "casualmente" en la misma banca del parque durante la noche, donde solamente miraban la luna y hablaban de cosas triviales, pues para ambos resultaba incluso relajante.